No puedo olvidarte...

- Prólogo -

Stella

No aguanto más esta situación, me tengo que ir.

Lo he pensado por mucho tiempo y es lo mejor... no puedo seguir con ellos.

Ella me va a odiar como nunca lo ha hecho y con toda la razón.

Los acabo de dejar en el parque para que estuvieran a la vista de todos y en la mesa dejé una carta.

Escribirla fue lo más doloroso que he hecho en mi vida, tuve que volver a romper su corazón...

No quiero hacerlo...

No quiero dejarlos...

Prefiero que me odien a que algo les pase.

No importa cuánto tiempo me tome, pero buscaré la forma de regresar con ellos.

Deborah

No entiendo lo que está sucediendo.

Veo que a lo lejos Ali está hablando por teléfono y me preocupa su reacción, se ve confundida, pero a la vez tiene la mirada perdida, como si estuviera tratando de procesar algo, la pregunta es ¿Qué?

Últimamente Stella y yo no hemos estado del todo bien y sé que no es justificación mi embarazo, pero siento que se está alejando.

No quiero perderla otra vez. Esos años que estuvo alejada de mí fueron los peores de mi vida, y ahora que tenemos una familia más que nunca quiero que sigamos juntas.

-Deb tenemos que hablar – dice Ali con la mirada perdida.

¿Qué pasó en esa llamada?

-¿Qué está pasando?

Ali le pide a Chris que se lleve a los niños, al ver todos se fueron me volteo y Ali me ve con profunda tristeza.

No.

Esa expresión la conozco, es la misma cuando me dijo que se fue.

-No es cierto – digo con la voz quebrada.

No nos puede hacer esto.

En cuanto llegamos a la casa me bajo corriendo de la camioneta y la casa está completamente en silencio.

-¿Amor? – digo llorando - ¿Dónd-

Veo una carta en la mesa y me acerco temiendo lo que pueda encontrar.

Tomo la carta y la leo sintiendo que me están clavando un puñal con cada párrafo que hay en él.

-Se fue...

-¡¿Qué?! – dice Ali y le doy la carta.

-Lo hizo otra vez... - sollozo – Ella nos abandonó...

Sabía que estábamos pasando por un mal momento, pero no para llegar a este punto.

Ni siquiera se despidió de sus hijos.

-¡¿Por qué nos estás haciendo esto otra vez?! – grito.

Unos brazos me rodean por la espalda y me dejo caer esperando buscar consuelo en los brazos de Ali.

-Tienes que ser fuerte Deb, hazlo por tus hijos – dice Ali pasando una mano por mi vientre – Ella tiene que regresar... no nos puede dejar así – solloza.

Ella prometió que no se iría...

¿Qué voy a hacer ahora con mis hijos? ¿Cómo les voy a explicar que su mamá se fue?

¿Porqué tenías que ser tan cruel y jugar con mis sentimientos otra vez?