-Wow, ¿Qué fue eso Azrael?- preguntó Yukío con curiosidad.
-Bueno, ya sabes tengo que hacerme respetar- respondió él.
-¿Los golpes en tu cara también fueron a causa de hacerte "respetar"?
-Eso fue otra cosa en realidad...
-Eso fue por imbécil- dijimos Leo y yo.
Yukío rió levemente divertida por la situación.
-Parece que "la muerte" es más complicada de lo que pensaba- comentó ella.
-Ni te imaginas cuánto- exclamó Leo.
Los cuatro nos sentamos para charlar a gusto. Hablamos de cosas al azar un buen rato. Desde lejos, Michael observaba a Yukío con curiosidad...tenía unas técnicas de lucha bastante efectivas y su uso de armas era increíble...tal vez tenía potencial.
-Entonces...¿Te curó Rafael?- pregunté cruzada de brazos.
-Si, Rafael se encargó de mí porque tú te fuiste- respondió Azrael con una pequeña sonrisa.
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-En realidad no me interesa.
-Ugh, que fría...
Rodé los ojos con impaciencia.
-Azrael, no esperes que te mima y todo eso solo porque anoche te traté bien- respondí.
-Oh, pero preciosa...no parecía molestarte nuestra cercanía anoche.
-¡Ya callate!
-Bien, bien...que sensible...
-Después de todo...¿Qué hacen aquí?- pregunté mirando a Leo.
-Bueno, yo vine a hacer una invitación y...Azrael a molestar- respondió él.
-¿Una invitación?
-Ajá, Galim dijo que los arcángeles estamos trabajando mucho...menos Azrael...
-¡Ey!- se quejó Azy.
-Como sea, así que él propuso que nos vayamos a un día de playa, y me dijo que te invitara...también dijo que tu amiga Yukío puede venir con nosotros.
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