Patrick
Todo se rompe, lo material las relaciones, lo tangible. Se hace polvo, desaparece de nosotros en un abrir y cerrar de ojos. Y si no es así, somos nosotros mismos quienes acabamos con ello, lo dañamos aun no queriendo hacerlo. Lo arruinamos con el paso del tiempo.
Hay una frase que me hace mucho sentido y nunca me había resonado tanto en la cabeza hasta que Luz se largó y no supe más de ella. "La persona que más dolor o pena te cause, queriendo o sin querer, será la misma que amarás por sobre todas las cosas.
Y yo no he amado jamás, pero vivo imaginando como habría sido un "tal vez" no tan corto entre ella y yo. Como se hubiese sentido su compañía, su amor. Sí las cosas no se hubiesen enredado tanto. Por qué si no fuera así, Luz y yo hoy estaríamos cumpliendo dos meses de conocernos.
Lose porque lo apunte en el calendario, como esas fechas que creemos que son importantes para nosotros y ahora, aunque la borre del papel, aunque lo tire a la basura, su recuerdo y esa fecha siguen existiendo en mí.
Y que iluso me siento cuando pienso en el que "estaríamos" cumpliendo tiempo juntos, porque antes era una certeza y ahora es algo que suena demasiado lejano para los dos.
-
Pienso que odio el hecho de a verme venido a quedar aquí, donde estas paredes y este sentimiento se hace cada vez más pesado. Odio pasarme el tiempo haciendo las cosas que antes hacíamos juntos.
Y solo ha sido una semana muy difícil, y creo que es tiempo suficiente para aceptar que la extraño. Que quiero ir a su puerta y que me abrace, que llegue a tomar conmigo su vaso favorito de chocolate caliente. También he querido ir, toparme con ella como de casualidad y empezar de cero, o tal vez pedirle disculpas por que se las merece. Pero no quiero ser egoísta, porque esto es lo que yo quiero y luego viene todo lo que ella quisiera. Y si Luz quisiera saber de mí, si tuviera ese pensamiento de salir de su habitación y venir por mí, sería tan simple como abrir la puerta, dar un par de pasos y llegar aquí.
Pero no... eso no pasa. No sucede.
Me quedo mirando la puerta que está cerrada en la oscuridad, y solo son las seis de la tarde.
Pero no hay más, no tengo ganas de salir, ni de fingir que estoy de maravilla cuando todo lo que necesito se resume solo a una persona.
"A ella."
Sin embargo, no hay señales, no existen las visitas inesperadas, ni un mensaje en mi celular que llegue al menos con su nombre, porque nunca se me ocurrió pedirle el número. Tan poco un nos encontramos por ahí. Y no llega a las clases, ni tan poco se pasea por los pasillos, ni llega al casino de imprevisto. Ni quiere arreglar las cosas conmigo, ni mucho menos quiere verme a mí.
-
Puse la cabeza en la almohada solo por un momento, cerré los ojos evadiendo el nudo que traía en la garganta. Y suspiré, sentí como todo ese dolor se alejaba de mí, pero no desaparecía.
-
Hasta que la puerta se abrió y la luz del pasillo me incomodo en los ojos.
Patrick... Creo que te has metido en un buen problema.
¿Qué?... pregunte.
Levántate, dijo el hombre. El cual reconocí al rato, como el ayudante del director.
-
Me puse una polera negra y salí con lo puesto. Sentí como el cuerpo se me tensaba y una sensación de angustia se apoderaba de mí.
Llegue a la oficina donde me habían señalado que estarían los implicados, en la situación. Y al abrir la puerta la vi, se me borro todo el entorno, porque no podía equivocarme, jamás podía equivocarme si se trataba de ella.
Quien estaba sentada frente al director, dándome la espalda era Luz.
Respiré, di un paso al frente y cerré la puerta.
La tensión en el ambiente entre ella y yo solo se hizo cada vez mayor cuando me senté a su lado.
Porque aquí se ponía fin a la distancia, a esa distancia que en ese momento me estaba matando.
-
Hablo el director.
Bueno Patrick, lamento verte en esta situación siempre has sido uno de nuestros estudiantes estrellas, de actitud intachable, de los que no están jamás en pleitos, tienen buena disposición, buenas notas, y más encima eres uno de nuestros ayudantes, al igual que Gian y Diego, que son tus amigos. Pero eso no te libra de que hayas roto algunas de nuestras reglas junto a Luz.
Los mire a los dos confundido.
Los ojos de Luz estaban hinchados al parecer había estado llorando.
-
Hemos revisado las cámaras, hace unas semanas atrás tú y ella...
Luz interrumpió.
Yo puedo decirle.
Adelante cuéntale entonces.
-Tú y yo estuvimos juntos Patrick, entraste a mi habitación ¿Lo recuerdas?
Nosotros no hemos pasado la noche juntos. Jamás hemos llegado a ello.
"Mentí."
Chicos cooperen por favor, no me hagan perder más el tiempo.
De nuevo esa mirada, esas lágrimas en su mejilla recordándome como la perdí.
-Se que no hemos tenido esa noche, pero él se refiere a la vez que me quede afuera porque te llevaste mi tarjeta por equivocación.
Trague hondo mirando a Luz, queriendo abrazarla, queriendo evitarle las lágrimas en los ojos.
Pero no podía hacerlo porque esto lo limitaba y complicaba todo un poco más, poniéndonos una barrera delante cada vez más firme y más difícil de derrumbar.
Sí. Si lo recuerdo ¿Qué hay con ello?
Pues han roto las reglas de no salir de noche de sus habitaciones, y también la de la privacidad.
Pero no paso nada, solo entre y salí.
Patrick lo lamento. Estos impulsos o lo que sea que haya pasado entre ustedes debe acabar ya. Se lo de la cita que tuvieron hace una semana en la biblioteca, lo vi todo. Pero no se los voy a tomar en cuenta por que eso haría todo peor para ustedes. Pero si deben saber que con esto uno de los dos debe pagar, y se debe ir de aquí. No es mi regla es la del comité de la facultad y debo ser justo como con todos los alumnos.
-
Luz se echó a llorar.
Yo me voy. Dije de manera clara y segura.
¿Qué? pregunto el director.
Eso, que Luz ha luchado demasiado para entrar aquí, no se puede ir, está estudiando, yo...yo me voy ¿Perderé mi trabajo?
No, obvio puedes seguir haciendo tus clases. Respondió el director.
Está bien, me parece perfecto yo me voy y ella se queda. Resuelto.
Me puse de pie y salí sin mirar a ninguno de los dos de la oficina.
ESTÁS LEYENDO
LA CHICA DEL TORDO [TERMINADA]
Roman pour AdolescentsUN AVE, DOS JOVENES, UNA FACULTAD Y LA IDEA DE CREAR UN BUEN LIBRO. Luz es la chica que mantiene en secreto su libro "lo más hondo de mí." Patrick es el ayudante metiche que puede hacer de su idea una realidad. Ella una chica obsecionada con escribi...