Protege A Zoe (+18)

XLIV

Altagracia

Los veo regresar en sus caballos y no voy a negar que se me antojó, hace mucho no monto a caballo.

-Ya es tarde, vámonos ya

-Mamá, un día más por favor

-No podemos amor, mañana debes ir a clases, no puedes faltar- la abrazo

-¿Cuando volvemos?, ¿Ese es mío verdad?

-¿Quieres ese chiquito?- beso su cabeza- volveremos cuando mi pierna ya esté bien para que la competencia sea pareja

-Sí, ustedes eran dos, por eso me ganaron

-Te ganamos porque tu caballo iba muy lento

Las veo alejarse hacia la casa y me acerco a Jose Luis.

-¿Estás bien?

-De hecho estoy muy bien- la abrazo- ¿recuerdas la invitación que nos hizo Eduardo?

-Sí, a una reunión de política, no fuimos

-Pues me habló esta mañana, quiere que aceptemos una cena en su casa y además me propuso ser su mano derecha y representante, no se me hace raro, muchas veces los hijos de candidatos o hermanos también se involucran pero no lo sé, yo no sé mucho de política y tampoco me interesa convivir con él, hay cosas del pasado que no quiero remover

-No quiero que te involucres en eso, sí, ve a cena, acércate como te dije, pero no te involucres en sus asuntos políticos, eso no me gusta nada porque está muy empecinado con la idea, puedes salir involucrado en cualquier asunto raro

-No te preocupes, manejare todo con precaución, pero en realidad la invitación a cenar es para ambos

-Ok, haré lo posible. Mañana regresas a trabajar ¿ok?

-Mi amor no..

-Sí- lo corto- ya estoy mucho mejor, yo trabajaré desde casa para no andar cojeando por ahí pero tú ve a la empresa, ya se me hace que le agarraste pereza

-Para qué te lo niego, estoy cansado- digo dramático

-Ay, de qué- pongo mis ojos en blanco- todo sería más fácil si trabajaramos juntos

-Aún no superas eso

-No, no puedo, pero reconozco que fue una buena decisión- arreglo su camisa- ¿por qué me miras así?

-Que pinche guapa estás

Sonrío correspondiendo a su beso.

León Contreras

-Ya entregué todas las pruebas que demuestran que estuve internado, pasé por episodios de delirios, alucinaciones, etc, debido a la ingesta desmedida de medicamentos y situaciones que estaba pasando en ese momento

-Estas no son pruebas suficientes para saldar tu deuda con la justicia León, secuestraste a una niña

-Yo no la secuestre, esa niña es mi hija y su madre no me dejaba verla, solo la tuve conmigo un momento y se la devolví

-Pues la ley dice lo contrario, nada demuestra que se haya tratado de tu hija, tendrás que convencer a el juez de todo lo que dices

-A ver, yo pagué la fianza, he estado toda esta semana entregando pruebas de que sí, no estuve en la cárcel, pero si estuve encerrado en un pinche lugar donde me trataron como a un loco, para poder regresar y pelear por la custodia de mi hija, haré lo que sea necesario para que eso suceda así que ayúdame

-Hablando de tu supuesta hija, aquí te traje lo que me pediste

Saca las fotos del portafolio y sonrío al verla, es hermosa, sus ojos verdes, su cabello negro y largo, parece una muñequita. Paso una a una, esperé tanto esto.