Conquista a mi hija || Dahmo

24

Cuando llegó el día en el que Momo renunciaría a su trabajo, incluso aprovechó para pasar por la mañana a comprar el celular de Dahyun.

Obviamente se llevó un susto al escuchar el precio del aparato, como siempre se asustaba con los precios de las cosas que Dahyun acostumbraba consumir, pero tenía lo suficiente para pagarlo.

Entonces volvió a casa con la bolsita del teléfono en su mano, y entró a su departamento encontrándose a Dahyun durmiendo, pues era lo único que podía hacer ahora que estaba de vacaciones.

Momo se acercó a ella y besó su frente, Dahyun despertó al sentirlo y se emocionó de ver a Momo en casa.

—Buen día, muñeca— Momo saludó sonriendo.

Dahyun la abrazó.

—Buenos días— Respondió la menor.

—Te tengo un regalo— Anunció Momo llamando la atención de Dahyun.

Y con tan solo ver la bolsita, Dahyun ya podía imaginar lo que era.

—¡No es cierto!— Gritó la menor tomando la bolsa.

Momo asintió.

—Felicidades por tu graduación— Le besó la nariz mientras Dahyun abría la bolsita.

Entonces sacó la cajita de ahí y se encontró con el teléfono que tanto quería.

—¡No puede ser, Momo!— Dahyun la abrazó —¿Cómo compraste esto?

—¡Oye!— Hizo cara de ofendida.

Dahyun rio.

—No lo decía de esa manera, pero en serio, ¿A quién asaltaste?— Ella bromeó.

—¡Yah!— Momo también rio por eso.

—Supongo que podemos vender este, para poder pagar algo más importante— Dahyun tomó su antiguo teléfono.

—No, no— Momo negó —Dámelo a mí— Pidió, sería su primer iPhone, además, ese teléfono era aún más nuevo que el que ella usaba, pues el antiguo celular de Dahyun era apenas del año pasado, el más nuevo antes de que saliera el que recién le había comprado.

Momentos después, Momo tuvo que ir a la cafetería a trabajar, ansiosa de salir y poder pasar la noche con Dahyun, pues ahora ya no tendría que ir a la fábrica, y tanto su horario como su economía se volverían más estables ahora que la menor era becada.

También pidió permiso para tener unas vacaciones, y gracias a que su jefe había notado la falta que haría Momo en la cafetería si renunciaba de nuevo, ahora era más amable con ella, entonces fue fácil conseguir una semana completa de vacaciones.

Llegó a casa y Dahyun ya estaba usando su nuevo celular, sonrió por eso y ella también pudo tener uno nuevo con el que Dahyun le dio.

Le notificó que a partir de la próxima semana saldrían de vacaciones y que ya no volvería más a la fábrica.

Y finalmente durmieron para recuperar el descanso que Momo tanto necesitaba.

No pudo levantarse en todo el día siguiente, así que Dahyun se encargó de pedir comida para ambas y mantuvo el orden de la casa mientras los ronquidos de Momo llegaban hasta la sala.

Sí que se oía cansada.

Tanto que no se levantó ni siquiera para comer hasta que la noche cayó.

Al despertar fue hacia Dahyun para abrazarla y tirarse al piso con ella, parecía un oso saliendo de hibernar.

—Ve a comer y a bañarte, primero— Dahyun rio mientras Momo la aplastaba contra el piso y ocultaba su nariz en su cuello.

—Báñate conmigo— Pidió Momo mientras acariciaba la cintura de Dahyun por debajo de su camisa.

—Cómo se nota que ya descansaste suficiente— Dahyun se burló de ella acariciando sus manos.

Momo asintió y se levantó, llevándose a Dahyun con ella para tener una ducha juntas.

A diferencia de lo que Dahyun imaginó, Momo no hizo nada más que tomar una ducha.

Ni siquiera la abrazó, solo tomó una ducha caliente y salió de la ducha, dejando a Dahyun dentro pensando en lo que no hicieron.

Se sintió decepcionada y salió detrás de ella.

Creyó que Momo haría algo, pero solo secó su cabello y cuidó su piel con algunas cremas antes de salir del baño para ir a cenar.

Dahyun estaba confundida, casi siempre que Momo se duchaba con ella era la primera en tocar sus pechos o acariciar su cuerpo para provocarla, y creyó que eso haría hoy también como siempre que la dejaba entrar con ella a la ducha.

Pero los hechos fueron completamente diferentes, ni siquiera la miró.

Entonces se fue confundida a cenar con ella, pero no dijo nada, no quería verse como una desesperada.

Así que simplemente cenó con Momo y hablaron sobre los planes para la siguiente semana.

—¿Tienes opciones para nuestras vacaciones?— Momo preguntó mientras comía.

Dahyun lo pensó.

—Quiero ir a la playa, pero no sé a cuál podríamos ir.

—Hmm, podemos buscar opciones por Internet, ¿te parece?

Dahyun asintió.

Y sin más, ambas siguieron comiendo.

Cuando terminaron limpiaron el poco desorden que habían dejado y se fueron al baño para hacer sus propias rutinas antes de dormir.

Estaban en silencio y Dahyun se sentía extraña, ¿por qué Momo estaba actuando así? ¿Dónde estaban los besos y caricias de cada noche?

Dahyun entrecerró los ojos.

No iba a pedirle nada a Momo, aún tenía dignidad.

Rodó los ojos y la empujó al salir del baño.

Momo la miró extraño y rio por el berrinche de Dahyun, pero hizo como si no supiera la razón.

Entonces entraron a la cama con la luz encendida.

Dahyun sabía que algo bueno pasaba cuando la luz estaba encendida, y se emocionó más cuando sintió el cuerpo de Momo sobre el suyo.

Estaba a punto de tocarla, pero Momo volvió a su lugar.

Y Dahyun quizo golpearle la cara cuando notó que había hecho eso solo para alcanzar la computadora que estaba de su lado.

—Mira esta oferta de vacaciones— Momo señaló la pantalla recibiendo una mala mirada de Dahyun —¿No te gusta? Podemos buscar otra— Siguió navegando —¡Mira!

Dayun rodó los ojos y le dió la espalda intentando cubrir su rostro con la almohada.

Al parecer Momo ni siquiera tenía idea de lo que Dahyun quería, y eso solo logró frustrar más a la menor.

—¿Puedes apagar a luz? Quiero dormir— Dahyun se resignó a que hoy no sería su noche.

Entonces la luz se apagó, pero Momo seguía utilizando la computadora.

De verdad que Dahyun quería estrangularla ahora mismo.

¿Cómo se atrevía a dejarla así?

A/N
Quieren smut o así están bien?