Capítulo 7

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POV. JENNIE

Me fui de aquí cuando tenía 11. Como lo había previsto mi padre no cambió sus actitudes, nunca estuvo conmigo, de hecho cuando llegamos a Seúl se alejó aún más, se quedó una semana conmigo, me inscribió en un instituto y arregló los detalles técnicos de mi estancia en mi país de origen y por primera vez hizo algo bien como padre, se fue y me dejó al cuidado de una mujer maravillosa, Sohee, mi dulce Nana, que después de años de convivencia se convirtió en mi mamá aún me cuida como a una niña pequeña y nunca se ha separado de mí. Después de la primer semana en Seúl papá se fue alegando que recibió una oferta de trabajo en el extranjero; la convivencia que el prometió tendríamos cuando llegáramos a Corea solo se dio en Navidad y mi cumpleaños.

Siempre quise volver; pero mi padre se negó a dejarme viajar; cuando llegó el momento de entrar a la universidad y supliqué estudiar en el extranjero mi padre se negó y fui demasiado cobarde como para enfrentarlo y decirle que era adulta y haría lo que me viniera en gana; resulta que me aterraba perder a la única persona que tenía en el mundo.

Y Lili;  nunca pude contactarla ; mi padre me prohibió tener cualquier contacto que me relacionara a Los Ángeles, era como si quisiera borrar mi pasado en la única ciudad que amé, no me dejaba usar ningún aparato electrónico sin supervisión todo para que no pudiera llamar a los Manobal o Lisa; cuando fui mayor busqué a Lalisa Manobal, llamé a su teléfono pero su número ya no existía, busqué sus redes sociales y las de su familia pero ellos no existen en internet, tal vez porque son multimillonarios de bajo perfil; lo único que encontré fue que Marco Manobal es dueño de una empresa de seguridad, llamé a la casa Manobal, pero quien vive ahí ahora son los Miller; y luego simplemente dejé de buscarla, dejé de extrañarla todos los días, dejé de pensarla todos los días, crecí y aprendí que podía vivir sin ella, me di cuenta que a diferencia de ella yo si tengo redes sociales, y que nunca cambié el número del teléfono que papá me dio para supuestamente  comunicarme con mis amigos en LA; nunca recibí un mensaje suyo, nunca me buscó. Los primeros meses en Seúl fueron terribles, no hablaba muy bien el idioma y no tenía amigos, si antes me sentía sola fue ahí cuando conocí la verdadera soledad.

Entonces de repente llegó Jisoo, quién se convirtió en mi primer mejor amiga de verdad; es la única aparte de mi mamá que sabe toda mi historia.

Hoy tengo 26 y por fin he vuelto a LA, mentiría si dijera que no deseo encontrarme con Lisa en la calle, lo deseo, deseo preguntarle porque rompió su promesa y nunca me buscó.
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—Muy bien Jen, está todo desempacado, ¡Tu nuevo departamento está listo! Mañana podrás ir a cambiar pañales y sabrás que gracias a la ayuda de tu genial mejor amiga después de un agotador día siendo niñera no tendrás que desempacar nada.

Reí ligeramente y le dije
—Gracias Chu, pero te he dicho que no cambio pañales y no soy niñera; soy maestra y amo mi trabajo.

—Amas salir temprano, tener vacaciones y tener contacto solo con niños pequeños; dime Kim acaso has tenido sexo alguna vez, porque a veces dudo que lo hayas hecho.

—!Jisoo! Basta, sabes que sí lo he hecho, no recuerdas a Anne—Dije con una mezcla de vergüenza e indignación.

—Si, la recuerdo; era sexy, lastima que fue a Sydney para hacerse cargo de la empresa de su padre, quien sabe tal vez ahora ustedes se estarían casando.

—Sabes que no nos hubiéramos casado, por algo ella decidió ir a Sydney y yo decidí volver a Los Ángeles. Ahora déjame dormir, porque mañana me espera un gran día.
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Hoy es mi primer día en este preescolar, estoy emocioanada de conocer a todos mis alumnos y alumnas; siempre me han gustado los niños, son honestos, sin prejuicios, dispuestos a aprender, se ríen sin inhibición, son espontáneos y regresan el amor que les das multiplicado por dos; creo que por eso me gusta ser maestra, porque cuando veo sus ojitos llenarse de brillo cuando me ven y vienen corriendo hacia mi para abrazarme y decirme que mis mejillas son como mandus no pienso en otra cosa que no sea que mientras sea maestra siempre habrá alguien que desee verme.
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—Buen día niños, soy su nueva maestra. Mi nombre es Jennie Kim; pero como ustedes son especiales para mí pueden llamarme Maestra Nini—Dije con una gran sonrisa

—Buenos días maestra Nini— Respondieron al unísono

—Ahora, sé que es su primer día aquí, les contaré un secreto... También es mi primer día aquí—Dije susurrando lo último—Me gustaría que todos pudiéramos ser amigos, pero para eso necesitamos conocernos, así que nos sentaremos en el suelo y formaremos um círculo, después diremos nuestro nombre, animal y fruta preferidos; ¿les parece bien?

—Sí maestra Nini—Contestaron todos

—Mi nombre es Lía, me gustan los perritos y las ciruelas—Dijo una niña castaña muy adorable, aunque todos aquí lo eran.

Así pasaron varios niños, hasta que solo quedó uno en especial; parecía tímido, jugaba con sus deditos y se negó a hablar frente a todos, cuando levantó la mirada y vi sus ojos me parecieron demasiado familiares, ojos de ciervo, color cafés con motas color miel, siento que ya
he visto esos ojos antes pero no recuerdo donde y ese cabello negro intenso, es como si incluso ya lo hubiera acariciado.

Después de recuperarme de esa rara impresión, seguí mostrando a mis alumnos más actividades de integración grupal;  el día pasó rápidamente y pronto la hora de la salida llegó.

Cuando estaba por cruzar la puerta de salida vi a un pequeño niño de pie, esperando a alguien, lo cual me parece raro porque hace más de 10 minutos que fue la hora de salida.

Cuando estaba justo detrás del niño, él volteó y me di cuenta de que era el pequeño tímido de mi clase.

—Hola, quieres sentarte aquí conmigo—Dije con una sonrisa y palmeando a mi lado en un escalón de la entrada del preescolar.

Él dudó, pero al final se sentó junto a mí en silencio, por un par de minutos ninguno de los dos dijo nada, hasta que decidí romper el hielo.

—Entonces, no te presentaste en clase, tú sabes mi nombre pero yo no el tuyo es un poco injusto, ¿no crees?—Dije en un tono juguetón

Pero el no respondió, solo miraba al frente, cuando gire mi cabeza y dejé de verlo el respondió.

—Soy Luca, me gustan los gatitos y las fresas—Dijo en voz baja y todavía mirando al frente.

—También me gustan los gatitos, pero prefiero los perritos, de hecho tengo dos y mi fruta favorita son las fresas—Dije girando mi cabeza hacia el, esperando que voltera hacia mi y para mi sorpresa, lo hizo.

—Creí que le gustarían más los gatitos, tus ojos son de gatito, me gustan—Dijo muy sonrojado y jugando con sus manos en su regazo.

—Entonces no eras tan tímido pequeño Luca—Dije riendo ligeramente

Y él también rió nerviosamente.

—Entonces, ¿ a quién esperamos?

—A mi mamá Rosie, su nombre es Roseanne Park.

—Bueno...

Iba a hablar de nuevo, pero en eso vi a una hermosa mujer acercarse a nosotros; era rubia, alta, facciones delicadas y en extremo elegante, vestía un traje negro que se ajustaba perfectamente a su delicada figura.

Supuse que era la madre de Luca, y en efecto lo era. Así que después de presentarnos me dispuse a explicarle que no podía seguir llevando y recogiendo tan tarde a Luca y algunas reglas del instituto.

—No se preocupe Señorita Kim, no volveremos a llegar tarde y le comentaré a mi esposa que la próxima vez que venga a dejar a Luca tiene que firmar la entrada de nuestro hijo. ¿Sería todo?—Preguntó cortante

—Si, so...

—Bueno, entonces si me disculpa, me tengo que ir. Luca sube al auto.

—Muy bien, que...

No pude terminar la frase porque la Señora Park ya había subido a su lujoso coche.

Que mujer tan grosera, lo que tiene de guapa lo tiene de mal educada, ni siquiera pudo corresponder la sonrisa que le di al principio.

Ahora solo me falta conocer a la otra madre de Luca, espero que sea un poco más fea y un poco menos grosera que  Roseanne.
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Voten por favor, gracias por leer y a quienes han votado, muchas gracias!!

IMPORTANTE: Lisa y Rosé en la historia tendrían 30 años, ya que en la historia son mayores que Jennie con cuatro años.

Lo que es para siempre - Chaelisa/Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora