- Deborah - 2

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Que pase lo que tenga que pasar.

Me armo de valor y le mando mensaje a Stella disculpándome por lo del beso que pudo haberla incomodado.

No me pude resistir a ella, fue como si mi cuerpo actuara por sí mismo, el baile y nuestras manos rozándose...

Al final me dijo que no se había enojado y eso hizo que mi corazón volviera a latir como loco. ¿Por qué?

Sigo sin entender qué es lo que me hace tener interés en Stella.

Me duermo tratando de buscar respuestas en mis sueños, pero sucede lo contrario y no dejo de pensar en ella.

Al levantarme hago mi rutina de ejercicio y me arreglo antes de ir a la escuela. Estoy en mi último año y queda poco para que me vaya a la universidad.

Al cumplir dieciocho mi padre me regaló un auto y me dijo que lo usara para moverme yo sola. Sigue con la idea de que si soy más independiente nunca voy a pedir favores a nadie.

Y tiene razón, hasta cierto punto.

Durante las clases no dejaba de pensar en ella. Tengo que buscar una forma de recompensar el mal rato que le hice pasar, aunque ella me dijo que todo estaba bien.

Pero ¿Qué puedo hacer?

-¿En qué tanto piensas? – dice Emily

-En nada, estoy cansada – suspiro – Ayer fui a una fiesta.

-¿Y no te gustó?

-Sí 

Intenta hacerme plática, pero al ver que mis respuestas son cortas se va. Desde aquella vez que tuve una "mejor amiga" y que me traicionó para burlarse de mí frente a toda la escuela no he vuelto a confiar en nadie.

¿Por qué querría hacer amigos con ellos cuando sé que todos en nuestro círculo social son falsos?

Me quiero dar una oportunidad y es con Stella.

Hay algo en ella que me hace pensar que ella es diferente.

Una llamada de mi padre me saca de mis pensamientos.

-¿Cómo vas con lo que te pedí?

Al menos un buenos días, hija, ¿No?

-De lo de Alisson no llevo ni un día de conocerla, padre. Aparte de que es más difícil cuando estamos en diferentes escuelas.

-Tienes razón, pero me dijeron que no podía cambiarte de escuela casi a final del semestre.

¿Por qué la urgencia con juntarme con Alisson? ¿Tanto miedo tienen de que se les vaya de las manos?

-Invítala a cenar hoy. Ya te deposité para que vayan a un buen lugar – cuelga.

No es mala idea...

Aunque no tanto por salir con Alisson, digo, si quiero ser su amiga, pero es la excusa perfecta para invitar a Stella.

Le mando mensaje y sorprendentemente me contesta en el momento. Me puse un poco triste al ver que ya tenía planes, pero si escucho su voz tal vez la pueda convencer.

-Hola... – digo nerviosa - ¿No interrumpí nada o sí?

-Hola, para nada, estaba descansando la vista un poco. ¿Y tú que haces?

-Pensando en ti – empieza a toser y sin evitarlo comienzo a reír.

-¿Estás bien? No creí que fueras de esas que se ponen nerviosas.

-Estaba tomando un vaso de agua, no es como que me haya impresionado tu comentario – dice molesta.

No sé por qué ese comentario me dolió mucho.

No puedo olvidarte...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora