Medidas desesperadas

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⚠️ ADVERTENCIA ⚠️
El presente escrito tiene contenido erótico de consentimiento dudoso.

Katsuki es una chica difícil ¡Desde siempre! Comunicarse nunca fue su fuerte y ahora cuando entró a la adolescencia se hizo una bola de nieve dicha necesidad. Ella se enamoro de su amigo de infancia, un nerd, alguien que es poco agraciado pero emite "algo" que llama mucho la atención, tiene un grupo de chicas babeando por él y a pesar de que al inicio fingió ser su novia para que se mantuvieran al margen, al final Izuku termino esa farsa de un dia para el otro. La chica se sintió decepcionada, amaba estar con su pecoso agarrados de la mano, dándose piquitos ocasionales y así ella tenía justificación para amarrar correctamente su corbata del uniforme, su cabello o cualquier cosa para tener contacto.

Ahora lo hacía alguna compañera del salón o alguna chica de otro grupo, al final Izuku solo sonreía y agradecía. ¡Diablos! Katsuki se sintió tan idiota por creerse especial, es guapa esta conciente de ello, pero ¿De qué sirve si no puede obtener al chico que le gusta? Se la pasa diciendo que son solo amigos, amigos de infancia y nada más. No lloraba por eso, en cambio la ponía de mal humor, el triple de mal humor.

Si no iba a obtener su corazón, perdería su virginidad con él, lo malo es que Izuku no lo sabía.
Sus padres fueron a un retiro y al ser adolescentes no quisieron a ninguna niñera, en cambio iban a quedarse juntos un par de días, solos.

Sabía del sueño pesado que tiene el pecoso, sabe que se duerme fácilmente y sabe que la ropa que usa para dormir será fácil de quitar.
No dió tiempo, apenas la primera noche inicio en acción con la esperanza de que cogieran las tres noches seguidas que compartirían.

Ella se desnudo y se puso encima del cuerpo ajeno dándole la espalda, soltó un pesado suspiro, en su conciencia sentía un poco de culpa, Izuku nunca le haría algo así ¿Eso la haría una mala persona? Sin duda alguna, está abusando de su confianza y cuerpo.
Aunque la racionalidad se fue al carajo cuando noto el gran bulto entre los pantalones de su amado. Mordió su labio inferior y bajo el elástico saliendo de golpe la dura vergą del pecoso y deseo dentro más que nunca. Katsuki se había preparado desde temprano aflojando para hacer todo más rápido, apenas hace un par de minutos se quito un plug.

Levanta sus caderas para dejarse alinear y caer lentamente sobre la polla que de inmediato abrió paso, agradecía que aún estuviese mojada eso lo facilito mucho.

Cuando la introducio toda, se tomó unos segundos para respirar y empezó la cabalgata de sus sueños, no te importaba despertarlo, al contrario, le excitaba que le descubriera y ojalá la vista de esa verga perdiéndose entre su coño o su culo rebotando sea lo suficientemente bueno para que la tome y la empotre.

Sus pensamientos-deseos se ven interrumpidos cuando sujetan sus caderas y se sobresalta. 
—¡¿Qué carajos?! -
Pregunta por el apretón.

—K-kacchan...-
Lo nombran jadeante.

La rubia sonríe sin detener su calbagata, gira un poco su cabeza para mirarlo de reojo.
—Oh, ya despertaste, maldito nerd ¿Cómo escondías este gran trozo de carne, a pesar de que mi coño es para recibir pollas, siento que voy a desfallecer.

Izuku se sienta, abraza a Katsuki por su abdomen evitando que se mueva.
—¿Te sientes bien? ¿Estas tomada? -
Le pregunta con suavidad, pero sabe que está preocupado.

La rubia se sintió culpable.
—Eres un ángel, si das cuenta de lo estoy haciendo.-
Sube su mano acariciando la mejilla pecosa.

—Me alegra que estés conciente, así recordarás todo lo que haremos juntos, Kacchan...-
Concluye besando el cuello de la chica, se deslizan juntos hasta caer al colchón.

A pesar de que Katsuki deseaba eso y estaba en sus planes, debe confesar que se sorprendió, se dejaría ser por su amorcito.
Izuku se enderaza retirando su ropa, enfocando su mirada en la rubia, le encanta que despegue su vista en su ahora torso desnudo. Toma una de sus piernas y la eleva para colocarla en su hombro, dejo un camino de besos hasta la pantorrilla dónde mordió de manera juguetona robando un suspiro de Katsuki. El chico se posiciona cómodamente cerca para alinear su glande y penetrar a la rubia que mordió su labio cuando los embistes fueron inmediatos, deja caer su cabeza hacia atrás mientras se aprieta sus senos gimiendo satisfecha del ritmo.

Izuku noto como el pecho de la chica se empezó a marcar por sus propias uñas y como sabe la flexibilidad de ella, se permite bajar a pesar del estiramiento de su pierna logrando sujetar las manos de Katsuki y ponerlas sobre su cabeza para el atender a tan delicioso postre.

—E-espera me correre-e

Libera su pezón.
—Esta bien Kacchan, yo también estoy a punto de-e

Izuku consigue su orgasmo, pero nota que la rubia no, así que toca su clítoris para masajear logrando en segundos sentir el apretón y la humedad de su "amiga".

Agitados, toman varias respiraciones, hasta que el pecoso recupera fuerza para enderezar y bajar la pierna de Katsuki. Se deja caer a un lado.

Cuando Katsuki recupera la consciencia, lo voltea mirar apenada, más cuando se dió cuenta que la miraba fijamente con una pequeña sonrisa.

—¿Qué? -
Le pregunta con su conocida arrogancia.

Izuku alza una ceja.
—¿Es lo primero que dices después de asaltarme dormido? — Se vuelve a poner arriba — Atrevida. -
Se coloca sobre su cuerpo utilizando sus senos como almohadas, retira el pelo pegado en su frente y concluye subiendo con lento beso sobre los labios de ella.

Cuando termina, el corazón de Katsuki parecía que acababa de terminar un maratón de lo nerviosa que está.
—Tu-u...

—Admito que no fue nada romántico y no como me hubiera gustado enterarme así de tus sentimientos, pero me doy por bien servido. Tu también me gustas, mucho.

—Estas muy seguro de lo que dices. -
Sube su muro de defensa, no estaba preparada para esta conversación.

—Eres muy uraña, no dejas que cualquier persona se te acerque mucho menos que te toque, así que si tuvimos intimidad es porque compartimos el mismo sentimiento ¿O me equivoco?

La chica hace un puchero infantil, ella conoce todo se Izuku, pero Izuku también conoce todo de ella.
—Te odio.

—Eso creí, ahora besame.

Katsuki rodea el cuello de su pecoso cumpliendo la petición de su ahora novio, tal vez.

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Naty Bemon 🫀

Drabbles BakuDeku/DekuBaku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora