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– Espérate un momento, déjame que me ubique. ¿Has pasado de tirarte al macizo de Enzo, a salir con un empleado que no tiene donde caerse muerto? – Rió irónicamente – Eso no te lo crees ni tu.

– Pues creételo porque es verdad. Estoy enamorada de un chico pobre.

– ¿Y que puede ofrecerte? – se enfrentó a mi – ¿Cuando te cases con el lo va a mantener tu papá?

– Se va a mantener él solito, ¿que te crees? ¿Que puedes venir aquí a decirme con quien puedo estar o no?

– Lore, vas a tener que recapacitar. No te aporta nada, no es bueno para tu futuro.

– ¡No lo conoces! Y si no te gusta, ya puedes volverte a tu casa a pasar las navidades con alguien que a ti te aporte algo, ni siquiera tienes con quien volver. – sin mas salí de allí, me fui directamente a las cuadras. Khai se quedo allí. Estaba claro que le habían dolido bastante mis palabras. Pero no podía quedarme callada.

– La Lore que conocias ya no está ‐ Khai encogió sus hombros – es completamente otra, no deberías ser tan clasista porque se va a mosquear.

– Y es claramente por tu culpa, le has hecho valorar la vida de pobre, le has presentado a esos chicos y por eso pasan estas cosas, ahora ella está muy confundida. Mira que le dije que juntarse contigo siempre fue un error. Haznos un favor a todos y desaparece, Khaiana.

Las lágrimas de la menor no tardaron en aparecer, la chica salió corriendo y se encerró en su cuarto. No salió en todo lo qje quedaba de día.

Mientras, me acerqué a los chicos en las cuadras.

– Que simpática salió tu prima – Tony comentó con una sonrisa.

– chicos lo siento mucho, yo lo avisé, me da muchísima vergüenza que os haya tratado así – acaricié la cara de Erick – ya la puse en su sitio, espero que se vaya relajando poco a poco.

– Está bastante buena, también te digo – tony opinó mirándonos – ¿y si me la tiro?

– Inténtalo, para que veas como te escupe a la cara – le sonreí.

– Pues igual cae como caíste tú, y yo hace mucho tiempo que no estoy con nadie.

– Tony, no hagas eso – Erick le contestó de forma seria, contundente

– ¿Por qué?

– Tu sabes por qué, si lo haces vas a joder muchas cosas. Y tu no quieres eso.

– No se de que me estás hablando.

– lo único que te diré, es que pienses con la cabeza, la de arriba.

– Gracias por el consejo, pero yo también tengo derecho a sentirme querido.

– ¿Que está pasando? – le pregunté mirándolos a los dos – No los había visto nunca tan serios entre ustedes. ¿Que pasa?

– Tu mismo – Erick le dió un suave manotazo – Ya tienes mi consejo.

Erick salió de allí de camino a las cuadras.

– escuchame una cosa, imbécil – me acerqué a Tony – Mi prima no es como yo, no te va a hacer ni puto caso, retírate a tiempo antes de que la dignidad te quede por los suelos. 

– ¿Quieres apostar?

– No, no quiero apostar, yo lo único que te digo es que tengas cuidadito con lo que haces, yo no puedo defenderte siempre y Erick por lo que se ve no está muy por la labor. 

– ¡Señores!  – escuché a mi padre hablar desde la puerta de casa. 

– Papá, tu sobrina ya llegó – le anuncié sin siquiera saludarlo. 

Entre dos mundos - Erick Brian Colón [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora