˗ˏˋ ★ 𝟯𝟮 - 𝗺𝗶 𝗯𝘂𝗲𝗻𝗼𝘀 𝗮𝗶𝗿𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲𝗿𝗶𝗱𝗼 ★ ˎˊ˗

190 27 28
                                    

¿Por qué teníamos que volver? — le pregunté a Mateo mientras caminábamos desganados para salir del aeropuerto de Ezeiza. Extrañaba el ambiente de Buenos Aires, pero también la tranquilidad que habíamos encontrado en Italia y de la cual habíamos disfrutado por dos semanas.

— Falta poco para el lanzamiento de 'Solo por vos, linda' — respondió él, agarrando mi mano. Me di cuenta de que estaba un poco tenso, pero no le di importancia.

— ¿Estás nervioso? — indague ,mirándolo de reojo. Negó con la cabeza, arrugando levemente la nariz.

—La que tendría que estarlo serías vos, porque la gente va a empezar a sacar teorías

No entendí a qué se refería por estar metida en mis pensamientos pero no quise presionarlo para que me explicara.

En el auto, el ojimarron mencionó que tenía una reunión con su equipo para discutir la estrategia para el lanzamiento del nuevo tema. Me sentí un poco abrumada por la cantidad de trabajo que nos esperaba.

De repente, soltó mi mano y comenzó a revisar sus mensajes en el teléfono. Me sentí algo confundida y herida por el gesto. ¿Será que estaba recibiendo mensajes de fans o algo más?

Cuando llegamos a la casa del rapero, me dirigí a la habitación para descansar un rato. Pero no podía dejar de pensar en la conversación que habíamos tenido y me sentía un poco insegura sobre todo lo que podía suceder.

Entrada la noche, empecé a notar que Mateo estaba distante y preocupado. No sabía qué lo afligía, pero sentía que estaba relacionado con la canción y la relación con Matías.

Decidí acercarme a él y preguntarle qué pasaba. Estaba sentado en el sillón, mirando fijamente la pared.

—¿Qué pasa, matu? —le pregunté, sentándome a su lado.

No respondió de inmediato. Se levantó y se dirigió a la ventana, mirando hacia afuera.

— Es solo que... no sé si estoy haciendo lo correcto —dijo finalmente, sin mirarme.

—¿A qué te referís? — le consulté , sintiendo una creciente inquietud.

Se volvió hacia mí, con una mirada intensa.

—A nosotros, a la canción, a todo esto — exclamó, moviendo la mano en un gesto amplio, notablemente nervioso.

Me sentí un poco confundida. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué estaba tan inseguro de repente?

¿Qué pasa con nosotros? — dude, tratando de mantener la calma.

Mateo suspiró y se pasó la mano por los rulos.

— No sé si puedo protegerte de lo que va a venir — susurró, mirándome con una expresión de duda — de la prensa, de los fans, de las críticas... de todo lo que viene con mi fama — se encogió de hombros — que es justamente todo lo que te asusta

Me prometiste que me ibas a proteger — recordé subiendo las piernas al sillón y apoyando las rodillas a la altura de mi pecho — dijiste que ibas a ser mi soldado

¿Crees que puedo hacerlo?

Lo has hecho hasta ahora

Lo se, pero es lo mismo protegerte del enfermo de Matías que de la gente, hadita, yo pensé que podía hacerlo pero... ahora... — suspiró frustrado — me da miedo no poder cuidarte lo suficiente

Con que intentes hacerlo esta bien, soy consciente de qué hay cosas que no están bajo tu control

Se acercó a mi lentamente para que lo abrazara. Entendía su presión, y el miedo que tenía de que algo me pasara, pero tampoco podía presionarlo. El estaba dando lo mejor de sí para cuidarme.

El sonido de la alerta de mi calendario menstrual hizo que nos separáramos. Mateo besó mi frente y en silencio se dirigió a la habitación.

•──•─•──•✦•──•─•──•

pobre Mateo

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 01 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝐈𝐍𝐅𝐈𝐄𝐋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora