Se busca amor |Davenport #1| +21

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Vamos a decir que este es un especial de 100k lecturas <3

PD. A ver si adivinan quién es quién

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Rebeca

Conocer a personas que comparten gustos literarios contigo es una experiencia que sana el alma. Sólo había participado en una firma de libros y estaba bastante nerviosa por ser parte de esto, especialmente porque estoy esperando a que, en cualquier momento, llegue la escritora.

Xander me dejó hace solo unos segundos y yo estoy poniendo todo mi empeño en salir de mi confort y caminar hacia el grupo de mujeres. Hay una que se destaca un poco más, ya que es alta. Debe medir cerca de un metro ochenta y su cabello le cubre los hombros.

—Hola —me acerco, esperando el rechazo, pero recibo sonrisas cálidas.

La primera en hablarme es una mujer que ronda los treinta y tiene el cabello ondulado, que cae de forma desacomodada hasta su cadera.

—Hola —me sonríe.

Tras ella, una seguidilla de saludos.

—¿Estás sola? —pregunta la rubia—. ¿Quieres quedarte con nosotras?

—Vine con un amigo, pero está hablando con su primo —digo vagamente—. Lo lamento, me acerqué porque creí que también eran lectoras.

—Lo somos —una chica cubierta en tatuajes, con una apariencia que la destaca bastante del grupo, ladea el rostro—. ¿Cómo te llamas?

—Rebeca —me dicen sus nombres casi al unísono y apenas retengo algunas vocales—. ¿Siguen a Juliette desde hace mucho tiempo?

Una mujer un poco más mayor con el cabello rojizo, sonríe.

—Se podría decir que desde los comienzos.

—Exacto, somos como... un club de fans.

—Qué exageradas.

—La van a asustar. Quita esa cara de loca.

La de los tatuajes sale de la ronda.

—No les hagas caso, les gusta bromear —resopla y mira que llevo uno de los libros de la autora en mi mano—. ¿Ya lo has leído?

—Si, como cinco veces... Bueno, leí todos como cinco veces. Algunos más.

La mujer más alta mira mi camiseta.

—¿Y tienes un favorito?

—Verde... o Rojo. No, en realidad es Naranja o Amarillo, pero el primero que amé fue Azul y no podría elegir uno solo, ¿ustedes sí?

La de los tatuajes se ríe.

—Se me hace imposible —murmura—. ¿Vives aquí?

Asiento.

—¿Ustedes?

—Venimos desde Valencia.

—Vaya, ¿y ya han visto a Juliette? Es que, como no hay fotos de ella en ningún lado, ni siquiera sé cómo luce.

—Cuando la veas, sabrás que es ella —comenta la más bajita.

Me río.

—No sé, pero creo que voy a tener un ataque de ansiedad cuando la vea. Ni siquiera sé si pedirle una foto o no, ¿se le puede pedir fotos? ¿Ustedes ya hablaron con ella?

—Sí, no te preocupes —asegura la rubia—. Es muy agradable, ni siquiera notarás que es una escritora de Best sellers.

La que no había hablado hasta ahora, pone los ojos en blanco.