Capitulo 32

646 29 1
                                    

- Esas cursilerias no van conmigo Harry - dijo Jorge poniendose de pie.
- Luego no digas que no te lo dije - Jorge bufó.
- Por favor Harry, solo tenemos 17 años - dijo Liam- eso del "amor" es solo basura.
- Ire a ver a mi hermana - dijo Jorge cojiendo sus llaves para salir de la casa

¿Enamorarla? el no era el tipo de chico cursi que le regalaba rosas y esas cosas, nunca lo habia hecho ¿Por qué ahora? Estaba seguro que el final de todo Martina volvería con el.
¿Tan seguro se sentia? yo no apostaria por ello.

***
Martina estaba metida en su cama, cubierta totalmente con toda la sábana, lloraba bajo de ella.
Ya habia llegado la tarde y todo lo veia asqueroso.
Vomitó un par de veces y no tenia hambre, la cabeza le reventaba y el cuerpo le dolia, sobretodo el vientre.
¡Maldito Jorge! ¡te odio! - se repetia mentalmente.
Solo puedes llegar a odiar a alguien que una vez amaste, y solo puedes llegar a amar a alguien que una vez odiaste.

Toc-Toc, era su Madre.
Martina secó sus lágrimas bajo de las sabanas.

-¿Cómo te sientes? Te traje algo de sopa de pollo, linda - dijo su madre dejando la fuente en su escritorio.
- Mejor - dijo Martina aún metida bajo sus sabanas.

Su madre se sentó a su lado, lo sufientemente cerca para acariciarle la espalda.
- No vas a contarme nada ¿verdad?.
Martina se sintió culpable, así que salió de sus lágrimas y de sus sábanas y se incorporó sentada en su cama.
Tenía la nariz roja y los ojos hinchados. Tragó saliba.
- Creo que... estuve ebria - dijo Martina - no lo se, no lo recuerdo.
- Pero hija... a tu edad es normal que tengas tu primera borrachera - dijo su madre - no estoy molesta si es lo que te preocupa. Nena, solo no quiero que sea un hábito en ti.

Los ojos de Martina se agüaron nuevamente. Que comprensiva era su madre, pero no era capaz de decirle que se habia acostado con Jorge como una zorra más.
Ella asintió.
- De acuerdo - dijo Sabanna - Hanna esta aquí así que le dire que entre ¿sí?- Martina asintió callada. Necesitaba hablar con su mejor amiga. Su madre besó su frente - ya deja de llorar, mañana es su viaje a Miami, deberías estar feliz - Martina esbosó media sonrisa.
- Lo estoy.
Su madre le sonrió y salió de la habitacion, a los 2 minutos llegó Hanna.
Martina la miró y luego agacóo la cabeza. Hanna supo al instante que pasaba.

- ¿Cómo estas?- dijo acercandose a ella para sentarse en su cama - ayer te fuiste.
- No me fui.
- ¿Entonces? - frunció el ceño - pensé que si.. como te fuiste con Conor en la fiesta de Derek pensé que en esta habias hecho lo mismo.
- No vi a Conor en toda la noche, Hanna.
- ¿Te sientes bien? Martina estas pálida - preguntó preocupada.
- Si.
- Hey - dijo Hanna mirándola a los ojos - ¿En donde estabas?
- Hanna...
- Martina - la miró con dulzura - puedes confiar en mi. ¿En donde estabas?

¡ Joder! no podia mentirle tenia que ser sincera aunque sea con Hanna, que era su mejor amiga.
Tragó saliba.
- No recuerdo nada. Solo se que desperté en una habitación con... con Jorge.
La mandíbula de Hanna callí hasta el suelo.
- ¿¡Qué!? - chilló.
- Shh.
- ¿Te acostaste con Jorge? - dijo con el ceño fruncido Martina no quiso responder.
- Soy una ****... pero es que no recuerdo nada Hanna - dijo sollozando en los brazos de su amiga - que imbécil he sido
- El imbécil es el. ¿Cómo es capáz? Yo no te vi beber en toda la noche.
- No recuerdo nada Hanna, NADA.
- Ya, tranquila - dijo Hanna - ya pasó, tranquila. No llores, tu no tienes la culpa de nada.
***
- ¡Jorge! - dijo Wali corriendo a sus brazos.
- ¡Ven aquí nena! - la cargó y le dio un par de vueltas - ¿Cómo está la niña más hermosa del mundo?- dijo sonriente.
Las empleadas recibieron a Jorge en el salón.
¿Olvidé mensionar que la familia de Jorge es adinerada? Pues lo es, por eso el gran departamento, y el gran auto y su colección de motos.
- ¿Está mi madre? - pregunto Jorge a la servidumbre.
- Los señores salieron al teatro con unos amigos.
- ¡Que coño! ¿dejaron a Waliyah sola?- dijo indignado.
- La niña esta con sus nanas - dijo la sirvienta - ¿Se le ofrece algo joven Blanco?
- No, gracias- dijo Jorge, la muchacha se retiró.
- ¿Viniste con Martina? Ordené mis muñecas para que juguemos.
Jorge la miró frustrado y decepcionado.
- No cariño - respondió - ella tuvo que salir con su madre - mintió.
- Oh - dijo triste - espero conocerla pronto - Jorge suspiro cansado.
- ¿Quieres qué me quede contigo esta noche?
- ¡Si! ¡si!- dijo abrazando a su hermano - porfavor quedate- Jorge sonrió.
- Jugaremos toda la noche - dijo subiendo las escaleras de su mansión hacia la habitación de Waliyah.

***
Martina y Hanna se encontraban empacando. Mañana viajarian a Miami.

- Debes usar estos shorts cuando veas a Diego - dijo Hanna, Martina sonrió.
- Me siento tan feliz, lo veré en solo horas - dijo Martina emocionada - no puedo esperar.
- ¡Estas enamorada! oh por Dios.
- Completamente - dijo dejandose caer en su cama mirando el techo.

Ambas rieron e hicieron maletas, la luna llegó y calleron rendidas.
Mañana sería un día largo.

***
Amaneció.
Tricia entró a la habitación de Waliyah y vio a Jorge junto a ella durmiendo. Esboz una sonrisa llena de brillo al ver a sus hijos juntos durmiendo.
Todos los juguetes estaban regados, seguro jugaron toda la noche. A que magicos lugares habran viajado esa noche.
Caminó un solo paso para abrigarlos con el edredon de ositos, pero Jorge despertó.
- Jorge - dijo Tricia sonriente.
- Hola mama - dijo sobando sus ojos - ¿qué hora es? - miro su reloj.
- No sabia que vendrias.
- Vine aver a Wali - djo frío - pero ya es tarde debo ir a empacar, mi vuelo a Miami sale en tres horas.- Tricia asintió.
- ¿Quieres desayunar antes de irte?
- No - dijo poniendose de pie, se colocó la chaqueta.
- Hijo...
- Luego nos vemos mama
- No puedes seguir enfadado con nosotros, somo tu familia.
- Me importa una mierda "mi familia" - dijo bajo, luego beso la frente de Wali - adios.

Jorge salió de la habitación, dejando a su madre herida. ¿Hasta cuando tanto rencor? ¿Cuándo terminaría de perdonarlos por arruinar su infancia con sus estupidas peleas?Se sentia culpable.
***

- ¡ DESPIERTA HANNA! - gritó Martina saltando sobre la cama - ¡ Ya, despierta !
- Hmm ¿qué?- dijo adormilada - uhm... no Martina, temprano.
- ¡Hoy nos vamos a Miami! - dijo emocionada, luego bajo de la cama y encendió el stereo a todo volumen
- ¡No! ¡apaga esa cosa! - dijo hundiendo su cabeza en la almohada.
- ¡Despierta Hanna! Hoy veré a Diego - dijo sonriente. Demasiada felicidad no cabia en su pequeño cuerpo.

La música resonó, Martina fue hacia su armario.

- ¡Apaga eso ! - dijo Hanna.

Martina comenzó a cantar más fuerte.
- ¡¿Do you remember all the city lights on the water?! You saw me started to believe for the first time ..

Hanna le lanzó una almohada.

Un novio obsesivo y agresivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora