Conversación

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Narrador Omnisciente

Días se acercaban a las nacionales, y todos se encontraban nerviosos, emocionados y listos para jugar.

— ¿Te encuentras bien Suga? —Nabi pregunto al ver a Suga sentado en un banquito en la calle, tenía su cabeza entre sus manos.

Habían salido, Daichi, Suga, Asahi, Shimizu y Nabi a tomar un café e ir al templo para pedir varias cosas.

— Si, es solo que tengo una duda — el chico la miro esperando que se sentara a su lado, ella lo hizo, los demás chicos se encontraban pidiendo el café tuvieron que ir ellos ya que Asahi dice que no quiere pero después dice que si y luego no sabe que escoger.

— Dime Suga — el asintió tomando un respiro.

— Mm, he pensado mucho estos días de mi relación junto a Liz — ella asintió un poco asustada, no le gustaba hacia donde va la conversación. — Y he querido no se... Pero me gustaría decirle que quiero ir junto a ella en la universidad.

— ¿En serio? — pregunto la chica, estaba conmocionada, su amigo quería dar un paso mas con Liz, el asintió, quería saber la opinión de la chica, se habían convertido en dos personas tan cercanas uno del otro que parecían ser hermanos.

—Si, no se cómo lo tome ella, pero yo la quiero para mí futuro, no solo mientras estamos en tercero. — Nabi sonrió feliz y lo abrazo, este se sorprendió pero aún así lo acepto.

—¡Ella estará feliz, demasiado feliz diría yo, estoy tan feliz por los dos! — el chico rio por la emoción de su amiga.

— Gracias Nabi, me alegra saber que te alegra la situación — ella sonrió asintiendo, girando su vista a su lindo novio que se encontraba discutiendo con Asahi que no se decidía, shimizu solo los veía cansada. —Lo más seguro es que Daichi y tú sigan por los siglos de los siglos.

Ella rió con fuerza.

— En serio Nabi, su amor es muy fuerte, demasiado diría yo, cuando te paso lo de el ataque Daichi se veía preocupado, hasta tú también lo estabas cuando tenías esos sueños, de hecho, ¿No los volviste a tener? — el pregunto, ella negó con su mirada de nuevo en su chico al lado.

— No, agradezco no tenerlos, pero igual siento que son una ayuda — el asintió, los tres chicos se acercaron a ellos, Daichi le sonrió y se sentó a su lado pasándole un café.

— ¡Vamos al templo! — Suga hablo emocionado, quería pedir para que les fuera bien en los partidos de las nacionales.

Ellos asintieron emocionados.

— ¿Que pediras tú Daichi? — Suga, Asahi y Daichi se encontraban en el templo, Shimizu y Nabi, veían recuerdos en una tienda.

— Pediré por los partidos míos y los de Nabi, y pediré por nuestra relación, quiero seguir junto a ella durante mucho tiempo, quiero poder verla triunfar y ser feliz, a mi lado.

Los dos chicos sonrieron.
Quería que pasara así, exactamente así.

Los chicos se encontraban entrenando en el gimnasio, les faltaban pocos días para su primer partido cosa que los ponía demasiado nerviosos.

Dos Capitanes, Dos Corazones • Daichi SawamuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora