𝟐𝟖. 𝐒𝐞𝐫𝐚́𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐠𝐫𝐚𝐧 𝐡𝐞𝐫𝐨𝐢𝐧𝐚.

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"I wish I could un-recall
How we almost had it all
Dancing phantoms on the terrace
Are they second-hand embarrassed
That I can't get out of bed?
Cause something counterfeit's dead."

      loml 𝙗𝙮 Taylor Swift.

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El ruido típico llenaba la oficina principal del Picture News; teléfonos sonando, reporteros hablando por teléfono con posibles informantes, y el sonido constante de teclados siendo presionados. Elara Brooks se encontraba inclinada sobre su escritorio, con los ojos azules pegados a la pantalla mientras sus dedos se movían de forma casi automática sobre el teclado. Su cabello rubio caía en ondas sueltas sobre sus hombros, algo despeinado después de la larga mañana.

Detrás de ella, Jeremy intentaba balancear una charola con bagels y tazas de café en una mano, mientras sujetaba una carpeta en la otra.

—Señorita Brooks, traje lo que me pidió... Oh, no-

Elara soltó un suspiro, cerrando los ojos por un momento para reunir paciencia. No necesitaba ver para saber lo que seguía a continuación. El ruido de las tazas quebrándose y el café derramándose por el piso eran, en realidad, parte del ruido típico de la oficina.  Al menos desde que Jeremy se había unido al equipo.

—Jeremy... -dijo, girando en su silla. —¿Qué te dije sobre llevar demasiadas cosas al mismo tiempo?

—Que no lo hiciera. -murmuró él, agachándose para recoger las tazas caídas.

—Y sin embargo, aquí estamos. -Añadió con cansancio y se levantó, agarrando unas toallas de papel de su escritorio. —Solo... limpia esto, y trata de no inundar la oficina, ¿sí? -Dijo suavemente, pensando en que quizás sería buena idea comentarle a Larkin que cambiara la porcelana por plástico, por el bien del presupuesto anual.

—Sí, señorita Brooks. Perdón, señorita Brooks. -murmuró Jeremy, apurándose a limpiar el desastre.

Elara negó con la cabeza, conteniendo una sonrisa.  A pesar de sus constantes torpezas, Jeremy tenía buenas intenciones.

Apenas había girado de regreso a su escritorio cuando una voz familiar la hizo mirar hacia arriba.

—Sabía que era buena idea llegar a Jitters antes de venir aquí.

Alzando la vista, Elara se encontró con la imagen de Eddie Thawne parado a unos metros, sosteniendo dos cafés en las manos y con su clásica sonrisa despreocupada adornándole el rostro. Elara sonrió.

—Hey, Eddie. -Saludó, recibiendo contentamente el café que el hombre extendió en su dirección. —¿Buscas a Iris? Ella está fuera en una entrevista.

El rubio negó. —Sé que Iris no está. Vine a verte a ti.

—¿A mí? -preguntó, arqueando una ceja mientras tomaba el café.

—Pensé que tal vez te vendría bien un descanso, dar un paseo conmigo...

Detrás de ella, aún recogiendo el desastre causado, Jeremy suspiró al escuchar las palabras del hombre. —Gracias al cielo. -Murmuró para él mismo, recibiendo una mirada ofendida por parte de la rubia, y haciendo reír al mayor.

Rodando los ojos, Elara se puso de pie. —Está bien. -dijo, agarrando su abrigo. —Vamos antes de que cambie de opinión y decida despedirlo.

Eddie miró al interno con una sonrisa divertida y caminó tras la rubia, saliendo de la oficina.

La ciudad estaba tan activa como de costumbre, y el par de rubios caminaban por la acera, cada uno con un vaso de café caliente en la mano.

—Entonces... -comenzó ella, mirándolo de reojo. —¿de qué se trata esto? No es que no aprecie tu visita, pero...

SOLARA || The FlashDonde viven las historias. Descúbrelo ahora