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༻ ★ ༺ This Love ༻ ★ ༺
"Lady Eloise Crane"
Anthony y Jane habían conseguido una licencia especial para la pareja, todos los Bridgerton habían acudido, menos Francesca, las dos tías de Jane estaban, Sophia y Mary, los dos tíos Edward y William.
Mientras Jane observaba a Adelaide jugar con Amanda Crane, Benedict buscaba la mínima excusa para no darle la carta de la reina viuda de Würtemberg, Charlotte, a Jane, tenía miedo que su felicidad se vaya rápidamente.
Mientras Oliver sacaba a bailar a la princesa Sophia hacía reír cada vez más a los presentes y Sir Phillip en vez de estar avergonzado estaba orgulloso de su hijo.
En la noche, cuando todos se despedían de los recién casados para que disfruten su noche de bodas, Jane derramaba unas cuantas lágrimas al ver a su amiga encontrar al hombre perfecto para ella, el cual seria el que siempre estaría con su amiga, hasta el final de sus días.
Cuando la princesa y su familia se encontraban en el carruaje en camino a mi casa, Benedict dejó en las manos de Jane una carta.
"Reino de Würtemberg, Alemania.
Reina Charlotte De Würtemberg.
Princesa Jane de Gales"
La letra de su tía la desespero, parecía una carta seria, una noticia extraña.
Cuando llegaron finalmente a mi casa, Jane corrió a su despacho y se encerró en el, abrió lentamente la carta, la cual se deslizaba poco a poco por sus dedos, le daba terror leer esa carta.
Jane tomó fuerzas y empezó a leer la carta.
"Mi querida Jane:
Jane, lamento informarte que mi esposo, el Rey Friederich ha fallecido, no logré darle un heredero al Reino, lo que me hace una Reina Viuda, una Viuda incapaz de volver a su país, mi hijastro William tomará el trono, posiblemente sea exiliada, dudo mucho volver a Londres este año, espero que Adelaide y Elizabeth estén bien, dile a Benedict que se cuide bastante y tu, sabes perfectamente qué hacer, siempre lo suspiste.
Charlotte."
Jane lo sabía, sabía que pasaría algo, su tío estaba muerto y su tía no creía volver a Londres por un gran tiempo, Jane dejó la carta en su escritorio y salió del despacho, subió las escaleras y se dirigió en camino a su habitación, ahí la esperaba Benedict con los abrazos abiertos, listo para recibir el abrazo de su esposa.
