5.4 INICIOS DE PRIMAVERA

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5.4 NO SOY TU FAN

HAROLD HEMERICH

—Tienes que dominar el arte del ocultamiento. —murmuró Jerry, mi hermano.

Estaba agotado después de un viaje tan largo. Solté un bostezo mientras me dirigía hacia la máquina expendedora del aeropuerto. —Vaya, es un ojo de la cara. —Saqué un billete, dejándolo que la máquina se lo tragara para poder seleccionar un café en lata. —Ahh, —solté un suspiro de alivio.-ya necesitaba uno.

—Ok, ya tengo todo listo. —habló Jeff con su iPad en mano.

—Recuerdas que es discreto todo este asunto. —le recordé estirándome un poco.

—Una semana no más, de ahí partiremos a trabajar en tu siguiente álbum.

—De hecho lo haré aquí en DeLuan. —le comenté a lo que lucía sorprendido. —Así que mejor hablemos de cómo lo alargaremos aquí.

—¡Mire, conseguí gomitas de Koala! ¿no es genial?

Después de eso me retiraría de la música. Quizás alcance hacer una gira o un mini tour, pero mi voz ya no da para más, y sabía que tarde o temprano las consecuencias me alcanzarían de esa decisión, pero no podía arrepentirme de eso.

—El auto llegó, es hora de que vayamos al hotel, luego tienes unas entrevistas y el paseo del centro comercial para ver lo de la gigantografía con tu colaboración con... blah blah.

🌺🌺🌺🌺

Estaba con una gabardina negra esperando que más personas se nos unieran. A lo que sé, mi llegada era algo secreta, así mis fans no podrán literal crear una avalancha y no tendría que salir corriendo o escondido en una maleta. -sacudí mi cabeza.- Esa noche oscura aún me persigue.

Vi mi reloj, a lo que tenía claro mañana estaría viéndola. Y eso bastaba para que la espera sea larga y tortuosa.

—Muy buenas tardes, Sr. Hemerich, —un señor algo mayor con traje me extendió su mano. Atrás de él se encontraban más hombres, a lo que supuse que serían los otros ejecutivos o más personas mayores que querían estrechar mi mano. —como le iba indicando a su manager, estas instalaciones fueron construidas en el año...

"Otra charla aburrida."

—Y por aquí iría su gigantografía, claramente cuando esté hecha la publicidad al respecto y...

—¡Es Harold Hemrich!

—¡¿Dónde?!

—¡Sí es él!

—¡Enciende tu live, hola chicos, para decirles que Harold se encuentra aquí en el centro comercial DeLuan!

De repente no eran los ejecutivos los que me amontonaban sino que una masa de personas.

—¿Me firmas mi hotdog? —habló un chico castaño hacia mi dirección. —Te juro que no la lamí.

—¿A mí me firmas la frente? —preguntó otra persona.

—¿Cuándo sacarás Primavera?

—¡No te vayas a retirar por favor! —se echó a llorar uno.

—Me encantó tu canción Hincados ¡Eres genial!

—¿Qué? —musité. —Ehh, gracias por su apoyo chicos. Yo...

—Harold, tenemos que sacarte de aquí.

—Solo son fans, Jeff, relájate....

Puso su iPad en mi cara y fue ahí donde mi mandíbula cayó a los suelos.

—Últimos informes, Harold Hemerich está aquí en DeLuan, nadie sabe el porqué, solo que está en vivo en los celulares de sus fans y le pidieron firmar un Hotdog, quizás la estrella a querido pasar desapercibida por estos medios, pero nosotros seguimos en pie.

Me temblaba la ceja y no sabía cómo esto era posible.

"Noticias de calidad." rodé los ojos.

—Deja te lo firmo... —tomé el bolígrafo y empecé a trazar eso en la frente de la chica.

—Harold, vámonos.

Me acerqué un poco más a Jeff. —No tienes plan, déjame firmar y ya...

Puso otra vez el celular frente a mis ojos. "Mierdaaaa."

—Más fans se están acercando al centro comercial, es una ola masiva de gente. Obviamente el mundo enloquecería después de unas semanas sin ver a la joven y sexy estrella. —puse una mueca ante esto. —¡Oh, Rony! Hasta nos está viendo en estos momentos. —no sé cómo lograron enfocar mi cara viendo el iPad. Esto era bizarro.

—Tu seguridad va primero.

—Chicos, quiero anunciarles algo que he estado guardando en secreto.

—Harold, ¿qué haces? —susurró Jeff con una mano en mi hombro.

—Solo sígueme la corriente, —murmuré. —en la otra esquina está mi gigantografía más nueva. El que saque una foto primero y la postee etiquetándome, lo invitaré a una de mis próximas secret sessions.

—¡AHHHHHHHH!

—Es hora de huir. —le murmure a Jeff.

—No, tu anda, te espera un carro Arrinera café en la salida. Yo detendré esto.

Asentí y corrí hacia el ascensor cuando los pares de ojos corrían por el mall. Pude respirar un poco, hasta que vi que era algo transparente y varias manchitas de abajo lo único que hacían era señalarme.

—Madre mía, estoy frito.

Cuando las puertas del ascensor bajaron, ya tenía una fila pequeña de seguridad con varios fans gritando mi nombre. Uno de los guardias de seguridad se acercó hasta a mí.

—Debes ir al estacionamiento, reportan que las personas de arriba están bajando ya.

—No sé donde queda. —hablé con preocupación.

—Yo te guío, pero antes me das un autógrafo...

—¡En el camino, en el camino! —le dije viendo cómo se estaban avecinando a lo que el hombre calvo asintió.

Luego de dejarme solo en el estacionamiento, fue donde en verdad me pregunté. —¿Cómo putas se ve un Arrinera café? —puse la mano en mi cintura soltando un suspiro.

—¡Harolddd!

Al primer carro café que vi me encerré.

—Phewww, estuvo cerca. —solté una risita nerviosa.

—¿Harold?

"Ay, no, diosito dime que me subí al carro de alguien que no me va a secuestrar."

Al verla se me hacía conocida. —¿Conoces a Kiah?

Ella asintió. —¡Eres Harold....! —le tapé la boca.

—La verdad me está comenzando a fastidiar mi nombre. —murmuré. La solté y ella seguía sin quitarme la vista encima. —¿Me harías un favor?

—¡Claro! Kiah no me creerá cuando le cuente, ¿qué hago por ti?

—Me puedes llevar a la clínica donde está Elena Nilsson.

Ella asintió. —Sí, pero que quede claro que no soy fan tuya.

Suspiré acomodándome en el asiento. —Gracias.

Al encender el carro y salir del estacionamiento, sentí un gran alivio. Sobreviví lo mejor que pude.

—Pondré algo de música...

"You call my heart" empezó a sonar. Ella helada sacó el reproductor, abrió la ventana y lo lanzó fuera del carro.

—No era mío.

—Me queda claro. —musité.

"HASTA QUE ME OLVIDES."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora