𝐍𝐎 𝐄𝐒𝐓𝐎𝐘 𝐈𝐍𝐓𝐄𝐑𝐄𝐒𝐀𝐃𝐀 || 𝐅𝐑𝐄𝐄𝐍𝐁𝐄𝐂𝐊𝐘 (𝐆!𝐏)

Capítulo 3.

Pov Becky.

Llego al bufete y lo primero que veo al llegar es al señor Sup mirarme con descaro lo cual me desagrada de sobremanera, pero lo ignoro y me encamino hasta Nita la cual me mira con cara burlona.

—Pase señor Sup —digo con una sonrisa totalmente falsa.

—Buenos días abogada Becky —me dice él viejo verde mirando mis piernas hasta que me siento en mi escritorio.

— Cuénteme señor Sup en que lo puedo ayudar—digo sacando mi libreta para luego pasársela a Love cuando la vea.

—Bueno Becky necesito divorciarme—dice con una sonrisa.

—Otra vez?? —le pregunto sorprendida pensando cuantos divorcios lleva hasta ahora.

—Si, es que me canse de ella no me satisface en todos los sentidos—dice el descarado.

—Bueno tranquilo hablare con Love sobre esto y como en los anteriores divorcios no se preocupe que nada de su patrimonio se vera comprometido—le digo escribiendo en mi agenda todo los datos de su futura ex esposa para hablar lo antes posible con ella.

—Muy bien Becky sabia que tu lo resolverías si por algo eres tan guapa e inteligente— dice para mirarme fijamente de forma seductora.

—Jaja, gracias señor Sup ahora pase con Nita para que agende lo de su divorcio exprés y así hablarlo con mi socia—le digo por último para abrirle la puerta de mi oficina.

Cuento en mi mente hasta 10 porque se que mi secretaria vendrá furiosa.

— 10

— 9

— 8

— 7

— 6

— 5

— 4

—3

—2

—Eres una maldita—dice muy molesta entrando de repente en mi oficina.

— Tu empezaste—le respondo simplemente para ver la hora son las 1.

—Si, pero tu me dejas con ese viejo verde al asecho—me reclama con sus ojos asqueados.

—Bueno mira te lo compensare, ya es hora de almorzar apaga todo yo cierro mi oficina, tu eliges donde comeremos—le digo para sonreírle.

—Hay jefecita como me voy a negar a la comida—dice con una sonrisa.

Es bien bipolar, pero que le puedo hacer después de todo es la única secretaria que me ah durado en tanto tiempo.

°°°

Al día siguiente.  

Hoy era mi día de descanso como todos los sábados me desperté a eso de las 10 am y salí a trotar por las calles cercanas a mi casa.

Sentía como mis músculos me quemaban pero me encantaba no había nada como ese dolor tan placentero al ejercitarme,  luego de 30 minutos de trote me estoy devolviendo y lo primero que veo es un camión de mudanza enfrente de mi casa lo ignoro para entrar, voy a la cocina con calma para beber un poco de agua me quito mi polera sudada quedando en un brasier deportivo, busco el control para abrir la ventana y veo a una mujer castaña hermosa.

No puedo evitar mirarla por mucho tiempo, su sonrisa me encanta, sus ojos no los puedo ver muy bien por su pelo, pero siento que mi corazón late rápido lo cual me extraña yo nunca e sentido algo así por nadie.

—¿Quien es ella?— me pregunto sin poder dejar de mirarla.

Me apresuro a bañarme para prestarle ayuda a la morena guapa que me acelera el corazón con solo mirarla subo de a dos escalones para apresurarme, me ducho a la rápida y busco un poco de ropa cómoda. 

Salgo de mi casa apurada y con mi mejor sonrisa, cruzo la calle hasta encontrarme a un lado de ella.

—Buenos días—le saludo y ella se sobresalta y me muestra su hermoso rostro de frente.

—Buenos días— dice bastante fría.

—Soy Becky Armstrong tu vecina de enfrente—le digo con una sonrisa.

— A mucho gusto soy Freen Sarocha—me  dice aun fría, por lo que me parece raro, pero lo ignoro para decirle.

—¿Necesitas ayuda? — le pregunto al ver todo lo que trae.

—No quiero molestarte— dice algo apenada, pero es que si que trae muchas cosas.

—Oh no tranquila es mi día de descanso así que puedo ayudarte con tranquilidad—digo con una gran sonrisa.

—Esta bien, pero si no puedes tranquila —me dice a lo cual miro a los de la mudanza y por causalidad los conozco ya que ellos fueron los mismos que me ayudaron a mi.

—Hola chicos— les digo y ellos me saludan y Nop el jefe me pasa una de las cajas y la llevo dentro con bastante facilidad para dejarla en el piso del living.

Salgo una vez mas y esta ves me entrega lo que parece ser una cuna, lo cual me decepciona, debe ser casada, continuo acarreando cajas y cosas con bastante rapidez para irme rápido más ahora que la morena que me encanto esta casada.

—Toma abogada—dice Nop pasándome una caja muy pesada.

—Estas segura de que te la puedes llevar? —me pregunta algo preocupada la morena.

—Claro que si, solo dime donde la dejo—le  digo como si nada.

—En el segundo piso—dice mirándome con extrañeza. 

Me encamino hasta el lugar intentando ignorar el latido de mi corazón, el cual retumba en mi cabeza cuando llego suenan lo que creo que deben ser unas tablas y el sonido de unos tornillos me fijo en la caja y noto que es un cambiador para bebe.

—Bueno creo que eso es todo ahora me iré— digo cansada bajo rápidamente y llego hasta donde se encuentra.

—Bueno cuídate—le digo para despedirme de los chicos y estos me sonríen, la castaña iba hablarme cuando siento que alguien me abraza por la espalda y se quien es.

—Hola princesa—digo para voltearme y alzar a mi pequeña vecina Canny.

—Hola Becca—dice con su voz infantil.

—¿Ella quien es?—me pregunta apuntando a la castaña.

—A pues ella es Freen nuestra nueva vecina— digo mientras la otra mujer sonríe quitando su fría mirada, asiéndome suspirar.

—Ella es tu hija—dice esta.

—No, ella es nuestra pequeña vecina Canny, es hija de nuestras vecinas Lisa y Jennie — le explicó tranquila.

—A bueno, hola Canny— la salida con una sonrisa.

—Bueno Freen fue un gusto ayudarte—digo para intentar escapar de la situación.

—Muchas gracias Becky.. —dice con una sonrisa, la cual no puedo corresponderle.

Canny se despide de mi y yo me dirijo hasta mi casa para seguir con mi fin de semana tranquilo, bueno tranquilo entre comillas, ya que debía avanzar en un par de casos pro bono que tomo cada 3 meses.