Momo se mantuvo despierta hasta que llegó la madrugada, debía ser paciente y esperar para poder escapar de ahí, y realmente no le fue difícil permanecer despierta, pues el pensamiento de lo que le había hecho a Dahyun se mantuvo atormentándola hasta que llegó la hora de partir de casa.
Salió con cuidado y comenzó a caminar en dirección a un hotel, ya tenía pensado a cuál iría y qué departamento rentaría al día siguiente, había planeado esto por tanto tiempo y buscado los precios más accesibles para poder tener éxito al escapar de casa.
Pero algo que no venía en sus planes era el continuo pensamiento de cómo se encontraba Dahyun.
Carajo, ella vivía del lado totalmente opuesto al hotel al que tenía planeado ir y si se alejaba le costaría regresar a su camino.
Tampoco podía pedir un taxi, pues eso costaba dinero y no podía permitirse gastar más de lo planificado.
Pero era tan difícil ignorar ese pensamiento de la joven Kim.
Momo estaba preocupada por ella.
—Ahg, maldita sea, ¡maldición!— Hizo un berrinche pateando el suelo y cambiando la dirección de su camino.
Quería ver a Dahyun y asegurarse de que estaba bien, no podía vivir con la culpa de haberla lastimado.
Entonces se apresuró en llegar, eran al rededor de las 3 de la madrugada cuando finalmente estuvo frente a la casa de Dahyun.
Caminó hacia el lado en donde se encontraba la habitación de Dahyun e intentó subir hasta la ventana de la menor, pero era realmente difícil, así que tuvo que dejar su mochila en el piso y volver a intentarlo.
Fue difícil y se lastimó las manos intentando llegar, pero por suerte ya podía ver a Dahyun desde donde estaba.
La menor se encontraba durmiendo dando la espalda a la vista de Momo, pero bastaron un par de toques en la ventana para hacerla despertar.
Parecía que recién se había dormido, pues despertó bastante rápido, además lucía algo asustada, aunque Momo no podía estar segura por la falta de iluminación.
Dahyun al notar de quién se trataba corrió a la ventana para abrirla.
Y justo cuando Momo sintió su corazón más tranquilo por ver a Dahyun correr hacia ella lo único que recibió por parte de la coreana fue una cachetada.
—Eres una idiota— Dahyun soltó a punto de llorar.
Pero Momo solamente asintió.
—Lo sé, hazlo de nuevo— Pidió Momo resignada a recibir otra cachetada.
Y así fue, Dahyun golpeó de nuevo su rostro, pero realmente no había dolido en lo absoluto, pues ambos golpes habían sido con la mano izquierda.
No es que Dahyun quisiera, es que no podía usar la otra porque aún dolía debido a la caída que había tenido cuando su padre la golpeó.
—Te juro que hay una explicación a todo esto, pero por favor ven conmigo— Momo pidió tomando a Dahyun de las manos.
—Auch— Se quejó la menor al sentir el tacto de Momo en su mano lastimada.
—¿Qué te pasó?— Preguntó la mayor preocupada por escuchar el quejido de Dahyun.
—Nada, ya puedes irte— Respondió Dahyun guardando su mano derecha tras su espalda y empujando a Momo hacia afuera.
—Espera, espera— La mayor se esforzó por no caer —Harás que me caiga y me lastime.
—Te lo mereces, yo también estoy lastimada— Dahyun susurró eso último.
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Conquista a mi hija || Dahmo
FanfictionLa señora Kim tenía dudas por resolver y Momo necesitaba dinero, ¿Qué tan mala idea sería ofrecerle dinero a Momo a cambio de seducir a su hija? Una historia en donde Dahyun crece entre una familia sumamente religiosa sabiendo que podría perderlo to...