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Me levanté en mi habitación no sé en qué momento llegué pero Sam ya no estaba a mi lado, me preocupé hasta que vi una nota en la mesita que tenía al lado.

"Probablemente pensaste otra cosa, no te preocupes, en la tarde hablaremos, pero ya sabes lo que tienes que hacer. Nos vemos luego <3".

Intentaba recordar lo que tenía que hacer, lo único que recordaba eran los besos que me di con Sam.

Agarré mi celular y vi una notificación de Fiorella.

Hola, ¿podemos vernos
hoy?

¿O estás ocupada?

Con esos mensajes me di cuenta que tenía que hablar con Fiorella.

Hola, claro.

Iré a tu casa, nos vemos luego.

Me bañé e hice todas mis necesidades, cuando ya estaba lista me dirigí a la casa de Fio.

Llegué y estaba nerviosa, pero esto era necesario, no podía seguir dándole esperanzas a mi amiga.

-Hola.- me abrazó.- Te extrañé, hace días que no nos veíamos, ¿quieres pasar?- preguntó.

-En realidad, necesitamos hablar.- dije y me miró confundida.- Prefiero que sea aquí y no adentro.

-Deja apago la cocina.- avisó y asentí.

Ella regresó y yo me sentía horrible, me arrepentía de todo, nunca debí aceptar su propuesta.

-¿Está todo bien?- preguntó.- Te veo preocupada y eso me asusta mucho.- exclamó.

-Quiero hablar sobre nosotras.- comenté.- O por lo que supuestamente tenemos.- avisé.- ¿Recuerdas que cuando acepté la propuesta de ver como nos iba te pedí que no tuvieras muchas ilusiones?- cuestioné y asintió.- Quiero que me seas sincera, ¿no te ilusionaste, cierto?

-No lo puedo negar, sí tengo la ilusión de que me digas que tú también sientes lo mismo.- respondió con toda la sinceridad.

-Fio, yo no siento lo mismo.- confesé y en su mirada pude notar la desilusión.- Desde el inicio te dije que yo no estaba segura de mis sentimientos, no te puedo negar que te quiero demasiado, pero no como tú piensas, amo nuestra amistad. Sé que esto puede hacer que nos separemos y...

-Yo no quiero que nos separemos.- interrumpió.- Lamento mucho que por mis sentimientos nuestra amistad esté así wey, pero para mí tú eres perfecta, créeme.- dijo con lágrimas, ella era demasiado sensible.

-Es mejor que nos separemos por un tiempo, ¿no crees? Si seguimos hablando tus sentimientos hacia mí jamás desaparecerán.- expliqué intentando que entre en razón.

-¿Me prometes que seguiremos siendo amigas luego de que me dejes de gustar?- cuestionó.

-Lo prometo, Fio.- hablé.- Te tomará un tiempo, eso lo sé, pero estaré esperando tu mensaje.- comenté mientras la abrazaba.

-Te quiero mucho, no lo olvides.- recordó mientras acariciaba mi mejilla.

-Fio, esto no es una despedida, pronto volveremos a ser las amigas de siempre, te lo aseguro. También te aseguro que conocerás a la chica indicada, y esa chica será muy afortunada de estar contigo, tienes un gran corazón.- dije.

Fiorella me volvió a abrazar y me dio un beso en la mejilla, nos despedimos y yo me sentía terrible.

Ahora simplemente me quedaba ir al depa de Sam, solo espero que la suerte esté de mi lado y todo salga bien.

Solo las dos (Rivers x tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora