I'm back bitches/Seth clearwater.

Capítulo 37

Durante la semana Paul había venido a cenar. Era algo raro pero al menos hacia el intento de venir. Tampoco era como si hablara mucho. Se sentaba en el sofá a ver televisión con Gwen, cada uno en una esquina y el gato en el medio. Leah se burlaba de Paul porque Dixy por alguna razón lo perseguía a todos lados.

Leah, por otro lado, se la pasa aquí junto con Seth. La verdad agradecía que hubiera tantas personas, había veces que el resto de la manada a simplemente tirarse en mi sofá y comerse lo que sea que haya cocinado Magnus.

Hoy Emily nos había invitado a cenar, a todos. Gwen no había dejado de hablar sobre lo que usaría esta noche. Estaba indecisa en si debería usar tacones normales o botines. También parloteaba sobre lo idiota que era Paul. Realmente no entendía su relación, era como si se soportaran. Paul si era un idiota y lanzaba uno que otro comentario grosero y Gwen no dudaba en responderle lo que sea que él dijera.

Antes de que me diera cuenta ya era hora de la cena. Todos nos subimos en el auto. Magnus conducía y Gwen iba de copiloto. Al llegar a la casa de Emily ya estaba anocheciendo. Leah estaba sentada en las escaleras y cuando nos vio estacionar se levantó rápidamente. Tenía la teoría de que su relación con Magnus iba realmente bien, hasta el momento no la había marcado, pero como iban las cosas no dudaba que pasara pronto.

—Leah —saludo Magnus bajándose del auto.

La tomo de la cintura y beso su frente. Leah sonrió ampliamente mientras Magnus la saludaba de manera cariñosa. Sus ojos brillaban con una mezcla de felicidad, dejando claro que disfrutaba de cada momento con él. Mientras los demás bajaban del auto, Gwen y yo nos miramos y sonreímos, sintiendo una calidez al ver la conexión entre ellos.

—Hola —dijo Leah, saludándonos con un gesto de la mano mientras mantenía su brazo alrededor de Magnus.

Seth siempre mencionaba lo fría y grosera que Leah podía ser, pero desde que Magnus había aparecido, se había vuelto... más dócil, por así decirlo. Todos bajamos del auto y nos dirigimos hacia la casa de Emily, donde ya se veían luces encendidas y el aroma de una deliciosa cena flotaba en el aire. Al llegar a la puerta, Emily nos recibió con una sonrisa cálida y un abrazo para cada uno.

—¡Bienvenidos! —exclamó, abriendo la puerta de par en par—. Pasen, pasen. La cena está casi lista.

Nos adentramos en la casa, que estaba decorada de manera acogedora, con una mesa puesta de manera elegante en el comedor. Paul ya había llegado, pero estaba tirado en el sofá y en el suelo estaba Quil junto Claire. Bueno suponía que esa era Claire, era su impronta. Era algo raro, ya que era un bebe literalmente. Estaban jugando con muñecas mientras que Quil usaba una corona.

—Vaya... coronan como princesa a cualquiera en estos días —dijo Gwen mientras observaba a Quil con una botella de vino en sus manos.

—Hay que mantener la dignidad en todo momento, ¿no? —dijo él sin inmutarse y con una sonrisa mientras ajustaba su corona.

—Quil, siempre está dispuesto a complacer a Claire. Creo que debería preocuparte cuando empiece a pedirle vestidos de princesa. —comento Sam mientras bajaba por las escaleras

Nos reímos todos mientras nos acomodábamos en el salón. Paul se incorporó un poco en el sofá, saludándonos con un movimiento de cabeza. Aunque todavía parecía algo tenso, se notaba más cómodo en nuestra compañía.

—Traje vino... pero creo que son más de cerveza —comento Gwen mientras dejaba la botella de vino en la mesa.

—En realidad es el favorito de Emily —respondió Sam mientras se acercaba a Emily tomándola de la cintura.

—¿Dónde está Seth? —pregunte notando su ausencia—. ¿Y el resto?

—Seth está con el idiota de Embry —respondió Leah mientras entraba acompañada de Magnus—. Dijeron que llegarían un poco más tarde. Tienen que terminar un proyecto.