- Mi hermano me habló mucho de ti, ¿sabes? - dijo María mientras le acompañaba
- ¿De mí? - dijo Juanjo mirando a la muchacha de reojo- seguro que nada bueno.
- Te equivocas – dijo María poniendo los ojos en blanco- eres una de las personas en quien más confía en Madrid, me contó cuando saliste a buscarle, aquel día que se molestó con Kiki por lo de Instagram.
Lo recordaba perfectamente, Kiki y Rus estaban muy preocupadas porque Martin se había ido muy enfadado solo por las calles de Madrid y hacía ya unas horas que no sabían nada de él, y no les cogía las llamadas ni respondía a los mensajes. Todavía no sabe porque pero tuvo la corazonada de que iría a algún parque a pasear, y el primer lugar que le vino fue el Retiro, evidentemente cerrado a esas horas de la noche, por eso lo encontró sentado junto a la verja.
- Bueno, salimos todos a buscarlo- dijo Juanjo intentando quitarle importancia.
- Pero tu supiste donde encontrarlo- dijo María.
Juanjo se estaba poniendo un poco nervioso con aquella conversación, nunca creyó que Martin hablaría de él con su familia. Menos después de haberle dicho por aquel entonces que solo quería que fueran amigos. Su hermana estaba siendo muy insistente y le daba la impresión que tenía la mosca detrás de la oreja.
- ¿Qué más te contó?- dio Juanjo
- Si lo que quieres saber es si sé que os besasteis una vez, lo sé- dijo María- una pena que solo quedarais como amigos, pareces majo.
Cuando escuchó aquello Juanjo abrió mucho los ojos y le dio la tos atragantándose con su propia saliva, no podía no ser hermana de Martin, hablaba con su misma claridad y sinvergonzonería, tal para cual. Lo que le extrañaba era que no supiera nada más, si le había contado aquello... ¿Por qué no le había contado lo de las últimas semanas? ¿Se avergonzaba de él y de la relación que tenían?
- ¿Seguís siendo solo amigos? - dijo María- ayer vi la foto que subió el lunes a Insta, estabais muy juntitos y felices.
- ¿Estabas peleada con tu hermano?- dijo Juanjo – creo que te faltan un par de capítulos
Vio como los ojos de la chica brillaban de emoción mientras sonreía ampliamente. Mierda, no tendría que haber dicho eso, pensó Juanjo inmediatamente.
- Se me rompió el móvil hace un mes, y como castigo, mis padres me dejaron sin móvil hasta navidades. Por eso no podía hablar con él, paso la mayor parte del tiempo en el internado de Francia - dijo María parándose en la sala de espera de la tercera planta cuando salieron del ascensor- Bueno... ¡actualízame!
- Tu hermano no es tan cotilla como tú, aunque si igual de intenso- dijo Juanjo poniendo los ojos en blanco.
- Venga Juanjooooo, si estás aquí es por algo, ¿Por qué vendrías desde tan lejos? - dijo María
- Dos horas y media de coche no es tan lejos- dijo Juanjo- bueno, ¿vas a decirme cuál es su habitación?
María puso cara de enfado mientras se cruzaba de brazos, cosa que hizo que Juanjo soltara una risa en voz baja.
- La 308- dijo María dándose por vencida y pulsando el botón del ascensor- voy a ver si puedo pillarle algo de la cafetería y meterlo de contrabando.
Ya estaba allí, había llegado a la tercera planta, y estaba frente a la puerta 308, la cual estaba entreabierta, dentro estaba todo en silencio, no se escuchaba a nadie hablando ni haciendo ruido. Juanjo empujó un poco la puerta mientras tocaba con los nudillos. Un hombre alto y con gafas se puso en pie al verle llegar, y en la cama que estaba ocupada se encontraba Martin, y junto a él había un crio que se le parecía mucho, seguramente ese era Erik. Estaban jugando con unas Nintendo animadamente.
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El hilo rojo , Juantin
Fanfiction¿Qué habría sido de Juanjo y Martin si no hubieran entrado en Operación Triunfo? ¿Se habrían encontrado? ¿Se habrían enamorado? Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias...