Capítulo 43. Solsticio de verano (1).
El Príncipe heredero siempre había sido arrogante e impulsivo, pero nunca imaginé que pudiera pronunciar tales palabras escandalosas con tanta naturalidad.
Después de decir aquello, al ver que yo permanecía en silencio apretando los labios, extendió la mano y limpió con la yema de los dedos la sangre que me corría por la sien. Luego hizo algo que me sorprendió aún más:
Me miró fijamente y lentamente se llevó a la boca el dedo manchado de sangre. Por un momento, tuve la impresión de que frente a mí no estaba el heredero de un país, sino un espíritu maligno que se alimentaba de almas humanas.
A continuación, acercó sus labios a la herida de mi frente, como si se dispusiera a beber directamente mi sangre. Me quedé paralizado por un instante, pero inmediatamente lo aparté de un empujón.
━━ Estás loco━━ no pude evitar insultarlo.
El Príncipe heredero, lejos de ofenderse por mi insulto, soltó una risita burlona, como si su humor hubiera mejorado, y dijo con calma:━━ ¿Acaso a mi hermanito le gustan los locos?
Volvió a extender la mano para acariciar mi mejilla.
━━ No me gustan━━ volví a apartar su mano, pero él rápidamente agarró la mía. El aroma del ámbar gris inundó mis fosas nasales.
━━ ¿De verdad no te gustan? A mí sí que me estás empezando a gustar, hermanito. Sobre todo cuando veo cómo te acercas a mí aunque tengas miedo...━━ se acercó a mi oído, su cálido aliento cayendo directamente sobre mi piel━━ Es adorable.
Esa fue la última frase que me dijo el Príncipe heredero aquella noche. Cuando se marchó, los sirvientes que normalmente me atendían finalmente pudieron entrar.
Al parecer, los hombres del Príncipe heredero los habían bloqueado fuera del palacio, impidiéndoles entrar y escuchar mis llamadas de auxilio. Cuando los sirvientes vieron la herida en mi frente, entraron en pánico y se apresuraron a usar sus placas de identificación para llamar al médico imperial.
Poco después, el Emperador también se enteró.
La Consorte Imperial Zhuang y el Emperador acudieron apresuradamente. Cuando la Consorte Zhuang vio la herida en mi frente, palideció.
━━ Congxi, ¿te duele?━━ se apresuró a sentarse a mi lado, sosteniendo mi rostro con ternura entre sus manos mientras examinaba cuidadosamente la herida de mi cabeza. Aunque en realidad no se podía ver mucho, ya que mi frente había sido vendada.
Negué con la cabeza.
A un lado, el Emperador frunció el ceño y preguntó al jefe del Departamento Médico Imperial:━━ Doctor Qin, ¿cómo está la herida de Congxi?
━━ La herida del Noveno príncipe es superficial, no ha afectado el interior. Con un cuidadoso tratamiento durante un tiempo, se recuperará. Este humilde servidor prescribirá algunas medicinas nutritivas para fortalecer el cuerpo del Noveno príncipe.
Al oír esto, el Emperador salió con una mirada sombría. Poco después, lo escuché reprendiendo a alguien fuera, ordenando que trajeran al Príncipe heredero.
No sé si fue por la herida o porque normalmente a esta hora estaría durmiendo, pero pronto me sentí extremadamente somnoliento. La Consorte Zhuang notó mi cansancio de inmediato y me dijo:━━ Si tienes sueño, duerme. Tu madre está aquí, nadie podrá hacerte daño. No tengas miedo.
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El despreciado y sombrío shou renació. Dong Shi Niang.
Random[Primera persona] >>Sinopsis no completa: A los trece años, Chundi finalmente descubrió que había sido intercambiado al nacer. No era el hijo de un jugador, sino el hijo de la familia Lin, la más rica de Suzhou. Regresó a su verdadero hogar...