N/A: Buenas, buenas!!! Soy consciente de que me vais a querer asesinar cuando leáis esto pero tenía que hacerlo, prometo que no va a quedar así la cosa y que lo voy a solucionar jiji, espero que aunque queráis matarme os guste y le deis mucho amor, nos vemos en comentarios, besos!!!
Aterrizamos en la capital española ya por la noche debido al cambio horario, Ona nos había comentado que para cuando llegasen a Madrid les habían preparado una bienvenida con los aficionados en una especie de parque, y que luego la federación organizaba una fiesta en el hotel en el que se iban a quedar, pero que a ella no le apetecía nada estar ahí, que iba a ver como se podía librar de asistir porque no teníamos ánimos de celebrar con Rubiales y con su entrenador después de todo lo que estaba pasando.
Lucy y yo, por nuestra parte, reservamos un hotel en el centro mientras estábamos en el avión, así que según salimos del aeropuerto cogemos un taxi y ponemos rumbo a nuestro hotel.
- Oye K, ¿te apetece comer algo? – pregunta Lucy después de que nos hayamos tirado sobre la cama nada más cerrar la puerta de la habitación.
- Sí, pero mejor pedimos servicio de habitaciones, que no me apetece ver a nadie más que no seáis tú u Ona.
- Eso está hecho, a ver si nuestra catalana se puede escapar de esa dichosa fiesta- dice mientras enciende la tele de la habitación.
En ese instante la pantalla nos muestra las imágenes en directo de la llegada de las chicas, primero en el autobús descapotable camino al parque, y luego sobre el escenario, donde un presentador las va haciendo preguntas y demás cosas.
En todo momento se ve que las jugadoras están unidas, se divierten entre ellas cantando y haciendo tonterías, pero se ve claramente una separación abismal entre el equipo y todo su cuerpo técnico, así como con la gente de la federación.
En un momento dado, el presentador le cede el micrófono a Vilda, el entrenador de Ona, que, después de decir unas cuantas palabras, le pasa el aparato a Rubiales. En ese momento Lucy y yo nos miramos temiéndonos lo peor, y es que vemos como poco a poco, el presidente de la federación española trata de ir acercándose a Ona, que no sabe muy bien por donde escapar de esa situación sin que sea muy obvio. Por suerte Ale e Irene están ahí para, de cierta manera, cortarle el paso a Rubiales, dejando que Ona se escape por detrás de ellas para colocarse al lado de Eva Navarro, que es una de sus mejores amigas.
- Menos mal que Ale e Irene estaban al loro- digo yo después de unos segundos.
- A mí lo que me encantaría saber es qué coño se le pasa a ese ser por la cabeza antes de actuar ¿Acaso piensa? – pregunta Lucy bastante furiosa.
- Ey, tranquila Luce, no ha pasado nada al final, Ona sabe cuidarse sola, y también tiene gente a su lado que la cuida como Alexia e Irene.
- Tienes razón, pero es que no voy a estar tranquila hasta que no la tengamos aquí con nosotras.
En ese momento no puedo evitarlo y salto sobre ella, que está sentada en la cama, para abrazarla, aunque nuestro momento no dura mucho, ya que nos vemos interrumpidas por unos golpecitos en la puerta del servicio de habitaciones.
Al final terminamos apagando la tele y cenando tranquilas sin hablar de mucho, nuestros teléfonos están saturados de notificación, tanto por la final de hoy, como por el grupo de las lionesses que andan preguntando por qué nos hemos ido antes de tiempo y sobre todo si estamos bien o nos ha pasado algo a nosotras o nuestros seres queridos.
La verdad es que no podemos pedir mejores compañeras del equipo nacional, somos todas una gran familia con Sarina a la cabeza que es como nuestra segunda madre.
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ONE SHOTS- FUTBOL FEMENINO
ФанфикEste libro se compondrá de pequeñas historias protagonizadas por diferentes futbolistas. Sentiros libres de dejarme en comentarios de quienes queréis que escriba y poco a poco iré concediendo todos vuestros deseos. Espero que lo disfrutéis.