𝑴𝑰𝑨 𝑹𝑨𝑮𝑨𝒁𝒁𝑨 ── ᴛʜᴇᴏᴅᴏʀᴇ ɴᴏᴛᴛ

14 ; k i s s m e h a r d

1995, Hogwarts.

Cassie caminaba por la sala de slytherin mientras intentaba cautelosamente colarse al ala de los chicos, el clima comenzaba a ponerse frío y hostil al caer la tarde tanto que ni aquella gran chimenea lograba abrazar con calidez, sin distraerse de su objetivo subió por las escaleras del ala sur, donde se encontraban los cuartos de los chicos, cautelosamente buscó cierta habitación en específico.

Necesitaba verlo.

Se paró frente a la vieja puerta de madera algo nerviosa, ir allí probablemente había sido una mala idea. Dudó unos segundos antes de llevar su pequeña mano hasta allí y golpear suavemente dos veces, al cabo de unos segundos de esperar sin respuesta alguna se remplanteo de si debería estar haciendo aquello y que aún podía huír de allí, pero todo se detuvo cuando escucho su voz.

─ ¡Quién quiera que seas vete a la mierda!─ gritaron desde el otro lado.

La muchacha se exaltó un poco al escuchar la inesperada respuesta del joven al otro lado de la puerta y más si éste sonaba algo tenso, aunque rápidamente se armó de valor para contestarle.

─ Soy Cassie.

De pronto se formó un gran silencio penumbral tras haber dicho aquellas simples palabras, al cabo de un par de largos minutos sin obtener respuesta la pelinegra se molestó un poco al ser ignorada por lo que estaba por comenzar su camino de vuelta a su cuarto cuando la puerta frente a ella se abrió abruptamente.

Theodore Nott se encontraba frente a ella con el rostro golpeado y algo de sangre en su camisa blanca de slytherin, su cabello lucía totalmente despeinado y su ceja sangraba ligeramente, inevitablemente no pudo pensar en que aun así seguía luciendo atractivo a sus ojos. La expresión en su rostro mostraba claramente confusión y molestia, tenía el ceño fruncido y apretaba la mandíbula ligeramente, aunque despues de todo su mirada cambio y su mente se relajo cuando vió a Cassie allí, literalmente la única persona que no le molestaría ver aun si quisiera asesinar a alguien.

Mentiría si dijera que la muchacha no pensó casi por un segundo en su ex novio, Draco, ¿Como estará? ¿Su rostro lucirá peor? Como sea, ya no le importaba ahora mismo.

El castaño solo la vió unos segundos más y luego se dió la vuelta para caminar hasta el interior de la habitación dejando la puerta abierta en el proceso, por lo que Cassie captó aquello como una invitación a entrar y así lo hizó, dió unos pequeños pasos cautelosa y cerró la puerta detrás suyo.

Notó que Theodore ahora estaba sentado en su cama encendiendo un cigarro y se acercó hasta él para sentarse sutilmente a su lado, aun ambos en silencio, aquello no llegaba a ser un silencio incómodo sino uno mas bien reconfortante, ya que no necesitaban hablar para entenderse el uno al otro.

─ ¿Que pasó?─ intentó preguntar suavemente Cassie.

El muchacho solo bufó para luego dar una calada algo furiosa a su tabaco, tirando la ceniza de éste en el piso como si poco le importara en este momento, su mirada estaba clavada en el suelo como si aquello fuera lo mas importante de la habitación.

─ ¿No escucharás su versión primero?─ dijo algo irónico e irracional.

─ ¿Que carajos pasa contigo?─ contestó algo indignada ante la actitud indiferente hacía ella.

─ ¿Y que carajos pasa contigo, Cassie?─  alzo el tono de su voz mientras suspiraba algo molesto mientras se levantaba de la cama y la miraba─ Dime, ¿Que carajos estás haciendo aquí?

La muchacha solo miraba aquel monólogo que se había montado el castaño con el ceño fruncido y de brazos cruzados, ¿Por que de pronto estaba siendo de esa manera con ella?