Capitulo 33: Nueva temporada

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El hijo mayor de la familia Xiao, Xiao Jin , de 30 años, estaba en el patio de la gran mansión de su familia Xiao bebiendo alcohol, sentado en el sillón con varias mujeres a su alrededor.

Y en su mente le vienen flashback de su crimen hace tres años.

En la intimidad de un lujoso hotel, la esposa de Xiao Jin , Haily, hizo un descubrimiento devastador.

Encontró a su esposo en los brazos de otra mujer. La furia y el dolor la consumieron, y en un acceso de ira, Haily buscó su cartera, desesperada por tomar medidas drásticas contra la traición de su esposo.

Haily: ¿Cómo pudiste hacerme esto, Xiao Jin ? ¿Cómo pudiste traicionarme de esta manera?

Xiao Jin: Lo siento, Haily. Fue un error, un momento de debilidad. No sé qué decir para remediarlo.

Haily: ¡Un momento de debilidad! ¿Es eso lo que piensas que fue? ¡Disparaste contra mí, Jin Qi! ¿Cómo puedo perdonarte por eso?

Xiao Jin: No fue mi intención, lo juro. Pero debemos proteger a la familia, a nuestro legado. Por favor, Haily, trata de entender.

Haily: ¿Proteger a la familia? ¿A costa de qué? ¿De mi vida? No puedo creer que estés tratando de justificar esto.

Xiao Jin , desesperado por evitar un escándalo, intentó arrebatarle la pistola a Haily. En medio del forcejeo, un disparo resonó en la habitación, y el mundo de Xiao Jin  se desmoronó cuando vio a su amada esposa caer herida de muerte.

Con el corazón lleno de remordimiento y pánico, Xiao Jin  miró a la mujer junto a él, su amante, y en un acto de desesperación, la noqueó para ocultar la verdad de lo que realmente había sucedido. Llamó a sus socios para que manipularan la escena del crimen, creando una versión falsa de los eventos para protegerse a sí mismo, culpando del crimen a su amante.
..
Xiao Jin se ve interrumpido en el patio de la mansión por su madre, quien llega con una furia.

Aún rodeado de mujeres, recibe una cachetada contundente que lo saca bruscamente de su ensueño.

Madre Xiao: ¡No puedo creer que tú, mi primogénito, sigas así!

Xiao Jin  intenta justificar su comportamiento, pero su madre lo interrumpe y echa a las mujeres del lugar.

Xiao Jin : Madre, no seas aguafiestas. Estoy disfrutando.

Sin embargo, su madre lo hace enfrentar la realidad de sus acciones pasadas con una gran severidad.

Madre Xiao: Hace tres años oculté tu crimen, ¿y así me lo agradeces? Lo único que te pido es que por favor seas el heredero. No quiero que ese bastardo de tu medio hermano, Tian Yi , ocupe tu lugar.

Con un gesto de amargura, su madre le arrebata el vino a Xiao Jin  y arroja la botella al suelo, llamando al mayordomo para que lleve a su hijo a la habitación.

La madre de Xiao Jin se vuelve hacia el mayordomo con una mirada inquisitiva.

Madre Xiao: ¿Y mi hija Xiao Qi sigue en sus clases de té? ¿Está aprendiendo las etiquetas adecuadas?

Mayordomo: Sí, señora. La señorita Xiao Qi continúa asistiendo a sus clases de té con la maestra de etiqueta. Está progresando satisfactoriamente y sigue demostrando un gran interés en perfeccionar sus habilidades.

Madre: Bueno, asegúrate de que siga recibiendo la mejor educación posible. Las habilidades de etiqueta son fundamentales para una joven de su posición. Quiero que esté preparada para asumir su papel en la sociedad con gracia y elegancia.

El mayordomo asiente con deferencia antes de retirarse para cumplir con las órdenes de la madre de la familia Xiao.

La madre de Xiao Jin  y de Xia Qi detiene al mayordomo antes de que se retire y le formula otra pregunta con respecto a su menor hija Xiao Qi de 17 años.

Madre Xiao: Antes de que te vayas, ¿cómo van las notas de Xiao Qi en matemáticas?

El mayordomo responde con una sonrisa tranquilizadora.

Mayordomo: La señorita Xiao Qi es una chica muy amable e inteligente. De hecho, es la mejor de su grado escolar en matemáticas.

La madre Xiao asiente satisfecha, pero luego se sumerge en sus pensamientos y pregunta más.

Madre Xiao: ¿Han encontrado un tutor de matemáticas para ella?

Mayordomo: Aún no hemos encontrado un tutor adecuado para la señorita Xiao Qi. Estamos buscando activamente.

La madre Xiao, con un gesto de furia, apresura al mayordomo para que encuentre rápidamente un tutor de matemáticas para su hija.

Madre Xiao: ¡Apresúrate y encuentra un tutor de matemáticas para Xiao Qi! No puedo permitir que su educación se vea comprometida por más tiempo.

El mayordomo asiente con diligencia, captando la urgencia en la voz de la madre Xiao, y se retira rápidamente para cumplir con su orden.

En la privacidad de su habitación, Xiao Qi se sumerge en su mundo de arte, rodeada de los cuadros que ha creado con tanto cuidado y pasión.

Con resignación, esconde sus obras en su armario secreto, lejos de la mirada de su madre, quien no comprende su amor por el arte y le ha prohibido expresarse de esa manera.

Con un cuadro en blanco frente a ella, Xiao Qi deja que su imaginación vuele y su mano se mueva con gracia y elegancia.

Con cada pincelada, da vida a un rostro, un rostro que siente familiar, como si lo conociera de una vida pasada.

Mientras sus trazos dan forma al rostro del chico guapo en el cuadro, Xiao Qi escucha los pasos acercándose a su habitación. Con un movimiento rápido, esconde el cuadro en su armario secreto, asegurándose de que esté fuera de la vista antes de que la puerta se abra.

La madre de Xiao Qi entra en la habitación con una mirada severa, y Xiao Qi respira aliviada al ver que su obra de arte está a salvo escondido.

Xiao Qi se esfuerza por mantener la compostura, mientras su madre inspecciona la habitación, Xiao Qi reza para que su secreto permanezca seguro en su escondite, lejos de los ojos críticos de su madre.

La madre de Xiao Qi la mira con furia, sus ojos destilan desaprobación mientras le advierte con firmeza.

Madre Xiao: Xiao Qi, te prohíbo que te acerques a tu hermano bastardo, Tian Yi. No quiero que su influencia te corrompa o te distraiga de tu deber como mi hija legítima.

Xiao Qi, sintiéndose desilusionada por la injusticia, decide defender a su medio hermano.

Xiao Qi: Pero madre, es injusto tratar así a Tian Yi. Él también es parte de nuestra familia y merece ser tratado con respeto y amor.

Antes de que pueda terminar su protesta, la madre de Xiao Qi la abofetea con fuerza, cortando sus palabras con brutalidad.

Madre Xiao: ¡Cómo te atreves a desafiarme! Si sigues defendiendo a ese bastardo, te enviaré al extranjero a estudiar, donde no tendrás la oportunidad de desobedecerme.

Xiao Qi, con lágrimas en los ojos y el corazón lleno de angustia, baja la mirada en silencio, sabiendo que cualquier resistencia solo traerá más dolor y castigo.

Me rehúso ser el segundo tropo del protagonista masculinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora