Perder a la persona amada | Freenbecky (G!P)

Capítulo 13 - Recordando

Después de mi crisis en la ducha, me sequé y me envolví en mi pijama más cálida. Había una soledad fría y dolorosa que parecía que no podía sacudir. Sentí que nunca entraría en calor. Me metí en la cama, y tomé el diario que había dejado en mi mesita de noche. De alguna manera, leer mis diarios hacía más difícil estar lejos de William, también eran reconfortantes. Y a pesar del hecho de que no podía leerlos sin llorar, eran la única manera de mantenerlo cerca de mí. La llamada telefónica de William había interrumpido mi lectura el otro día y abrí el diario a donde había metido el marcador de la cinta.

Hubo un sinfín de entradas que detallaban las frustraciones con las clases y la falta de tiempo que William y yo teníamos el uno para el otro, pero me detuve cuando llegué a febrero de mi primer año de universidad.

William es increíble. Planeó un fin de semana para que celebráramos San Valentín. Tuvimos una conversación larga y seria. No del tipo de conversación aterradora de "podríamos romper", sino de nuestro futuro. Se puso muy serio y me dijo que quiere casarse conmigo algún día. Ya habíamos hablado de ello de manera indirecta en el pasado, pero nunca antes había dicho esas palabras. Queremos poner nuestras vidas en orden antes de casarnos. Ya tenemos muchas presiones en nuestras vidas con la escuela. Por ahora, estamos contentos con cómo están las cosas. Sucederá algún día, así que el momento en que suceda realmente no importa. Ahora nos tenemos el uno al otro, y eso es lo que importa.

Estoy enojada con William. He estado estudiando como loca y han pasado casi dos semanas desde que pudimos estar solos. Seo Taiji iba a estar fuera el fin de semana, así que se suponía que íbamos a pasar la noche del viernes en su dormitorio, solo los dos. Pero cuando llegué, Juno y Lee Soo estaban allí viendo baloncesto. Estaba tan enojada que cuando entré por la puerta y los vi allí, simplemente me di la vuelta y me fui. William ni siquiera me siguió. Volví a mi dormitorio y apagué mi teléfono. Sé que probablemente reaccioné exageradamente, pero me dolió. Y quería pasar un tiempo a solas con él con tanta desesperación. Fue casi todo lo que me ayudó a superar la semana, y descubrir que ni siquiera le importaba... duele. Creo que me he gastado media caja de Kleenex llorando. Uf. Debería irme a dormir. Tal vez todo tenga más sentido por la mañana.

Está bien, ahora me siento un poco mal. Me desperté alrededor de las dos de la mañana y William estaba golpeando mi puerta. Me rogó que volviera a su habitación para hablar y se veía tan frenético que no pude decirle que no. Aparentemente, no me vio aparecer en su dormitorio y en realidad no se había olvidado, así que no puedo estar tan enojada. Creo que ambos reaccionamos exageradamente a una tonta falta de comunicación. Fue extraño, es la primera pelea real que hemos tenido. Y probablemente no será la última. Pero supongo que, considerando todo, no es tan malo. Al menos sabemos que podemos pelear y reconciliarnos.

El verano debería ser bueno. Hay dos secciones de verano para las clases y solo estoy tomando una sola clase por sección, y luego trabajando unas pocas horas a la semana en algún bufete de abogados. Desafortunadamente, no es el mismo en el que está William. Volverá al que trabajó el año pasado y volverá a hacer prácticas. No tenían ninguna vacante para mí, pero Prasertwattanakul me puso en contacto con alguien que conoce. Es bastante genial. Son solo veinte horas a la semana, y realmente lo único que haré será presentar documentos y correr a buscar café para la gente, pero estoy emocionada y es una cosa más para poner en mi currículum. Tengo una lista mental de verificación para mi vida y sigo marcando cosas. Cada marca de verificación me acerca más a mis objetivos reales. Un trabajo en Armstrong and Associates, casarme con William y tener una familia con él.

Seguí hojeando el diario, sabiendo que la mayor parte era lo mismo: mi frustración por no tener nunca suficiente tiempo con William, las presiones de mi carga de trabajo y lo mucho que lo amaba. También hubo algunas peleas más. Nada grave, solo frustraciones menores que habíamos descargado el uno con el otro. Frustraciones con mi madre también, a medida que nos distanciábamos cada vez más.