Dos Capitanes, Dos Corazones • Daichi Sawamura

Nervios

Narrador Omnisciente

El tiempo pasa y con esto la relación entre Daichi y Nabi cada día se hace más fuerte. Pero hay algo que les molesta a los dos y son los nervios de su partido final, su partido contra el Shiratorizawa. 

— ¿Está todo bien cariño? — Nabi pregunto mirando al chico que se sostenía el estómago.

— Estoy bien, solo estoy... Nervioso creo. — ella sonrió, lo conocía perfectamente estaba nervioso y claro su partido sería en unos momentos, la chica no estaría porque su partido sería en Tokio y en unas horas después así que debía irse temprano.

— Tranquilo cariño, todo va a estar bien, no se... Pero, tengo una corazonada. — el chico sonrió abrazando con cariño a su novia aunque con un poco de pena, por sucesos anteriores.

Durante esos días de descanso y entreno el se la paso cuidando a la chica, yendo a la casa de ella para quedarse a dormir y poder cuidarla de cualquier cosa que pasara o de salvarla de cualquier cosa hasta de un mosquito. (Obviamente no pasaron más cosas, ¿O si?)

— Gracias Nabi — Daichi sonrió mostrando su perfecta dentadura, la chica asintió con una leve sonrisa para caminar hacia el entrenador.

— Hoy siento que es un gran día — Ukai miraba como ahora los jóvenes se disponían a calentar.

— Yo también lo siento, se que les irá muy bien, presiento que ganaran — Ella miro al entrenador, el también se había puesto más protector con la chica.

— ¿Tienes que ir a Tokio cierto? — la chica asintió — Está bien, ten cuidado, llama cuando llegues.

Ella sonrió y asintió con una sonrisa, Takeda se unió a ellos.

— Ya me llamaron de la dirección, me dijeron que habían expulsado a la chica. —

— Fue lo mejor — Shimizu llegó con Yachi, que iban a ayudar a los chicos a calentar.

— Si lo fue, no pongas esa cara Nabi — Ukai la regaño al ver la cara de culpa que tenía — Fue su culpa, te hizo daño, no pases eso por alto.

— Lo se, lo entiendo, estoy bien. — Ukai asintió más tranquilo igual que los demás.

Ella miró en su teléfono la hora, tenía que irse.

— Me tengo que ir — Miro a los demás. — Espero que ganen, en serio. — Ukai se levantó para abrazar a Nabi que ya se había levantado tomando su maletín con todas sus cosas para el partido.

— Vas a ganar, lo se. — Ella sonrió con un sonrojo en sus mejillas mirando al mayor — Confío en ti.

Takeda, Shimizu y Yachi se despidieron de la chica, comentándole que tuviera cuidado al irse.

Nabi miro a su novio, estaba haciendo pases con Suga.

El se giro al sentir una mirada en el, era ella.

Ella lo llamo con un movimiento de su mano, y este rápidamente camino hacia ella.

— Ya me tengo que ir, cuídate si, no quiero que me llamen diciendo que te golpeaste — el joven rio, ella todavía recordaba cuando se golpeó con Tanaka.

— No va a pasar nada, tú también cuídate, no quiero que me llamen diciendo que estás en alguna enfermería del gimnasio. — ella asintió con una sonrisa, habían tomado todos los sucesos malos para convertirlo en bromas entre los dos.

—Está bien, eres el mejor capitán que conozco... Te amo — Daichi se sonrojo al oír los cumplidos de su chica, todavía no se acostumbraba a ser el sumiso, ya que lo parecía y demasiado.