SOLARA || The Flash

𝟎𝟑. ¿𝐂𝐫𝐞𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐥𝐨 𝐢𝐦𝐩𝐨𝐬𝐢𝐛𝐥𝐞, 𝐁𝐚𝐫𝐫𝐲?

"Mamá me dijo que no desperdiciara mi vida. Ella dijo; abre tus alas, mi pequeña mariposa. No dejes que lo que ellos digan te mantenga despierto por las noches, ellos no pueden detenerte porque las alas están hechas para volar."

                  Wings 𝙗𝙮 Little Mix

               ─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───

Para entender lo que voy a contarte, tienes que hacer algo primero; Tienes que creer en lo imposible.

¿Puedes hacerlo?

—¡Señor Larkin! Si pudiera escucharme un momento, tengo... -Elara se movía entre los escritorios de la oficina, siguiendo los pasos rápidos de Eric Larkin, el editor en jefe del periódico.

La periodista se había dedicado a reunir toda pieza de información y multimedia que respaldara su teoría sobre la existencia del rayo. Elara se encargó de armar un portafolio ordenado por fechas con imágenes que encontró en los blogs que ella y Iris estuvieron navegando hasta altas horas de la madrugada, pero Larkin apenas escuchó a la rubia mencionar al misterioso superhéroe, se dio la vuelta y comenzó su recorrido en dirección a su oficina, con Elara pisándole los talones.

—Señorita Brooks, le recuerdo que esto es un periódico serio, no una revista de teorías conspirativas. No escribimos ficción.

—¡Señor Larkin! ¡Es lo que intento mostrarle! No es sólo una teoría conspirativa. Hay imágenes que- ¡Oh! -Elara se detuvo abruptamente para no chocar contra su jefe, quien se había girado en su dirección. El hombre mayor entrecerró los ojos antes de arrebatar el portafolios de las manos de la rubia y ojearlo con aburrimiento.

—¿Esto es una broma? -Elara vio la expresión del hombre (y la vena saltada en su frente) y tuvo que forzarse a no dar un paso atrás.

Incluso los aliens indestructibles se sentían intimidados por sus jefes.

—¿Esto te parece un superhéroe? Ni siquiera parece una persona. Podría fotografiar el reflejo del sol en el parabrisas de mi auto y tendría el mismo resultado. ¿Creerías que hay un héroe recostado en mi parabrisas, Brooks? -Elara negó con la cabeza, sus vista fija en las puntas de sus zapatos.

Larkin dejó salir un bufido antes de regresarle el portafolio, el cual Elara apenas atrapó antes de que la golpeara en el abdomen. —Ahora deja de perder mi tiempo; La próxima vez que vengas con una idea asegúrate de que sea para una noticia, no para una novela gráfica.

Larkin cerró la puerta de su oficina una vez estuvo dentro, y Elara dejó salir un suspiro antes de recomponerse, no dejando que aquella negativa la desanimara en su investigación.

¿El quería algo real?

Bien. Ella le daría algo real.

                                   ─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───    

Para muchas personas, el mundo cambió hace diez meses; el día en que el acelerador de partículas explotó en Ciudad Central.

Quizás perdiste a alguien importante, o quizás uno de tus seres queridos resultó afectado ante tal catástrofe.

Quizás fuiste tú cuya vida tomó un giro inesperado.

Sea cual sea tu posición en esta situación, hay algo que todos podemos entender:

Ahora sabemos lo rápido que la vida puede cambiar, y lo importante que es valorar lo que tenemos mientras aún lo tenemos.