Hoy era el día de mi último chequeo, me sentía feliz y nerviosa a la vez, sabía que ya no tenía los mismos problemas que antes, pero nada estaba dicho.
El chequeo era temprano y por obvias razones no podría asistir a la escuela de arte.
Ama se ofreció a acompañarme pero me negué, esta vez quería pasar este momento sola.
Estaba en mi celular hasta que los nervios regresaron a mí al escuchar a la enfermera decir mi nombre. Me levanté y me dirigí al consultorio de la Dra. García.
—Buenos días.— saludé.
—Hola ____, espero que te encuentres súper bien porque te tengo buenas noticias.— comentó.— Solo necesito estos últimos exámenes para confirmar que tú ya no tienes los problemas alimenticios.
Para muchos podía parecer exagerado, pero quería llorar de la emoción, me sentía tan orgullosa de mí y de todo lo que logré mejorar en estos meses.
La doctora hizo lo mismo de siempre pero esta vez con algunos exámenes más, tenía que esperar casi media hora afuera para que me dieran los resultados.
Los minutos pasaron volando y la enfermera me volvió a llamar de nuevo y entré al consultorio.
—Bien, ya tengo todo listo.— dijo con una sonrisa.— Puedo decirte que ya superaste la anemia y que probablemente a partir de ahora no tengas problemas con tu alimentación.
—¿De verdad? ¿No estoy soñando?— pregunté sorprendida.
—No ____, pero eso sí, por ahora es preferible que sigas manteniendo una alimentación saludable y que sigas tomando vitaminas, por lo menos por un par de meses.— explicó.
—¿Puedo abrazarla?— hablé y asintió.
Me levanté para poder abrazarla, me encontraba demasiado feliz.
—Me alegro mucho por ti.— murmuró.— Y sé que tu madre también lo estaría.— comentó y me separé de ella.
—Por favor no la mencione, por lo menos no ahora.— pedí.
La doctora entendió, conversamos un poco más y ya era hora de irme. No tenía nada que hacer así que le quería dar una sorpresa a Sam, le llevaría algunos snacks y bebidas.
Antes de llegar a su depa había un Minimarket, compré lo necesario para luego dirigirme al edificio.
Me dejaron entrar porque ya me habían visto muchas veces con Sam y ella ya hace unas semanas les había avisado que me dejen entrar.
Subí al ascensor y esperé, antes de llegar a la puerta de su departamento la vi, pero no estaba sola, se encontraba con Félix, ellos estaban abrazados. Ese abrazo transmitía demasiadas emociones, pero sentí que significaba algo más.
No quería pensar cosas que no son, tal vez Félix la abrazó a ella primero, tenía que dejar de sobrepensar y acercarme.
—¿Estoy interrumpiendo algo?— cuestioné en voz baja.
Eso hizo que Samantha se asustara y se ponga nerviosa.
—¿____? ¿Qué haces acá?— preguntó.
—Vine a darte una pequeña sorpresa, pero la sorpresa me la estoy llevando yo.— respondí.
—Yo no entiendo de lo que hablan.— dijo Félix.— Pero no tengo nada más que hacer aquí, me llamas cuando tengas tu respuesta, Samy.— se despidió para luego darle otro abrazo.
—¿Me puedes explicar que está pasando? Porque no entiendo nada.— pedí.
Ella me hizo una seña para entrar a su depa y yo la seguí.
—¿Qué tal te fue en el hospital?— cuestionó mientras dejaba las cosas que compré en la mesa.
—No cambies de tema, Samantha.— exclamé y suspiró.
—¿Quieres la verdad?— susurró y asentí.— Yo estoy confundida.
—¿A qué te refieres?— hablé igual de confundida.— Tienes que ser más específica.
Ella se quedó en silencio por unos minutos, al parecer estaba pensando bien lo que iba a decir.
—En realidad, mis sentimientos están confundidos.— aclaró.— Félix y yo volvimos a hablar hace unas semanas, y hoy me dijo para retomar la relación, porque ya sanó.— contó.
Yo no sabía que responder ante eso, ¿estuvo hablando con su ex mientras estaba intentando algo conmigo?
—Quiero decirte que yo no te he fallado en ningún momento, solo que ahora estoy confundida, tú más que nadie sabe que he tenido una relación de 6 años con él y esto no es fácil, no sé si realmente quiero seguir contigo o si debo de regresar con él, es muy confuso.— confesó.
—Si era difícil para ti superar esos 6 años de relación, ¿por qué me ilusionaste diciendo que me querías como algo más? ¿Realmente piensas regresar con alguien que te ha lastimado un millón de veces? ¿Con alguien que no te valoró?— dije molesta.
—Es que sí me gustas, no sabes cuanto, pero por alguna extraña razón me siento así, ¿sabes? Incluso puedo decir que en este tiempo he aprendido a amarte, ya no es un solo "te quiero", sino un te amo.— contestó.
—No mientas, si realmente me amaras, no estarías dudando en sí terminar con esto o no.— agregué.— Me duele escuchar todo lo que dices, me duele saber que estas dudando lo que sientes por mí, o bueno, si verdaderamente llegaste a sentir algo por mí.— comenté con voz baja.
No planeaba llorar, por lo menos no frente a ella, se supone que hoy era un día feliz, ¿por qué de un momento a otro ya no lo es?
—Por favor, solo dame un tiempo.— pidió.
—¿Para qué? ¿Para que regreses con ese pendejo? No, ni siquiera es necesario que decidas, con lo que has dicho es suficiente para darme cuenta que aún lo quieres y que nada de esto valió la pena.— expliqué.— Esto acaba aquí, no quiero seguir intentando una relación con alguien que no me quiere. Adiós, Samantha.
Me dirigí a la puerta y ella intentó detenerme pero no lo permití.
—¡____, espera!— gritó mientras yo seguía caminando.
No pensaba voltear, no pensaba regresar. Ahora lo entendía todo, Ama lo sabía desde un inicio y no me lo contó, luego hablaría de eso con ella, en estos momentos quería llegar a mi casa y dormir o llorar.
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Solo las dos (Rivers x tú)
De TodoDonde ____ conocerá a Rivers, ambas tienen problemas e intentan resolverlos juntas, poco a poco empiezan a sentir cosas entre sí, o eso es lo que creen. Inicio: 17/01/24 Final: 26/08/24