Tal y como había prometido, la señora Kim se encontraba saliendo de casa, Dahyun fue notificada de esto antes de que su madre se fuera y como por arte de magia la suposición de Momo había sido acertada, Dahyun finalmente salía de su habitación para pasar la tarde en la sala.
Sin embargo, no habló con Momo, solo fue a sentarse al sofá sin dirigirle la palabra.
Entonces Momo tuvo que dar el primer paso y se sentó al lado de Dahyun en el sofá donde la menor yacía configurando algo de la televisión con un control remoto.
—Es la primera vez que te veo fuera de tu habitación— Momo mencionó llamando la atención de la chica de su lado.
—Es porque finalmente terminé todas mis tareas, ahora tengo la tarde libre— La menor mintió, pues desde siempre tenía la mayor parte de sus tardes libres debido a que solía acabar sus tareas a la brevedad posible.
—Ya veo— Momo asintió sin creerle —¿Y qué harás ahora?
—Voy a jugar videojuegos— Dahyun respondió sin despegar la vista del televisor.
Y Momo tuvo un deja vu de la primera vez que habló con ella.
—No sabía que te gustaban.
—En realidad son de mi hermano, solía jugar con él antes de que se fuera de casa— Por un momento Momo quiso preguntar la razón, pero, no quería ser irrespetuosa preguntando cosas que no eran de su incumbencia, además, tenía una sospecha de la razón —Él se fue a la universidad el año pasado, pero, no planea volver a casa, mis padres solían ser muy estrictos con él y bueno...— La menor continuó explicando, pero, cuando se dió cuenta de que estaba diciendo mucho frente a una extraña, se detuvo —¡Oye! ¿No deberías estar limpiando la casa?— Cambió el tema de repente.
Y Momo no pudo evitar reír.
—Ya acabé, ¿que no ves lo reluciente que luce?— Momo presumió con una sonrisa, le había costado limpiar, al menos Dahyun debía reconocer su trabajo.
—¿Estás segura?— Dahyun preguntó con una sonrisa malvada jugando con la envoltura del chocolate que recién había acabado.
—No te atreverías— Momo la amenazó con los ojos entrecerrados y una sonrisa en sus labios que se vió interrumpida cuando Dahyun aventó su envoltura al piso.
Pero tan pronto como la menor lo hizo, esta estalló en una carcajada y recogió su basura de nuevo.
—Es una broma, no te enojes— Dahyun siguió riendo mientras tomaba las mejillas de Momo para forzarla a sonreír de nuevo.
—No lo haré, pero, déjame jugar contigo— Momo extendió su mano para que Dahyun le pasara un control del videojuego.
—¿En serio? ¿Por qué no solo te vas a casa?— Dahyun preguntó sorprendida, pero al darse cuenta de la manera en la que lo dijo habló de nuevo para corregirse —Quiero decir, haz terminado tu trabajo, no tienes que quedarte conmigo— Acompletó mientras le pasaba el control a Momo, porque a pesar de tener razón ella no quería que la mayor se fuera.
—Pero quiero hacerlo— Respondió la mayor sonriendo mientras tomaba el control —Además tu mamá me mataría si supiera que de dejé sola, creo que no le gusta dejarte sin cuidado— Le pellizcó una mejilla haciendo a Dahyun reír.
—Es verdad, jamás me deja sin compañía— Recordó algo decepcionada al darse cuenta de que probablemente Momo solo estaba ahí por compromiso.
—No me malinterpretes, realmente quiero estar aquí— Aclaró la mayor con esa misma sonrisa amigable.
Y Dahyun también sonrió, Momo era increíble.
—¿Lista para perder?— La menor preguntó antes de darle play al juego de video.
—Pff, como si eso fuera a suceder— Momo la provocó.
Una ceja levantada fue la reacción inmediata de Dahyun.
—No sabes lo competitiva que soy— Sentenció la menor dándole play a la pantalla.
—¿Ah sí? Yo también lo soy— Claramente Momo estaba mintiendo, ella era todo menos competitiva, además, se caracterizaba por siempre perder en toda clase de juegos.
Pero quería provocar a Dahyun y parecía que lo había conseguido.
La lengua de la menor se marcaba a través de su mejilla como gesto de concentración y ambición mientras jugaban, así que al verla así de enfocada Momo quiso encenderla un poco más.
Comenzó con pequeños codazos suaves solo para desconcentrar a la menor.
Entonces la contraria se defendió metiendo las manos al control de Momo y haciéndola perder.
—¡Oye!— Momo se quejó riendo al ver lo que Dahyun había hecho, la cual solo le sacó la lengua, pero entonces Momo tomó el control remoto de Dahyun y lo levantó para que la contraria no pudiera tomarlo de vuelta.
—¡Devuélvemelo!— Se quejó la menor sin dejar de reír, pero Momo solo negó y mantuvo el control lejos del alcance de Dahyun, quien desesperada se hincó en el sofá y subió una de sus rodillas sobre las piernas de Momo para intentar alcanzar su control remoto.
—Te lo daré si prometes no hacer trampa— Momo la abrazó de la cintura con el otro brazo para mantenerla quieta.
—¡Pero tú empezaste!— Se quejó la más pequeña.
—Entonces no te lo daré— La siguió molestando.
—Ahg, está bien— Dahyun dejó de esforzarse por alcanzar su control remoto.
Y fue entonces que se dió cuenta de la posición en la que estaban.
Su cuerpo estaba bastante cerca del de Momo y el hecho de que esta la estuviera abrazando por la cintura la ponía sumamente nerviosa.
No estaban haciendo nada malo, pero, aquello lucía comprometedor, y sabía que si su madre entraba ahora mismo por esa puerta tendría mucho por explicar, así que se apartó y regrezó a su lugar en el sofá.
Entonces la mayor le devolvió su control remoto y continuaron jugando más tranquilas hasta que la madre de Dahyun regresó a casa.
A decir verdad la menor se sintió nerviosa luego de aquel acercamiento con Momo, pero realmente quería repetirlo, le había gustado la sensación del fornido brazo de Momo rodeando su cintura y sinceramente no podría olvidarlo con facilidad.
Pero el hecho de ver a su madre de vuelta en casa la hizo sentir vigilada, así que regresó a su habitación.
Entonces, solo quedaron Momo y la señora Kim en la sala de estar.
—¿Y bien?— Preguntó la mayor mirando a Momo —Veo que se acercaron.
—Ella solo fue amable, aún no hay nada que pueda serle útil— Momo respondió con sinceridad a la mayor, quien asintió en respuesta, y sin más sacó un sobre de su bolsillo para entregarle el dinero correspondiente del día a Momo.
—No olvides que solo tienes un mes— La mayor le recordó.
Y Momo solo asintió antes de salir de aquella casa.
A decir verdad, realmente había sido agradable pasar la tarde con Dahyun, pero no debía involucrarse mucho emocionalmente, Dahyun parecía divertida y amigable, pero, para Momo, Dahyun era solo su trabajo.
A/N
Espero que les guste, gays, no olviden comentar porque me gusta leerlos ;)
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Conquista a mi hija || Dahmo
FanfictionLa señora Kim tenía dudas por resolver y Momo necesitaba dinero, ¿Qué tan mala idea sería ofrecerle dinero a Momo a cambio de seducir a su hija? Una historia en donde Dahyun crece entre una familia sumamente religiosa sabiendo que podría perderlo to...