El despreciado y sombrío shou renació. Dong Shi Niang.

Capítulo 75. Rocío Frío (4).

Capítulo 75. Rocío Frío (4).

En realidad, la muerte a veces puede ser una liberación para una persona. Cuando alguien muere, los demás pronto lo olvidan, olvidan lo que hizo. Solo mientras Lin Chongtan viva, la gente recordará para siempre lo que hizo, y siempre será señalado por la sociedad.

Lo mismo que lo elevó lo hundió. La familia Lin de Suzhou fue ennoblecida gracias a Lin Chongtan, y también fue desterrada por sus acciones. La familia Lin probablemente odie ahora a Lin Chongtan, y él, habiendo sido expulsado del registro familiar, difícilmente se lleve bien con ellos.

Al escuchar mis palabras, la expresión violenta del Príncipe heredero no se suavizó, pero la sugerencia que acabo de hacer probablemente sea la mejor manera de manejar la situación. El Emperador envió al Príncipe heredero con la esperanza de que pudiera dar un paso atrás. Lin Chongtan podría escapar de la pena de muerte, pero no del castigo.

En nuestra dinastía, aparte de la pena capital, el castigo más severo es el destierro. Los lugares de destierro son zonas no desarrolladas, ya sea en el extremo sur con su clima malsano, o cerca de la frontera norte con su frío glacial. Muchos funcionarios desterrados casi nunca logran salir con vida de estos lugares.

━━ Hermano Príncipe heredero━━ lo llamé de nuevo.

El Príncipe heredero cerró los ojos, apoyando la cabeza en una mano. Su hermoso rostro andrógino estaba sombrío. Después de un largo rato, exhaló profundamente y dijo con evidente ira contenida:━━ Que así sea entonces, pero no te preocupes, hermano, no dejaré que viva cómodamente.

Asentí y añadí:━━ Gracias, hermano Príncipe heredero.

Al día siguiente de que el Príncipe heredero aceptara mi propuesta, se emitió el decreto para tratar el caso de Lin Chongtan. Debía ser expuesto en las calles de la capital junto con la familia Lin de Suzhou, y luego desterrado a Anhua, sin permiso de abandonar Anhua por el resto de su vida. Si desobedecía, cualquiera podría llevar su cabeza a las autoridades para reclamar una recompensa.

El día del destierro de Lin Chongtan, el clima en la capital no era bueno. Empezó a nevar desde la mañana y no amainó hasta el mediodía. A pesar de la nieve, esto no disminuyó en absoluto el entusiasmo de la gente por ver la procesión.

Antes del mediodía, la calle Maxing, la más concurrida de la capital, ya estaba llena de gente. Dos filas de dieciséis soldados imperiales mantenían el orden y evitaban que los prisioneros escaparan.

La familia Lin de Suzhou había llegado a la capital el día anterior y apareció en la calle Maxing antes que Lin Chongtan.

Mi padre biológico, mi madre biológica, mi hermano mayor de sangre y mis hermanos gemelos menores estaban encadenados y vestidos con ropas burdas de cáñamo. Lin Kunjie, siendo el primero en conocer el decreto y con su experiencia, solo mostraba una expresión sombría.

La señora Lin, por otro lado, no dejaba de llorar. Habiendo vivido una vida de lujo durante décadas, probablemente no podía aceptar este tipo de existencia.

Mi normalmente severo hermano mayor, Lin Zongting, que solía mantener un aire de autoridad tanto en público como en privado, ahora no podía mantener esa dignidad mientras era observado y criticado por la multitud como si fuera un mono de feria.

Los gemelos, no acostumbrados a esta situación, lloraban desconsoladamente. Él levantó la mano y le dio una bofetada a Yunsheng, el menor de los gemelos, tirándolo al suelo.