Vida de una Serpiente Vol.1 Miedo y Hambre

Capítulo 67 El Hambre de Setas en Evolución

Quiero decir, no vi a ningún monstruo pululando por aquí cuando llegué el otro día (a excepción del mal inmortal de perdición y huesos blancos). Y ciertamente no vi ningún monstruo asesino mientras descendía hasta aquí el día que llegué. Pero eso no quiere decir que no haya alguno pululando por aquí ahora.

El riesgo existe, y [Paranoia] está de acuerdo con eso. Repto por la espiral en modo descendente hasta llegar a mi caja de zapatos y luego a la entrada del campamento. La abro y utilizo la legendaria táctica, mitad serpiente, mitad periscopio, observo los alrededores en busca de cosas horribles. Por suerte a parte del mal inmortal perlado no hay nada más que mi vista, tanto la normal como la térmica puedan ver.

Así que salgo del campamento en busca de las ya mundialmente conocidas delicias venenosas. No tengo que buscar por mucho tiempo para encontrar algunas, están por todos lados, en el suelo, las paredes, incluso en el techo.

Me yergo y agarro una con mis mandíbulas de serpiente, agitándome hasta poder romper el tronco de la seta, con eso hecho me deslizo hasta el campamento y la dejo dentro. Una vez hecho eso, salgo a por más. El ciclo se repite varias veces y una a una, me traigo como unas nueve setas y voy a por la décima.

Si consigo comerme todas estas, no tendré que volver a comer durante un largo tiempo, lo que se traducirá como más tiempo cavando. Lo que a su vez se traduce en salir de aquí más rápido.

En el último viaje, observo al esqueleto seguir golpeando sin descanso la gigantesca puerta de metal, una y otra vez, sin pausa, sin vacilación, solo un golpe tras otro.

No sé cuánto tiempo llevara este mal inmortal golpeando la puerta, pero definitivamente tiene que tener algún tipo de regeneración pasiva súper avanzada o algo así. De lo contrario esos brazos de hueso se habrían reducido a polvo hace mucho tiempo.

Simplemente absurdo, ¿qué tan fuerte es esta maldita cosa?

Aparto mi vista del esqueleto y vuelvo a reptar hacia mi campamento con la última seta entre mis diminutos dientes de serpiente. Entro y la deposito con el resto de setas, ahora oficialmente tengo diez setas.

Con todo preparado, empiezo a desencajar la mandíbula y a meterme una a una las setas en la boca, y una a una me trago todas las setas, las diez completas. Cuando acabo con la última, siento como si mi estómago fuese a explotar, miro mi cuerpo y lo encuentro más hinchado de lo que alguna vez lo he visto.

[Título: Comedor Brutal adquirido]

[Resistencia al veneno ha subido a Nv11]

Ahh, más títulos, más cosas, ya revisare luego que hace el título, por ahora vámonos a dormir, ha sido un día largo. Cierro la entrada para irme a dormir cuando un mensaje aparece en el ojo de mi mente.

[Se han cumplido las condiciones, evolución a Basilisco Toxico ha sido desbloqueada]

Noto como mi corazón se acelera y late con fuerza en mi pecho al ver el mensaje, la ansiedad trepando por mi espalda como un alpinista una montaña. No, es demasiado pronto, no estoy preparado para algo como esto, no aún.

[¿Desea evolucionar?]

[S/N]

Miro el mensaje con miedo, [Voz de Sephirot] dijo que la evolución podía ser rechazada, pero no me dijo si había consecuencias por ello, y yo tampoco quise desperdiciar magia en la pregunta. O me acorde de preguntar al día siguiente para lo que cuenta.

[¿Desea evolucionar?]

[S/N]

El mensaje se repite, instándome una vez más a elegir, recordándome que no puedo escapar de su presencia en mi mente. Que tengo que elegir, Si o No, no hay espacio para más respuestas a la pregunta que plantea.

No quiero evolucionar ahora, no me siento mentalmente preparado, no para esos menús, esas interminables listas de órganos y partes del cuerpo. Es tan terrible, tan alienígena, tan ajeno a todo lo que se, que hace que se me revuelva el estómago.

[No] selecciono, me da un poco de cosa, y no me siento preparado para evolucionar ahora.

Pensé que instinto intentaría detenerme, que me susurraría razones por las que no rechazarlo, pero solo esta ahí, callado en lo mas profundo de mi mente, observando.

[Evolución rechazada, se otorgará un diez por ciento extra de energía evolutiva durante la próxima evolución]

¿Que?—pregunto en voz alta, lo que se traduce como un ligero y suave siseo en una boca de serpiente. ¿energía evolutiva extra?, ¿no era esa cosa lo que tenía que gastar para poder evolucionar?

¿Rechazar evolucionar te da más energía evolutiva?, ¿qué sentido tiene eso?, ¿cómo rechazar una evolución otorga mas energía evolutiva?

Pensé que simplemente la pospondría, o me preguntaría si realmente quería rechazarla o algo, no sé. Algo como preguntarme si quería descartarla o posponerla, o algo así, no simplemente descartarla tal cual.

Noto como el estrés esta taladrando mi cabeza con un martillo hidráulico. Creo que tal vez he cometido algún tipo de error, o no, no lo sé, estoy muy nervioso como para pensar. No se me da bien pensar en condiciones de estrés y o de muerte segura.

Estoy cansado mentalmente después de tanta excavación, y puedo notar como una serpiegraña (migraña de serpiente) está comenzando a aparecer en mi cabeza con tan solo pensar en esto. Así que simplemente lo dejare en las divinas escamas del dios serpiente y me iré a dormir, estoy seguro que, si he cometido algún tipo de error, el dios serpiente me perdonara en toda su divina gracia.

Me acurruco en un ovillo deshecho en mi caja de zapatos y tumbo la cabeza en el frio suelo de piedra mientras intento que mi cabeza fluya y flote hacia el sueño. Pero no es fácil, cada vez que estoy a punto de lograrlo mi mente vuelve a los mensajes del ojo de mi mente una y otra vez estoy a punto de dormirme y una y otra vez mi mente decide recordármelo en el último momento.

Al final, después de mucho tiempo intentándolo consigo dejar mi mente a la deriva y que el sueño me reclame.

...

...

...

...abhrn...anmr...estoy...estoy despierto, estoy despierto.

Me estiro y desencajo accidentalmente la mandíbula, entro un poco en pánico hasta que recuerdo como volver a encajarla en su sitio y logro volver a relajarme. Ah, otro día en este agujero infectado de maldad y abandonado de la mano de cualquier dios que tenga manos. Compruebo que no haya cosas horribles saliendo desde las paredes y ofrezco mis oraciones matutinas al dios serpiente. Tengo que hacerle luego una estatua aquí donde rezarle, en esa pared quedara bien.

Con mis oraciones hechas repto por mi espiral ascendente hasta donde lo deje el día anterior y continuo con el trabajo, moliendo la tierra una vez más. Abrir tierra, trillar tierra, cortar piedra, trillar piedra, limpiar piedra y repetir...hsss, por el dios serpiente que esto es horrible, acabo de empezar y ya me estoy aburriendo.