Una pizca de maldad

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Thor logró hacer caer a Sam, este se rompió varios huesos en la caída, luego Strange y Wanda se acercaron, esta última había atrapado a Scott, manteniendolo inmóvil con su magia.

— Debemos llevarlos con Tony. —Mencionó la pelirroja.

— Tranquilos seguramente Stark traerá de regreso al Capitan. —Dijo Thor.

— No sin las gemas... —Contestó Wanda y volteó a ver a Strange, quien solo suspiró y abrió un portal.

Tony estaba en la sala cuando vio entrar a Wanda, Thor y Strange, llevando a dos de sus enemigos, al cerrarse el portal observó molesto a los presentes.

— ¿Dónde está? —Preguntó poniéndose de pie.

— Dile. —Contestó Wanda empujando a Scott.

— Lo enviamos al reino cuántico... —Respondió él, Tony soltó un gruñido y le dio una patada.

— Traelo de regreso. —Ordenó el genio y volvio a patearlo, Wanda y Strange se mantenían alerta ya que conocían el estado de Tony.

— La maquina fue destruida...

— Construiremos otra. —El castaño lo llevó de arrastras hacia el taller.

Las siguientes horas fueron estresantes, tanto para el genio como para los demas, Sam fue encerrado en una celda después de que Strange lo curara, al tener la maquina lista Tony obligó a Scott a entrar al reino cuántico, pasaron algunos días y el Capitán no fue encontrado, causando que Tony enfermara, Scott fue encerrado al igual que Sam, privandolos de todo tipo de tecnología, los hermanos Rogers Stark estaban preocupados por la situación de su papá.

— ¿Cómo está? —Preguntó Peter luego de que Strange saliera de la habitación.

— Tuvo una amenaza de aborto.

— Necesita el extremis. —Mencionó Wanda.

— Eso pondría en riesgo la vida del bebé. —Murmuró Peter.

— ¿Eso que importa? ¡No podemos perder a papá! —Exclamó Harley.

— Tenemos problemas. —Mencionó Natasha venía llegando junto a Bruce quién llevaba un bebé en brazos.

— La ciudad se está revelando, van hacia industrias Stark. —Comentó Bruce.

— ¡Carajo! ¿Qué le pasa a esta ciudad? —Exclamó Harley molesto.

— ¿Adónde vas? —Preguntó Peter al ver a su hermano caminar hacia la salida.

— ¿A dónde crees? A poner en orden esta ciudad.

— Voy contigo.

— Yo los acompa...

— No Strange, esto es algo de familia. —Contestó Harley viendo molesto al doctor, se supone que ellos tenían que evitar lo que le pasó a su padre.

Minutos despues los hermanos Rogers Stark estaban en la entrada de Industrias Stark, la multitud ya estaba enfrente de ellos.

— Morgan ve adentro. —Mencionó Peter ya que la menor los había seguido.

— No, yo también soy hija de SIM.

— ¡Entreguen a SIM! —Gritó la multitud, Harley no esperó y disparó hacia ellos hiriendo a varios.

— Saben que podemos eliminarlos en cuestión de segundos, ¿no? —Mencionó el rubio desplegando algunos drones.

— ¡Morgan! —De entre la multitud salió una mujer que los hermanos ya conocían.