Capitulo 14

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 Lo seguí mientras salía de la habitación, sintiendo una mezcla de nerviosismo y apoyo. Caminamos en silencio por el pasillo hasta llegar a la habitación de Cenk y Cemre. Cuando Nedim tocó la puerta con fuerza, se podía sentir la tensión en el aire.

Cenk abrió la puerta, su expresión cambiando de curiosidad a preocupación al ver a Nedim. Cemre estaba sentada en el borde de la cama, su rostro palideció al ver la determinación en los ojos de Nedim.

—¿Qué sucede, Nedim? —preguntó Cenk, tratando de ocultar el nerviosismo en su voz.

Nedim entró sin esperar una invitación, su postura tensa y decidida.

—Necesito hablar con ustedes —dijo, cerrando la puerta detrás de él. Me quedé en el pasillo, sin querer entrometerme pero lista para intervenir si las cosas se salían de control.

—¿De qué se trata? —preguntó Cemre, su voz apenas un susurro.

Nedim los miró a ambos, su mirada dura como el acero.

—Sé lo que hiciste, Cenk. Creíste que me había olvidado, pero no es así. Sé que fuiste tú quien me empujó por la ventana. Y tú, Cemre, has sabido esto todo el tiempo. ¿Cómo pudieron ocultarme algo así?

Cenk palideció, y su mandíbula se apretó visiblemente. Cemre bajó la cabeza, incapaz de sostener la mirada de Nedim.

—Nedim, no es lo que piensas... —empezó Cenk, pero Nedim lo interrumpió, su voz cargada de furia contenida.

—¿No es lo que pienso? ¿Entonces qué es, Cenk? ¿Un accidente? ¿Un malentendido? Me arrebataron mi vida, mi futuro, y ustedes han vivido con esta mentira. —Nedim respiró hondo, tratando de controlar sus emociones.

Cemre finalmente levantó la vista, lágrimas brillando en sus ojos.

—Nedim, lo siento tanto... No hay excusas para lo que hicimos. Solo quería protegerte y proteger a Cenk.—¿Protegerme? —Nedim dejó escapar una risa amarga—. ¿Cómo puede ocultar la verdad ser una forma de protección? Me hicieron vivir en la oscuridad, cuestionando todo lo que sucedió.

Cenk dio un paso adelante, su voz firme pero llena de arrepentimiento.

—Nedim, sé que no hay nada que pueda decir para arreglar esto, pero quiero que sepas que he vivido con esta culpa cada día. Lo que hice fue imperdonable, y estoy dispuesto a enfrentar las consecuencias.

Nedim lo miró fijamente, evaluando cada palabra.

—Las consecuencias... —repitió en voz baja—. Sí, habrá consecuencias. Pero no soy yo quien debe decidirlas. Eso lo hará la justicia.

La declaración de Nedim cayó como una bomba en la habitación. Cenk y Cemre se quedaron en silencio, comprendiendo la gravedad de lo que estaba por venir.

—Voy a hablar con la policía —dijo Nedim finalmente—. Esta farsa se termina aquí. Es hora de que la verdad salga a la luz, y de que cada uno de nosotros enfrente lo que ha hecho.

Nedim se dio la vuelta y salió de la habitación, su determinación inquebrantable. Lo seguí, sabiendo que el camino hacia la verdad sería doloroso, pero necesario.

Mientras nos dirigíamos hacia la salida de la casa, decidí intervenir, porque el futuro si continuaba con eso era tormentoso.

—Nedim, ¿enserio vas a hablar con la policía? —preguntó, mirando a Nedim.

—Es enserio, voy a hablar con la policía —respondió Nedim, su voz firme—. Es hora de que la verdad salga a la luz.

Al escuchar su respuesta fruncí el ceño y di un paso adelante, colocando una mano en el brazo de Nedim.

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora