Capítulo 3: La ilusión.

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BY: Carolina Romero.

Ya eran las 4:32 de la madrugada, y yo aún daba vueltas en la cama, estaba muy ansiosa porque fueran las 6:30, quiero ver pronto a mi Diosa marina, deseaba verla, quería llevarla a muchos lugares, por lo que pude apreciar ayer en su casa, tiene varias piezas de arte, y muchos libros, creo que la invitaré al centro de la cuidad, después del desayuno. Anoche sin que se diera cuenta le pregunté a su nana Lupe lo que más le gusta comer, ya que quería sorprenderla en todos los sentidos, afortunadamente, mi Audi Q3 2021, ya lo retiré del taller, ¡y podremos ir a donde se nos plazca jajaja!

Si ya se, que soy menor de edad todavía, pero mis padres me apoyaron con sacar la licencia de conducir extranjera, por lo que no tuve inconvenientes en sacar la temporal. Mis padres confían en mí, y eso me da mucha tranquilidad.

Ya son las 5:55 de la madrugada, y ya parecía león enjaulado en mi cama, así que decidí levantarme, y me sumergí en la tina con agua tibia, sales minerales, aceites esenciales, y pétalos de rosas rojas, para poder relajarme y sentirme más cómoda. Después del baño, muy ameno, por cierto, a eso de las 6:15 me puse mi atuendo para entrenar, ya que iba a ir corriendo a la casa de mi Diosa marina, la propiedad está a menos de un kilometro de distancia.

Mi nana Greis, me observa de pies a cabeza y me dice: - vaya que te arreglaste para salir a entrenar!!!- y mi cara se torna de un color rojo como el tomate!!!- Ayyy nanita no me digas eso!!! ¡¡¡Y recuerda preparar el desayuno americano que te encargué por favor!!!- me despedí de mi nana con un tierno beso en la mejilla. -Si hijita no te preocupes, ve tranquila. Y dicho esto salí como un rayo a la casa de mi Diosa aguamarina.

Ya son las 6:45 de la mañana en punto, y toqué el timbre de la casa de Michiru, y sale su nana Lupe, y le digo: - Buenos días señora Lupe, como amaneció? - le pregunté muy tranquilamente, - yo muy bien gracias a Dios, pero mi niña anoche no durmió muy bien, se enfermó del estómago, y ahora recién, pudo conciliar el sueño, pero pasemos adentro por favor- mi cara cambió de cielo a la tierra, por mi culpa mi Michiru estaba enferma, todos mis planes de pasar el día con ella se fueron a la basura!!!.

La señora Lupe me ofreció un té de manzanilla, y me lo serví en la sala de estar, ya que ella subió al cuarto de mi bella ninfa para ver si estaba descansando. Después de un rato esperando, llamé por teléfono a mi nanita Greis, avisándole que me iba a tardar y no se preocupara por mí. - ¿Todo está bien Haruka? - Si nanita no te preocupes, estoy en la casa de al lado, cualquier cosa te llamo. - Le respondí a mi nana.

Después de media hora esperando, mi paciencia se estaba agotando, y de repente baja la señora Lupe, a lo que me dice que subamos a la habitación de Michiru, y llegamos a su dormitorio, y fue como ver la alcoba de una niña pequeña, las paredes eran de color lila tenue, tenía muchas muñecas antiguas de porcelana en un gran estante, y una pared repleta de libros, desde William Shakespeare hasta Pablo Neruda, un bello tocador con una cajita musical muy hermosa, un atril muy grande, con pequeños tarros de pintura y pinceles, también tenía un bello mueble, con hojas de partituras y un gran estuche con su violín, y por ultimo una cama King con cortinas de seda, color blanco, y en ella dormía mi bella ninfa acomodada en las colchas de plumas.

-Si gustas puedes esperar aquí, hasta que mi niña despierte- me habló despacio la señora Lupe, a lo cual asentí bajando mi cabeza.

No me atreví a acercarme a su cama porque sentí que la estaría invadiendo, me bastaba con tenerla ante mis ojos, y el sólo hecho de estar en su habitación y poder contemplarla desde este sofá me había alegrado el día, es un sueño hecho realidad para mí poder tenerla así de cerca a tan solo unos cuantos pasos, y alcanzar observar su angelical rostro dormido.

Ya habían pasado 6 horas desde que llegue a la casa de Michiru y la verdad se me fue volando la mañana, y ya se acercaba la hora de la merienda, y la señora Lupe me pregunta: - Todavía duerme? No es lo habitual en ella...- y yo le pregunto un tanto preocupada: - ¿no será mejor llamar un doctor para asegurarnos de que todo está bien? - Si tienes razón, me quedaría mucho más tranquila si la revisa un doctor - Y yo me tome la libertad de llamar a mi médico de cabecera, ya que mis padres lo tienen contratado por si sufro alguna lesión por mis rutinas de ejercicio, y siempre está a mi disposición, el Doctor Tomoe.

Y la señora Lupe me abraza como si no hubiera un mañana, agradeciendo que hay un doctor cerca para que revisara a mi Michiru.

En tan sólo 15 minutos llegó el Doctor Tomoe a la casa, en donde lo saludo de manera muy rápida y le comento que una amiga está mal salud, y lo recibimos en conjunto con la señora Lupe, ¿Y dónde está la paciente? - pregunta el Doctor Tomoe, - Arriba en la primera habitación- Responde la señora Lupe- Llegamos a la habitación de mi bella ninfa y sorpresa!!! ¡¡¡No estaba en su cama acostada!!!- La señora Lupe golpea la puerta del baño y mi ninfa le responde: - ¡¡¡Tranquila nanita!!! ¡¡¡Me quedé dormida!!! ¡¡¡Mi pobre Haruka debe estar esperándome!!! ¡¡¡ cómo no me despertaste antes!!!- Gritaba desde el baño, sin saber que ¡¡¡estábamos afuera escuchando todo!!!, principalmente, ¡¡¡YO ESTABA ESCUCHANDO TODO!!!- Mi niña, Haruka esta acá en la casa, y como te sentías mal, porque anoche no dormiste absolutamente nada, te dejamos descansar, además la señorita trajo a su doctor de cabecera para que te revise, y así nos quedamos más tranquilas...- Dicho esto Michiru salió del cuarto de baño con una bata y una toalla enrollando su hermoso cabello y ¡¡¡totalmente roja como una langosta!!!. - Disculpen la tardanza, pero es cierto que anoche no pude dormir nada, ya que no estoy acostumbrada a comer mariscos, por las noches, y a ciencia cierta estos días han sido como un torbellino de emociones. En verdad lo siento mucho.

-¡¡¡Hola Michiru, que alegría verte mejor!!! Mira te presento a mi médico de cabecera, el Doctor Tomoe, él es una eminencia, y confió plenamente en él. - Le cuento esto mucho más aliviada de verla. - No tenían para que molestarse en venir hasta acá Doctor Tomoe- dijo mi bella ninfa muy apenada- No hay ningún problema, disculpen, pero ¿me pueden dejar solo con ella, para poder examinarla? - Dijo el doctor Tomoe - De ninguna manera, yo me quedo con mi niña - Dijo la señora Lupe - Esta bien, yo esperaré afuera - Dije saliendo de la habitación.

Pasaron otros 30 minutos, y el Doctor Tomoe, me comenta que sólo sufrió una pequeña intoxicación, de mariscos, pero nada grabe además de que ha estado pasando por mucho estrés debido a la muerte de su abuela, solo debe tomar bastante agua, antibióticos, antiparasitarios y probióticos y reposo durante 7 días.

Después de una hora más tarde, la señora Lupe sale de la habitación de Michiru y me comenta que quiere verme, a lo cual, entro en la habitación de mi bella ninfa. - ¿cómo te sientes? - le pregunté - Mucho mejor, discúlpame si no pude llegar a nuestra cita, como habíamos acordado. - Tranquila son cosas que suceden, no te preocupes, yo estaré aquí en las buenas y en las malas contigo - le afirmé sinceramente - Que contrariedad ¿no lo crees? - lo dice en un tono muy triste - No importa, mi querida Michiru, si tú me lo permites, puedo venir a visitarte a diario, y cuando te sientas mejor, podemos salir a la ciudad, ¿te parece? - se lo comenté tomándola de las manos - si me parece perfecto, ¿te gustaría conocer el museo Nacional de Tokio?, es realmente hermoso - lo cuenta, con un brillo precioso en sus ojos azul agua marino - Sabes, nunca lo he visitado, me encantaría conocerlo contigo, mi querida Michiru. - Entonces tenemos una cita dentro de una semana más, mi querida Haruka - Me apretó más las manos. - Te dejo descansar mi querida Michiru, si gustas ¿mañana puedo venir a merendar contigo y la señora Lupe?, si no es mucha la molestia. - le pregunté - Para nada, tú no eres molestia, eres bienvenida cada vez que quieras venir, ya te lo dije, quiero que seamos amigas - Me afirma con esa carita de ángel. - Entonces nos vemos mañana mi querida amiga Michiru, que descanses.

Hasta mañana querida Haruka - y me retiro de la habitación de mi bella ninfa, en cierto modo ya estaba mucho más aliviada de que el Doctor Tomoe la examinara, ya que él es de toda mi confianza, y también me sentía tan contenta de poder visitarla todos los días, tengo que tomar en cuenta de que ha pasado por muchas cosas complicadas en su vida, y debo ser paciente , me ilusiona enormemente que esta hermosa relación, se esté dando de manera natural, nada se está forzando, y eso es lo que me encanta, que siga fluyendo, ya que mi paciencia es larga si solo se trata de Michiru.

Ahora si me voy a descansar, la falta de sueño me está matando, pero me quedo con la ilusión de que mañana será un hermoso día, en donde veré a mi bella ninfa más repuesta y con todo el ánimo para sacarla de esa cama y empezar a gozar de nuestra amistad y más delante de nuestra relación.

Un amor únicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora