Impacto. Tom Kaulitz y tú.

23. Ve por lo que te hace feliz.

Desperté después de un par de horas, mirando hacia el techo recordado aquella charla con mamá, solté una leve sonrisa y entendí que no todo está perdido, me moría por ver a Tom de nuevo pero asumo que tendrá que recuperarse poco a poco sin salir de casa, aunque no me atrevo porque sé que no será fácil para él.

Decidí llamar a Bill para que me ayudase un poco en eso y acepto, no tardaría en llegar a mi habitación.

Bill-Bien, cuéntame- se acomodó en mi cama y puso su atención sobre mí.

_____- Okay- suspiré- quiero verlo y hablar con él pero conociéndolo, ni si quiera quiere verme- bajé mi mirada a lo que Bill tomó mi barbilla y la levantó.

Bill- Él te ama, tratamos de hablar con él mamá y yo y, existe una posibilidad de que te escuche- mis ojos volvieron a brillar, sonreí inconscientemente y eso me regresó la existencia.

_____- crees que sea correcto ir ahora?- lo miré confundida y a la vez aterrorizada.

Bill- Dale un poco de tiempo linda- me sonrió.

_____- Me muero por verlo Bill, y que no sea en una camilla inconsciente- me puse triste pero quizá tenga razón.

Bill- Es muy reciente todo, no quiero que te haga daño- tomo mis manos y me miró con preocupación.

_____- No lo hará- dije segura, me puse de pie y salí de casa para recuperar al amor de mi vida.

Caminaba nerviosa, me temblaban las piernas, estaba en la entrada de su casa, tragué saliva y me arme de valor, toqué la puerta y para mi suerte abrió Jörg.

-Hola, puedo pasar?- dije apenada.

-Claro linda, tú no necesitas pedir permiso- me abrazo y me sonrió.

-Claro, gracias Jörg- espere a que cerrara la puerta y tome asiento en el sofá.

-verás, vienes a verlo, cierto?- de igual forma tomó asiento y asentí con la cabeza.

-Crees que sea conveniente?- Jörg me sonrió y tomo mi mano.

-Hemos visto el cambio en Tom, algo que se veía imposible y todo fue gracias a ti, él ha dicho que te ama y de eso no tenemos duda, así que ve por lo que te hace feliz que estoy seguro que tú eres lo que lo hace feliz y no querrá perderlo por un mal entendido, además, lo que es destinado a ser así se oponga el mundo entero será- Sus palabras me dieron nostalgia, tengo todo en juego o posiblemente esto termine definitivo o será salvado, suspiré y subí hasta su habitación.

Subir escaleras se me hacía como si estuviese subiendo una montaña dificultosa, llegué a su puerta y suspiré, abrí lentamente y llame su atención.

-Hola- dije apenada, colocándome un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

-Que tal?- dedicó una leve sonrisa y volvió a perder su mirada en aquella televisión en la cual estaba jugando videojuegos.

-Tom sé que quizá no quieras verme, pero necesitaba venir a ver cómo estás y..- Ni si quiera me miró y solo hablo.

-Bien si ya lo sabes y ya viste que estoy bien, puedes irte- sus palabras hicieron que me armara de valor, me acerqué a quitarle el control y apagar la televisión.

-No Tom, yo te amo y no dejaré que este mal entendido mande a la mierda lo que hemos construido, tanto me ha costado confiar en ti después de todo lo que me decían y decidí creerte, sé que la cague y muy feo pero no fue como tú crees, Luka me obligó a besarlo, me hizo daño que dejó marcas en mis brazos, no tienes idea de lo que sufri después de saber que casi te pierdo, pasé noches llorando por ti en aquella sala fría, en tu habitación rogando para que nos dieran otra oportunidad, me sentía una mierda porque por mi culpa estabas ahí, sabes en lo único que pensaba?, si Tom se va yo me iré a tirar de un puente o que me arrollé un camión, por favor Tom, no me pidas que me vaya porque jamás lo haré- las lágrimas empezaron a caer, Tom se levantó como pudo estaba sin camisa y solamente un pants- es todo- me di media vuelta y Tom me tomó de la muñeca y lentamente voltee.