Quiero casarme contigo

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Narrador Omnisciente

Una semana había pasado y Nabi se encontraba excelente.

Durante todos esos días todos los chicos fueron a estar con ella en su casa de Tokio junto a su padre que no la dejo sola ni un segundo por miedo a que le pasará algo.

Daichi seguía pendiente de ella, aunque no podía ir todos los días porque ahora tenía que viajar desde Miyagi a Tokio.

— ¿Cómo te sientes Nabi? — su padre llegó a su cuarto con una bandeja en sus manos, ahí habían dos platos para el desayuno.

— Muy bien papá, me siento bien — ella sonrió levantándose de la cama, la herida que había tenido en su abdomen y cabeza ahora ya estaban curadas al total.

No había mas peligro alguno.

— Me alegra cariño, pronto será la final, ¿Estás lista para jugar? — Ella asintió con una gran sonrisa, estaba más que lista para jugar la final que aunque no sabía contra que equipo sería, estaba mas que contenta de poder jugar y estar mas tiempo en la cancha.

Por otro lado los jóvenes del Karasuno se encontraban todos reunidos más los amigos de Nabi.

— ¿Todo está listo? — Pregunto Daichi mirando a los demás, estos asintieron.

— ¡Nabi estará demasiado feliz cuando lo sepa! — Bokuto brinco a los brazos de Akaashi con una sonrisa, que obviamente le saco una sonrisa al nombrado.

— Ya quiero ver su reacción — Nishinoya se acercó.

— No. Ellos estarán solos, lo sabremos cuando la veamos con el puesto — Suga hablo serenamente con una sonrisa en su rostro, lo que le estaban ayudando a hacer a Daichi para que le diera a Nabi era una sorpresa para la chica, era algo íntimo para los dos.

— ¡Está bien! ¡Que emoción! — Hinata saltaba de un lado para el otro mientras molestaba a Kageyama.

— Todo saldrá bien amigo, tranquilo — Kuroo se acercó a Daichi y posó una mano en el hombro del moreno.

Daichi asintió y sonrió, quería que fuera una gran sorpresa.

El día de la final había llegado, todas las personas habían ido a ver este gran partido, medios periodísticos, músicos y muchos más estaban ahí para ver ese partido que llenaría de emoción a más de uno.

Todos los amigos, familia y acompañantes de Nabi estaban ahí, en el lado de su público animando.

— ¿Daichi le dará la sorpresa a mi pequeña? — pregunto Fuki en un susurro a Ukai. Este sonrió y asintió.

— Lo hará antes del partido — Fuki asintió, estaba orgulloso de los dos.

Nabi llegó con su equipo, el lugar se llenó de gritos y alegría, todos aplaudieron gritando halagos hacia las chicas.

— ¡Nabi! ¡Liz! — Las nombradas miraron hacia donde las llamaban y pudieron ver a Tanaka, Nishinoya, Bokuto, Hinata, Suga y Kuroo, alzando sus manos saludando, estás sonrieron y saludaron.

— Vino mucha gente — La pequeña libero se acercó a ellas un poco asustada.

— Tranquila, todas estas personas están aquí para apoyarnos, ¡Vamos a ganar! — La pequeña sonrió ante las palabras de animo de su capitana.

Dos Capitanes, Dos Corazones • Daichi SawamuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora