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MIKO
|VENEZOLANA LOCA|

Podía escuchar unos gritos que venían de la cocina, y por curiosidad decidí bajar las escaleras para ver qué estaba pasando. No me sorprendió mucho encontrarme a Rina y su amigo Josh peleando, como siempre, aunque esta vez parecían estar discutiendo por... ¿un pastel?

—¡Pero, chamo, así no es como se hace!—gritaba Rina, con las manos llenas de harina, mientras trataba de arrebatarle la batidora a Josh.

—¡Tú siempre crees que lo sabes todo, Rina!—le respondió Josh, empujando el bol hacia su lado—. Mira, Mari me dijo que siguiera esta receta.

—¡Claro que no!—bufó Rina, rodando los ojos mientras intentaba darle una palmadita en la mano—. Yo sé cómo hacer bien un pastel, tú lo estás haciendo mal, Josh.

Desde el umbral, me reí en silencio, viendo cómo el desastre se desarrollaba. A pesar del caos, había algo entretenido en verlos pelear como niños. Decidí hacerme notar y entré en la cocina.

—Acho, ¿qué rayos están haciendo?—pregunté, cruzándome de brazos, divertida—. ¿Van a pelear en vivo por un pastel?

Rina y Josh giraron a mirarme, ambos cubiertos de harina, como si de verdad estuvieran a punto de lanzarse cucharones de masa el uno al otro.

—¡Miko! Dile a este carajo que no tiene ni idea de cómo se hace un pastel decente—dijo Rina, exasperada, mientras señalaba el desastre que Josh tenía entre manos.

Josh levantó las manos en defensa, todavía sujetando el batidor—. No te metas, nena. Mari' me dio la receta, y yo sigo instrucciones. Yo no invento como esta venezolana loca.

Me reí otra vez, esta vez más fuerte, mientras me acercaba a la isla de la cocina—. ¿Están en vivo? Porque esto parece más un show de comedia que una clase de cocina.

Rina asintió con la cabeza, aún molesta—. Sí, estamos en vivo, pero este bicho está haciendo que quede como un chiste. Ya vas a ver los comentarios.

Josh sonrió y lanzó un guiño hacia la cámara—. A la gente le encanta verme, mami, ¿qué te digo?

Me acerqué para ver la pantalla del live y, efectivamente, los comentarios estaban explotando de risas y emojis.

—Okay, ¿y qué es lo que están haciendo en realidad?—pregunté, arqueando una ceja—. Porque, sinceramente, esto parece más una pelea de harina.

Rina dejó la batidora y suspiró—. Estamos haciendo un pastel, Vicky. Pero con Josh aquí... Bueno, ya ves cómo va la cosa.

—¡Oye, yo sé lo que hago!—protestó Josh, cruzando los brazos—. No es mi culpa que Rina quiera hacerlo todo a su manera.

—Porque mi manera es la correcta, weón—responde ella, lanzándole una mirada de desafío.

—Nah, lo que pasa es que 'tás celosa porque sabes que soy mejor cocinero que tú—dijo Josh, inflando el pecho con orgullo.

—¡Anda a bañarte!—le replicó Rina, lanzándole un poco más de harina en broma.

Sonreí y me uní a la diversión, acercándome para robar un poco de masa cruda y llevármela a la boca. Sabía perfectamente que la tensión entre ellos era más show que pelea real, y me encantaba verlos actuar como si el mundo dependiera de ese pastel.

—De verdad, se ven ridículos—dije, lamiendo mis dedos—. Pero creo que la gente está disfrutando la pelea.

—Eso es lo que importa, baby—respondió Josh con una sonrisa mientras le daba una palmadita amistosa a Rina en el hombro—. Al final, es todo por los fans, ¿verdad?

THE STORY OF US (YOUNG MIKO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora