041

355 45 5
                                    

Una queja salió de los labios de Seok-Kyung mientras se movía debajo de las sabanas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una queja salió de los labios de Seok-Kyung mientras se movía debajo de las sabanas. La brillante luz del sol pasando por la delgada tela de color blanco. Las manos de la chica tomaron los bordes de la sabana alejándose de su rostro de golpe, su mirada encontrándose con el techo de su habitación y un hermoso dolor de cabeza acompañándola.

—Joder.— Susurró, las palmas de sus manos estampandose con su rostro antes de alejar la sábana de una patada de su cuerpo.

Tras soltar un gruñido de molestia alejó sus manos de su rostro para llevar su mirada al reloj en la mesita a la par de su cama. Una segunda maldición saliendo de sus labios al ver que apenas eran las siete de la mañana.

Deseaba con toda su alma regresar a dormir pero sabía que era inútil siquiera intentarlo. Su cuerpo estaba tan acostumbrado a despertar a esta hora a diario gracias a su trabajo que le era imposible dormir hasta tarde. Y por eso mismo se miro obligada a salir de la cama.

Con toda la pereza del mundo se puso de pie, sus pies descalzos tocando el frío piso, dejando descartadas las pantuflas extrañamente bien acomodadas a la orilla de su cama. Alejó su cabello de su rostro antes de ir hacia el baño.

Aun adormilada se detuvo frente al lavabo, tomando su cepillo de dientes y aplicando la pasta con torpeza. Su mirada fue hacia el espejo en el instante que comenzó a cepillarse los dientes, escaneando su apariencia mientras intentaba recordar la noche anterior.

Pues luego de haber salido de trabajar pasado las diez recibió una llamada de SungHoon donde decidió ir a beber con él. Y al ver su apariencia esta mañana le fue claro que no fue una muy buena decisión. No solían beber tanto, pero tras un par de tragos SungHoon confesó que planeaba perdonar a HyeRi y regresar con ella. Y aquello bastó para que Seok-Kyung comenzara a intentar hacerlo entrar en razón, cosa que causo que no pusiera atención a cuantos tragos llevaba y de la nada ya era demasiado tarde para siquiera fuera consciente de que estaban demasiados ebrios.

Enjuagó su boca antes de dejar el cepillo en su lugar. Para luego ir a abrir la regadera. Pero en el instante en que escuchó el sonido del agua golpear el piso el resto de las imágenes de lo que paso despues de beber comenzaron a inundar su mente.

—Mierda.— Soltó en sus susurro. —Mierda, mierda, mierda.— Sus manos fueron hasta su cabeza, sus ojos bien abiertos, maldiciendo en su mente con cada cosa que recordaba.

Los recuerdos de la llamada que hizo a JiPyeong cuando ya se encontraba bastante ebria. Cuando llego y la cargo todo el camino hasta su auto. Como ella se negó a que la ayudara y terminó tropezando todo el camino hasta su puerta. Pero eso no fue todo.

La imagen de JiPyeong arrodillado frente a ella deshaciéndose de sus tacones. JiPyeong mirándola y ella pasando su mano por su cabello hasta detenerla sobre su mejilla. JiPyeong estaba por decir algo cuando se detuvo a ella misma.

—Seguro fue un sueño.— Murmuró con una pequeña risa nerviosa escapando de sus labios.

La imagen de JiPyeong frente a ella se repitió y al instante entro sin pensarlo debajo de la regadera soltando un quejido en el instante que el agua fría chocó contra su piel.

I Fell In Love In Spring | Han Ji PyeongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora