Una pizca de maldad

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Harley observó su reloj esperando una notificación, hasta que minutos después llegó, una imagen se desplazó, era la lista de los traidores, algunos eran empleados de la torre, pero ninguno tenía acceso a los pisos superiores, también habían personas que trabajaban directamente con el presidente y el alcalde, si no fuera por su papá ellos no estarían en el poder.

— Malditos traidores... —Murmuró el menor, en Industrias Stark también habían infiltrados, Harley se sintió triste al reconocer el apellido de uno de los traidores, Potts no le sorprendía, pero él si.— Harry... —Dio un suspiro debía seguir así que le mandó la lista a su padre.— Bien, es hora. —Volteó a ver hacia la cámara.— Huye.

La puerta de aquella habitación se abrió, Harley se guió por el plano en su reloj, debía ir al cuarto de motores, mientras tanto Peter y Morgan terminaron de preparar todo, justo en ese momento escucharon unos gritos, en la parte superior de la nave una lluvia de sangre cayó, restos humanos cayeron sobre la superficie de la nave, luego empezó a sonar la canción Hells Bells de AC/DC.

— Es hora. —Comentó Peter, en eso se abrió un portal.

— Hola. —Saludó Strange sonriendo.— ¿Están listos?

— Sí, ya empacamos lo necesario. —Mencionó el castaño.— ¿Pasa algo? —Preguntó al notar que el mayor no había dejado de observarlo.

— Nada, los llevaré a un lugar seguro, después iré por Harley. 

— Yo también iré contigo.

— No Peter debo ponerte a salvo.

— Lo siento pero no me iré sin mi hermano...

— El capitán me ordenó llevarlos a un lugar seguro. —Colocó su mano en el hombro de Peter.— No me perdonaría si algo te llegara a pasar.

— Hola, también estoy aquí. —Mencionó Morgan cruzada de brazos.

— Si ya lo sé. —Dijo Strange, primero trasladó todas las cosas que los chicos habían empacado.— Bueno tu ganas, Harley está esperando en la sala de motores. —Segundos después Strange abrió un portal directo hacia el lugar indicado. 

— ¿Porqué tardaron tanto? —Preguntó Harley, al parecer no estaba de buen humor.

— Pues el señor mago no dejaba de coquetear con Pet.

— Morgan no digas esas cosas, Stephen sólo es amable.

— Espero que de verdad solo sea amabilidad. —Mencionó Harley, viendo seriamente a Strange, en eso se escuchó un ruido.— ¡No hagas ruido bruja! Bien, en menos de treinta segundos este lugar estará bajó el agua.

— Sharon Carter... —Peter quedó viendo a la rubia que permanecía atada en el suelo.— ¿Qué se siente estar sometida y no poder hacer nada para liberarte? Sentirte frágil, vulnerable... —Peter sólo la vio con desprecio, nunca pensó que vería a alguien de esa manera, siempre trató de ser amable, de tratar de compensar un poco a la gente por el sufrimiento, pero no les había importado eso, sólo conocieron su identidad y lo despreciaron, pero lo que hizo Sharon, una omega tirando a la boca del lobo o otro omega, los que supuestamente eran buenos haciendo cosas peores que los malos.— Nunca olvidaré tu mirada, la manera en que disfrutastes al verme suplicar por ayuda.

— ¿Espera que? —Preguntó Harley confundido.

— Supongo que Pops se enteró que ella fue la que me inyectó algo, para que mi celo se adelantara, me doblegara más y luego sólo quedó viendo mientras ellos...

— Tranquilo... —Strange abrazó a Peter.

— ¡Maldita perra! —Harley le dio una patada a la rubia, varias explosiones empezaron escucharse y el agua empezó a entrar.