Epílogo

636 49 43
                                    

Años más tarde

— ¡Nabi! ¡Deja el balón en este momento! — una pelirroja le gritaba a su mejor amiga, en unas horas más tarde sería su boda y la chica se encontraba en el gimnasio del Karasuno mientras jugaba con unos chicos de primero.

— Pero... — la chica pelirroja tomo el balón en sus manos y se lo quito.

— Debes descansar, también te tienes que arreglar, mira cómo estás. — Nabi se miró a si misma, se veía normal.

— Estoy bien — La pelirroja negó suspirando, la tomo de la mano para alejarla del gimnasio.

— Nabi, ¿Estás nerviosa? ¿Es por eso que estás acá? — la chica suspiro, lo estaba y demasiado, los nervios estaban a flor de piel, en unas horas se casaría.

— Lo estoy, pero... Creo que estoy tan feliz que eso opaca el sentimiento — La pelirroja río, caminaban por las calles soleadas de Miyagi, se iban a ir a la casa de Nabi para poder arreglarse ahí todas las chicas y luego ir hacia la iglesia.

— Estoy feliz por ti Nabi — Liz tomó sus manos parando el caminar — Estoy demasiado feliz, mira todo lo que has logrado, ahora te casaras con el amor de tu vida y sos la mejor rematadora del país, tu madre estaría orgullosa de ti.

La chica sonrió con lágrimas en sus ojos, todavía no era su boda y ya estaba llorando.

— No llores que me haces llorar a mi — las dos rieron para ahora dirigirse a paso rápido hacia la casa de la pelinegra donde ya todas las esperaban.

— ¡Ya llegamos! — grito la pelirroja, en ese lugar estaban todas las chicas del equipo más Shimizu, Yachi y Saeko.

— ¿Estás lista Nabi? —

— ¡Estoy lista!—

— Tranquilo Daichi, todo saldrá bien, de todo se está encargando Bokuto mi bro —

— Por eso lo digo — El pelinegro río mirando ahora como se encontraba su amigo, estaba nervioso, una gotita de sudor al estilo anime se mostraba en su frente.

— Tranquilo Daichi, Bokuto está haciendo las cosas sumamente bien — llegó Asahi junto a Suga, se veían muy bien, con dos trajes, Asahi llevaba uno de color vino tinto y Suga uno de color gris así como su cabello.

— Ya lo fuimos a supervisar y Akaashi se encuentra con el, así que todo lo hará bien — Daichi rió, ahora mirando a sus amigos.

— Gracias... Por todo, por estar aquí en mi boda — Los tres sonrieron, ya estaban listos menos el novio.

— No te pongas sentimental amigo — río Kuroo mirando ahora el traje que se pondría Daichi.

— Es hora de vestirse Daichi — Suga lo miró cariñosamente.

Este asintió con una sonrisa.
Estaba listo, para esta nueva etapa en su vida, un etapa llena de amor y respeto que tendría con la que sería su esposa.

...

La gente empezaba a llegar, sería una de las bodas más grandes en Miyagi, ya que la chica tenía demasiados fans y personas que la seguían al ser ella una de las mejores rematadoras del país, además de ser capitana de uno de los mejores equipos de Tokio.

Los padres de Daichi y sus hermanos habían llegado, se encontraban hablando con el padre de Nabi, todos los amigos de los dos chicos también.

— ¡Hey hey hey Tsukki! — Un Bokuto muy alegre llegó junto a Akaashi, estos caminaron hacia Tsukishima y Yamaguchi.

Dos Capitanes, Dos Corazones • Daichi SawamuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora