Una aventura en Genshin Impact

-¿O no?-

- ¡Acaban de robar la Lira Sagrada!

La habitación se quedó en absoluto silencio después de escuchar el motivo por el que estaban alterando nuestro horario de sueño.

Lisa me miro, yo la miré y asentí.

Gire mi mirada hacia Rosaria, ella me miro y asintió.

Los tres sabíamos lo que debíamos de hacer en esta situación.

...

...

...

¡Volver a dormir!

Al estar aun en la cama, Lisa y yo volvimos a nuestra posición original casi al instante.

Rosaria al estar al lado de la puerta fue la última en acurrucarse.

Lisa a la izquierda, yo al centro y Rosaria a la derecha, esa es la posición en la que solemos dormir.

Amber solo miro estupefacta como tres adultos eludían sus responsabilidades de forma olímpica.

- Hasta mañana Amber. - Los tres dijimos a la vez antes de cobijarnos.

- ¡Esperen, esperen! ¡¿Están bromeando?! ¡¿Verdad?!

Lisa se sentó.

- ¡Es cierto!

Los ojos de Amber se llenaron de ilusión.

- No olvides apagar la luz antes de que te vayas.

Y se volvió a acostar.

La esperanza que emergió en el rostro de Amber se desvaneció igual de rápido que llego.

- Y pensar que la señorita Jean tendría razón... - Amber dijo mientras dejaba salir un gran suspiro. - Lisa, la señorita Jean dijo que si te rehusabas a colaborar se vería forzada a aumentar tu carga de trabajo.

- Esa Jean...

- Adiós Lisa. - Dijimos con burla.

- Y si Rosaria se negaba, tal vez debería de contarle a Bárbara la ubicación de los lugares donde se esconde para evitar sus deberes como monja.

- Esa Jean...

- Adiós Rosaria. - Dije con el mismo tono con el que nos burlamos de Lisa.

- Y si T/N se negaba... En realidad no dijo que lo haría hacer nada.

- Ganando como siempre. - Mencione con prepotencia.

- Pero dijo que quizás debería reconsiderar la propuesta de Albedo para experimentar un poco más con él.

"¡Suéltenmeeeeeeeee!"

Ambas comenzaron a reírse de mí.

- Qué rara definición de ganar.

Luego de quitarme el disfraz de payaso, no paso mucho para que Lisa y Rosaria salieran de la habitación para comenzar con sus deberes quedando solo Amber y yo.

- Yo que tú me daría la vuelta si es que no quieres terminar antojada.

Me quité la camisa dejando al descubierto mi pecho y me di la vuelta en busca de mi uniforme.

Antes de que pudiera darme cuenta ya tenía sus brazos alrededor de mi abdomen.

¡Ay! ¡Parece que la antoje de más!

- ¡¿A-Amber?!

- T/N... T-Tu... Tu moriste en aquella explosión. ¿Verdad?

- ...