Only You Max.

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Max y Checo regresaron al apartamento después de una larga noche en el hospital, agotados, pero contentos de estar en casa, Victoria, estaba cuidando de Pato, mientras ellos estaban fuera.

Max Suspiro al entrar - ¡Qué noche! Estoy agotado.

Checo soltó una risita mientras se frotaba los ojos - Yo también, pero lo importante es que todo salió bien.

Victoria que trataba de que Patricio durmiera se acercó desde la sala al escucharlos entrar, Pato corrió hacia ellos, emocionado.

- Pato ha estado esperando toda la noche para verlos.

Pato se abrazó de las piernas de Checo -¡Papá, papá! No me gusta dormir solo... te estuve esperando.

Checo se sorprendió escucharlo llamarlo papá, no se esperaba que lo dijera.

Checo se agachó dándole un abrazo -Lo sé, lo sé... Pero Victoria se quedó contigo, ¿verdad? ¿Fuiste bueno?

- Fue un ángel... hasta que llegó la hora de dormir y no quiso cerrar los ojos hasta asegurarse de que ustedes iban a regresar - Explico Victoria riendo suavemente.

- Ah, nuestro pequeño... ya ves pato, solo nos fuimos un par de horas - Comento Max suspirando y riendo al ver a pato aferrado a su esposo.

Pato miró a Max con ojos grandes y un poco soñolientos -Pero no me gusta dormir solo, papá... ¿Puedo dormir con ustedes esta noche?

Cada noche les preguntaba lo mismo y checo en especial no se podía resistir a esa carita risueña y un poco pícara.

-¿Qué opinas, Max? Creo que podemos hacer una excepción por hoy - mirando a Max, checo tomó a pato en brazos con una sonrisa.

Max sonrió y revolvió el cabello de Patricio - Claro que sí, campeón puedes dormir con nosotros... pero solo por hoy.

-Bueno, misión cumplida, parece que mi turno terminó... Si necesitan algo, ya saben dónde encontrarme - dijo Victoria, recogiendo sus cosas para retirarse a su habitación.

- Gracias, Vic... No sé qué haríamos sin ti.

-En serio, nos salvaste esta noche - Max la abrazó antes de que se fuera, y besó su frente.

-¡No hay problema! Cuiden de Pato, y descansen- se despidió Victoria mientras se dirigía a su habitación.

Pato seguía aferrado a Checo, mientras Max se estiraba en el sofá, finalmente relajado.

-Tengo sueño papá.... pero no quiero dormir solo - dijo pato bostezando

- Vamos, campeón, nos vamos a la cama, dormiremos todos juntos- el mexicano caminó con pato en brazos llevándolo a la cama.

Max se levantó del sofá y los siguió hacia el dormitorio, observaba como Pato se iba quedando dormido sobre el hombro de Sergio, sonrió al verlo mientras su esposo lo llevaba a la cama.

Acomodó a Pato en la cama, justo en medio, donde pato solía dormir, Lo abrazó suavemente por unos minutos para que Pato pudiera quedarse dormido sin problema.

El pequeño se removió un poco, pero pronto se acurrucó más cerca de Checo, dejando salir un suave suspiro.

- ¿Así estás cómodo, campeón? - susurró Checo, acariciándole el cabello.

Pato asintió con la cabeza, ya medio dormido - Sí, papá... contigo estoy bien - dejo a pato dormido antes de ir por su ropa para dormir.

Max tomaba una ducha rápida, el agua de la regadera estaba fría, pero la necesitaba luego de la noche tan pesada, salió de la ducha, y se encontró con Sergio cepillado sus dientes, se envolvió en su bata de baño, y se acercó, lo abrazó por detrás y empezó a dejar besos en su cuello.