"Te daré tiempo para que lo pienses, no me contestes ahora -ladeó su cabeza hacia un costado- eso sí, necesitaría que te deshagas de esa vida que depende de ti."
...
"...Esa vida que depende de ti" Aquellas palabras resonaron en mi cabeza durante el resto de la noche de Halloween. ¿Una vida dependiendo de mí? No entendía a qué se refería. ¿Asphodel? ¿Anthony? ¿Molly? ¿Yushiro? Quizás...¿Algún arcángel? ¿Eliézer? ¿Algún demonio? Aquella noche no pude dormir mucho, pensando en aquél encuentro y las palabras de Shamsiel.
FLASHBACK... Aquél día habíamos decidido tener una pequeña reunión, Luzbel quería debatir como se llevaría a cabo la rebelión. Todos los presentes eran aliados a nuestra causa, todos compartían nuestros ideales, pero cada uno tenía sus propios métodos.
-Padre demostró extrema confianza en mí el dia en el que me confío la protección del Edén -exclamó Shamsiel- yo tendría que ser el encargado del engaño contra Eva, ¿No?
-Luzbel fue el de la idea, que él lo haga -comentó Gadreel- en caso de que saliera mal, el único culpable sería él, nosotros no tendríamos nada que ver.
-Si cae uno, caeremos todos- argumentó Baal Zebul (Belcebub), quién estaba sentada a mí lado.
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-Palabras sabias de una de nuestras queridas hermanas- apoyó Remiel.
-Mujeres, siempre quitándole lo divertido a la vida- comentó burlón Azkeel.
-Pues las mujeres somos las únicas que pensamos antes de actuar- exclamé frunciendo levemente el ceño.
-Mujeres, buen punto -la mirada de Shamsiel ahora se había posado en mí- mi querida Nilüel, ¿Qué piensas sobre nuestras ideas? Podemos seducir a Eva, enseñarles de magia oscura, a predecir con el sol, rituales.
-Solo buscamos ser libres, no corromper totalmente a la humanidad- comentó Luzbel en forma de defensa.
-No te lo pregunté a ti, Lulu. Quiero saber la opinión de nuestra hermana Nilüel.
-No estoy de acuerdo, no es necesario corromper totalmente las almas de esos humanos- exclamé con desición.
-Que lástima -los ojos de Shamsiel nunca me abandonaron- serías una poderosa hechicera si te lo propusieras, sin contar tus habilidades de seducción, serías invencible.
-La hechicería no está dentro de mis objetivos. El deseo de ser libre no significa que quiera perjudicar a Padre.
-Aun te faltan saber cosas, Nini, aún eres una criatura demasiado ingenua. Pero nadie puede escapar del inevitable desgaste mental que conlleva ser un ángel. Solo eres joven, te falta experiencia.