PARASOMNIA

† 16. MAGUS †

| Capítulo 16 |

Entre las hojas secas y la gélida brisa que de vez en cuando azotaba las hojas de los árboles, Camelot se encontraba meditando en el cementerio del patio trasero de su casa. Tal vez para alguien más resultaría algo sumamente inquietante tener un cementerio en su propia casa, pero para la familia Chambers era el lugar más pácífico al que podían ir a reflexionar, meditar o simplemente a visitar a sus familiares fallecidos.

En medio de su meditación, Camelot comenzó a ver varias imágenes pasar fugazmente por su mente. Estaba teniendo una visión sobre Clare que le indicaba que iba a venir pronto.

Abrió sus ojos, tomó sus cosas y se adentró a su casa junto con Salem sigiéndole el paso.

—Tengo que hablar con ustedes. —soltó Camelot serio al ver a sus padres en la sala de su casa charlando entre ellos.

—¿Qué sucede, hijo? —inquirió su padre el ceño fruncido. Notó que igualmente su madre se acomodó en el sofá algo alarmada.

—Dentro de un par de minutos va a venir una amiga de la escuela. Su nombre es Clare Night. —Empezó a hablar, pero cuando vio que sus padres tenían una expresión de miedo al saber que si descubrían su secreto no estarían a salvo, Camelot de inmediato intervino—No se preocupen, ella es de confiar. —formuló atropelladamente con sus manos extendidas y con sus ojos bien abiertos.

—¿Cómo sabes eso, cariño? —Esta vez fue su madre quien habló.

—No lo sé muy bien. Solo sé que tengo una extraña confianza con ella que no puedo explicar con exactitud, pero que por eso quiero contarle sobre nosotros. Sé que ella no nos hará daño. —Al decir aquello, Camelot le dedicó una mirada espectante a sus padres, como si estuviera esperando qué derían al respecto— Además de que esta chica tiene algo que es diferente y siento una conexión con ella que hace que quiera protegerla.

Sus padres se miraron, su padre le colocó sus manos sobre las de su madre haciendo relucir sus anillos de matrimonio. Luego de ello, ambos volvieron a mirar a su hijo.

—Si dices que ella es de confianza para nosotros, para toda nuestra familia y para todo lo que ocultamos. —Empezó a hablar su madre.

—Te creemos. —Finalizó su padre con una ligera sonrisa.

Camelot esbozó una pequeña sonrisa y con ello abrazó a sus padres.

—Gracias. —murmuró en medio del abrazo.

† † †

Al salir al patio, Clare pudo divisar como había un montón de lapidas, algunas tenían nombre de algunos familiares de Camelot y otras cuantas ni siquiera tenían nombre.

Y por más de que caminaba en medio de esta gran cantidad de lápidas, era cierto que se sentía una vibra de tranquilidad y paz.

Caminó otro poco más y pudo ver como delante de una lápida estaba Camelot con las piernas cruzadas y ojos cerrados. Se acercó lentamente, no quería interrumpir lo que sea que el chico estaba haciendo, pero cuando Clare pisó una pequeña ramita y esta crujió bajo sus pies y Camelot se volteó alarmado.

—Clare. Te estaba esperando —dijo con una ligera sonrisa.

—Hola. —habló Clare agitando levemente su mando. Frunció leventemente su ceño ante el comentario del chico, pero sin prestarle mucha atención, volvió a hablar:—Quería hablar sobre un tema contigo.