Capítulo 26

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—Quiero poder no querer rendirme ante Fyodor.

Admitió un poco apenado, era el futuro líder de la port mafia, se supone debe de ser alguien intimidante y de sangre fría, en cambio, hoy, en una sola tarde había logrado romper ambos estándares.

—Uhm… ¿Ha usado la voz de mando en ti?

—Una vez, si no mal recuerdo, fue cuando me secuestro; trate de escapar y para evitarlo lo uso.

—¿Como se sintió?

Cuestiono, si sus memorias están en lo cierto el efecto que tuvo aquella orden en Dazai ese día eran la mitad de dolorosas que serían ahora que tiene la marca.

Según había leído ningún omega podía desobedecer la voz de mando de su alfa y que si se resistía a obedecer sería doloroso para el omega.

—Aterrador. No quiero imaginar como se sentira ahora que estoy marcado.

Admitió mientras abrazaba sus piernas. Aún permanecían sentados en la misma banca, se sentía patético, al final su estado actual era consecuencia de sus desicion es presipitadas.

Suspiro cansado ocultando su rostro entre sus rodillas y brazos cruzados, se sentía mal. Ahora no sólo era el hecho de sus malas decisiones, era el hecho de que apesar de que tenía personas dispuesto a ayudarlo no podía aceptar tanta amabilidad, que incluso en esa situación tan abrumadora, le resultaba aterradora.

Gimió lastimeramente recordando su mala actitud y como sus desicion es ahora lastimaba a más que a él mismo.

—¿Sabes que apesar de que me ayudes ahora al final terminaras matandome?

Recordó haciendo que Chuuya hiciera una expresión dolorosa al recordar. Si, lo sabia, aún apesar de los meses que habían pasado desde ese día no podía evitar mirar aquella arma cada noche.

—Sabes que no uso armas.

Contestó evitando completamente responder la pregunta como era esperado.

Dazai soltó una risa corta abrazándose más a sí mismo.

—Lose, por es cuando me mates asegúrate de estar lo suficientemente cerca como para no fallar.

El silencio invadió a ambos, ¿como podía Chuuya responder a eso?, ¿como podía Dazai ser tan cruel para recordarselo justo en ese momento?

—Oh…

Soltó suavemente Chuuya, estaba desilucionado, pensó que quizás ahora Dazai había cambiado de opinión.

Dazai levantó la cabeza olfateando el repentino olor a vodka que apareció en el aire, Chuuya preocupado por la expresión de Dazai preguntó.

—¿Pasa algo?

Dazai abrió a boca para responder pero fue interrumpido por la sorpresa al ver a Fyodor aparecer en su campo de visión, era claro que él también lo vio pues comenzó a correr a donde se encontraba. Rápidamente se levantó tratando de salir correndo pero la mano de Fyodor que aún no había recuperado el aire lo sujeto.

—¡Dazai!

Exclamó aliviado de finalmente encontrarlo e ignorando la presencia de Chuuya. Dazai sintió nuevamente aquel punzón en su pecho y sin dudar, guiado más por el miedo, jalo su propio brazo hacia sí mismo.

—Espera, yo… ¡realmente lo siento! No era mi intención, perdí la calma y, esto no es tu culpa. Perdón.

No había recuperado el aire cuando comenzó a hablar, habia corrido por toda la feria en busca de Dazai poco más de media hora y ahora pedía perdón, se veía arrepentido, tanto que incluso Chuuya que escuchaba todo se sorprendió, el peli naranja tenía entre sus manos la mochila de Dazai, planeaba correr tras él al verlo tan alterado en un inicio, pero ahora, lucía curiosamente más calmado.

—Yo-

Fue interrumpido por algo que ninguno espero y que sin duda los tomo por sorpresa. Dazai se había movido ligeramente a la derecha y sin saberlo aquello fue lo que salvo su vida pues una bala rozo por poco su cabeza, siendo su oreja la única afectada al la bala haberlo rozarlo.

Chuuya maldijo su descuido y se apresuró a tomar a Dazai en brazos mientras llevaba la mochila del menor en sus hombros, el ruido del disparo había logrado alterar a los visitantes de la feria comenzando así un caos donde todos buscaban su seguridad.

No pensó mucho y comenzó a correr tras asegurarse de que Fyodor lo seguía, no era que le importase pero si él moría, Dazai también lo haría.

Al inicio había notado a un grupo de personas que seguía a Dazai pero lo tomó como una casualidad cuando el grupo comenzó a dirigirse a distintos juegos a los de Dazai y Fyodor. Suspiro aliviado al sentir como Dazai apretaba su camiseta con su puño, podía jurar que temblaba.

Todos corrían por su seguridad y Chuuya junto a Fyodor aprovecharon a mesclarse entre la gente cuando otro disparo dirigido a Dazai fue esquivado por la agilidad de Chuuya.

—Debemos entrar a un lugar seguro, si estamos afuera será más fácil que disparen.

Fyodor asintio y ambos mientras corrían comenzaron a buscar un lugar seguro, Dazai aún en brazos de su compañero señaló una librería cercana por lo que ambos alfas corrieron a resguardarse. Ya en la tienda se apresuraron a bloquear en paso con ayuda de Dazai y algunos clientes que tras oir la explicación aceptaron ayudar.

Dazai suspiro al ver la puerta ya bloqueada y siguió a Chuuya tras unos estantes junto a Fyodor que aun no decía nada.

—¿Tu oreja-?

—Estoy bien… solo… me tomaron desprevenido.

Dijo tratando de permanecer lejos de Fyodor, pero parecía que el mayor no tenía los mismos planes pues lejos de alejarse se lanzó a abrazarlo preocupado.

—Joder. Eso estuvo cerca. Pensé que te perdería.

Fue apretado con demasiado fuerza, tanto que incluso podría decir no podía respirar, pero pronto el abrazo fue menos doloroso. Fyodor suspiro aliviado al ver a Dazai bien, si no se hubiera movido podría ahora él estar muerto, si no llegaba a encontrarlo podria no saber lo que pasó; la herida en su oreja ya no sangraba. Dazai se sorprendió en un inicio y quizo alejar al alfa pero noto como el pinchazo en su pecho comenzaba a ser menos molesto y se detuvo.

Chuuya miró en silencio como el mayor abrazaba con tanta desesperación a su compañero. Cierto, él es su alfa.

Suspiro y se alejo dándole espacio a la pareja, debía llamar a sus agentes para que los recogieran, además, debía mandar a investigar lo sucedido y encontrar al culpable.

𝗈𝗆𝖾𝗀𝖺 𝖺𝗅 𝗆𝖺𝗇𝖽𝗈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora