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Satori comenzó a guardar todas sus cosas una vez que terminó la lección. Cuando terminó, salió del aula para ir a almorzar como todos los demás estudiantes. Se encontró con Ushijima en el pasillo y, como siempre, fueron juntos a la cafetería, con Tendo hablando emocionado sobre el último número de Shounen Jump que leyó anoche en lugar de dormir y Ushijima en silencio como siempre. Tendo notó que los estudiantes detrás de ellos susurraban, pero no les dio mucha importancia, probablemente estaban hablando de Ushijima y de cómo podría ser amigo de él, nada nuevo para Satori.
Una vez que llegaron se acercaron a la mesa donde estaban sentados algunos de sus compañeros de equipo y tomaron asiento con ellos. Tendō continuó con sus divagaciones, repitiendo las mismas cosas que acababa de decirle a Ushijima a los demás, mientras dejaba su mochila en el suelo a su lado. Movió su mirada hacia la mochila para sacar su bento, pero detuvo sus movimientos cuando notó un trozo de papel pegado a ella. Satori frunció el ceño confundido, no recordaba haberlo visto antes, así que lo tomó para ver qué era. Se quedó en silencio de repente una vez que leyó lo que estaba escrito en el papel, ganándose algunas miradas perplejas de sus compañeros de equipo.
—¿Está todo bien Tendō? —le preguntó Reon a su amigo, quien no respondió nada. Tendō rápidamente recogió sus cosas y salió furioso de la cafetería, sin decir una sola palabra.
[...]
Entraste al gimnasio y te dirigiste al vestuario de los chicos, donde sabías que los encontrarías justo después de la práctica. Una vez que estuviste frente a la puerta, tocaste y preguntaste si podías abrir sin ver a nadie desnudo. Abriste la puerta cuando escuchaste su permiso.
"Hola a todos, ¿dónde está Satori? No he sabido nada de él desde antes del almuerzo", preguntaste preocupada, generalmente te enviaba mensajes de texto por la tarde y justo antes de la práctica, así que era extraño de su parte.
"En realidad, la última vez que lo vimos fue en el almuerzo, no vino a la práctica hoy", respondió Semi con una confirmación de los demás. Sabías que algo pasó, una cosa era que no te enviara mensajes de texto, otra cosa era que se saltara la práctica. Amaba el voleibol con todo su corazón, lo hacía sentir bien. Nada podía impedirle jugar, incluso si estaba enfermo, iba a la práctica, para tu disgusto.
"¿Alguien sabe si pasó algo?" Tal vez podrían darte una explicación y así dejarías de preocuparte tanto.
"Solo sabemos que cuando estaba sacando su almuerzo de su mochila, de repente se calló, y cuando le preguntamos si todo estaba bien, simplemente salió furioso de la cafetería", te explicó Goshiki, asentiste sonriéndole. Les agradeciste y te disculpaste por tu "interrupción", luego saliste del gimnasio, rumbo al dormitorio de Satori, donde esperabas poder encontrarlo.
Una vez que estuviste frente a su dormitorio, tocaste la puerta esperando una respuesta, que no llegó, lo que implicaba que no había nadie allí. Pero podías escuchar música de videojuegos desde donde estabas, así que sabías que él estaba allí. Intentaste abrir la puerta, esperando que no estuviera cerrada con llave, y afortunadamente no lo estaba.
