Capítulo 97. Gran Nevada (6).

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Capítulo 97. Gran Nevada (6).




Extrañamente, no sentía miedo de este insecto gu, incluso quería extender mi mano para tocarlo. Cuando finalmente se movió hacia mi hombro posterior, extendí mi mano y lo toqué suavemente con la punta de mi dedo.

El insecto gu se detuvo inmediatamente, pero poco después, desapareció bajo mi piel, solo quedó una mancha carmesí que tardó en desvanecerse.

El insecto gu debía estar relacionado con Lin Chongtan, pero no sabía exactamente para qué servía. ¿Me mataría?

Al ver que el insecto no volvía a aparecer, lo pensé un momento y me volví a poner la ropa. Los sentimientos del Príncipe heredero hacia mí se hacían cada vez más evidentes, hasta el punto de decir tales... tales palabras escandalosas incluso al jefe de la Academia Imperial de medicina.

Parecía que él consideraba el trono como algo ya asegurado.

Yo definitivamente no quería ser ningún consorte real, ni quería que las vidas de la Concubina Imperial Zhuang y los demás estuvieran en sus manos.

Tenía que encontrar la manera de ver al Príncipe Dongxuan, pero antes, necesitaba reunirme con el Maestro Nacional.

Antes de dormir, fui a ver nuevamente a la Concubina Imperial Zhuang, y solo regresé a mis aposentos cuando vi que dormía tranquilamente.

Mañana habría muchas cosas que hacer, necesitaba descansar bien.

Sin embargo, apenas me había dormido cuando alguien me despertó. No era cualquier persona, era el Príncipe heredero.

Por alguna razón había regresado, el cielo afuera apenas comenzaba a aclararse, con un rayo de luz filtrándose por la ventana de flores.

Cuando abrí los ojos y vi al Príncipe heredero, estaba tan cansado que no podía pensar con claridad. Apenas había dormido una hora.

Cuando me levantó en brazos y comenzó a desabrochar mi ropa, mi conciencia apenas comenzaba a regresar.

Me resistí repentinamente, pero lo frustrante era que mi fuerza nunca era suficiente contra estas personas, ni contra Lin Chongtan ni contra el Príncipe heredero. Me inmovilizó fácilmente y procedió a bajar el cuello de mi ropa.

La ropa de verano era especialmente ligera y suave, y como solo llevaba ropa de dormir, con un tirón la manga se deslizó hasta mi codo.

Me entró el pánico e intenté subirla, pero el Príncipe heredero hizo lo mismo con el otro lado.

En ese momento, sin necesidad de mirarme en un espejo, sabía que mi aspecto era desaliñado. Estaba arrodillado frente al Príncipe heredero, con el cabello largo hacia adelante, forzado a apoyar mi torso contra su pecho. Mi rostro estaba rojo de vergüenza mientras luchaba en vano, pero me detuve ante su baja reprimenda.

━━ No te muevas, quiero ver ese insecto.

Me quedé inmóvil, mirando el rostro del Príncipe heredero. Sus ojos rasgados tenían venas rojas, como si no hubiera dormido en toda la noche. Su expresión era seria, con el ceño fruncido, sin el habitual tono burlón hacia mí.

Dejé de resistirme, y él pareció tomar un profundo respiro antes de volver a abrazarme contra su pecho. Varias veces sentí sus dedos rozar suavemente mi espalda, como plumas.

Además, su respiración era más pesada de lo normal, si no lo hubiera visto con mis propios ojos, habría pensado que se enfrentaba no a un pequeño insecto gu, sino a una bestia cien veces más feroz.

El despreciado y sombrío shou renació. Dong Shi Niang.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora