Sunbae and I || Suga || 1y2temp

(ST) .020

Jukyung trata de hablar para llamar la atención de Sol pero ésta no le hace caso. No se le entiende bien, pero está diciendo su nombre.

- ¿Qué, qué, QUÉ? - se arrodilla y le quita la tela que cubria su boca.

- Sol, tú no eres esto. Por favor, detente. Eres una buena persona, lo sé - le dice Jukyung mientras ella lo observa de cerca.

- Ésta soy yo Jukyung - le dice y vuelve a ponerle la tela. 

Aprovechando que se alejó de nosotros, Jukyung se arrastra hasta llegar a mi lado. Sol puso mal la tela en la boca y logra quitársela.

- Perdón por no poder cumplir mi promesa - una lágrima recorre su mejilla. Sus palabras me hacen dar cuenta de la clase maravillosa de persona que es él. Sin darme cuenta, lágrimas se forman en mis ojos y no tardan en caer. 

Jukyung, eres una de las personas más maravillosas que conocí en mi vida, aunque me hubiese gustado conocerte en otras circunstancias pienso, le sonrío tímidamente y él hace lo mismo. Apoyo mi cabeza en su hombro y cierro los ojos por unos segundos. 

- ¡JÁ! ¿AHORA INTENTAS SEDUCIR A JUKYUNG? ¿ESTE ES EL AMOR QUE SIENTES POR MI? - le vocifera a Jukyung. 

- Con todo lo que he hecho por ti noona, ¿aún no reconoces mi amor? - pregunta herido.  

- Ven aquí - ignora a Jukyung, me toma del cuello de la remera y me incorpora. Me lleva hasta la cocina y me deja allí, sentada en una silla. 

En ese momento, la luz de un auto se mezcla con la luz débil de la cocina y Sol corre hacia la ventana.

- No... no, no, no - empieza a repetir desesperada. Yo me limito a verla caminar de aquí para allá, con los nervios de punta. Jukyung comienza a gritar su nombre desde la otra habitación. Me levanto, doy saltos para llegar a la habitación y veo que Sol y Jukyung están hablando.

Unos golpes a la puerta hacen que los tres dirijamos la vista hacia ella.

- ¡SOL! ¡SE QUE ESTÁS AHÍ! ¡ABRE! - se escuchan los gritos de Yoongi mezclarse con los golpes.

Un poco de alegría brota de mi cuerpo, entre tanto miedo y tristeza que he estado sintiendo desde que fui secuestrada, al oír su voz. Grito su nombre, aunque con la tela en mi boca es difícil entenderme, y doy saltos hacia la puerta.

Cuando estoy por llegar, Sol me agarra de las piernas y me hace caer de cara al suelo. Los gritos de Jukyung, hacen que Yoongi golpee aún más fuerte. Intento con todas mis fuerzas quitar la tela de mi boca y lo logro.

- ¡SUNBAE ESTOY AQUÍ DENTRO!

Sol me da una cachetada fuerte y los golpes en la puerta cesan, pero solo por unos segundos. Ahora golpes más violentos sacuden la puerta. 

Jukyung intenta calmar a Sol pero ésta no parece oírlo. Sólo escucha el ruido de la puerta que está por caerse en cualquier momento.
Sale corriendo a la cocina y, en cuestión de segundos, regresa a mi lado. Me toma del brazo, me pone contra ella y coloca su brazo por mi cuello, mientras que con el otro sostiene un cuchillo y lo apoya en mi cuello.

Los golpes en la puerta se mezclan con la voz de Jukyung. Con cada golpe, Sol parece enterrar un poco más el cuchillo en mi cuello y yo me hago a la idea de que éste es mi fin. 

- ¡MALDICIÓN SOL! ¡ABRE!  

La voz de Yoongi la hace temblar como una hoja. Se escuchan 3 golpes más que sacuden la puerta y se abre.

Es la primera vez que veo a Yoongi después de estar dos semanas aquí; tiene el cabello despeinado, sudor cae por sus mejillas y su pecho sube y baja por su respiración entrecortada. Clava la mirada en la escena que se desarrolla frente a él: Sol sosteniendo un cuchillo en mi cuello. Atrás de él, Hoseok tiene la misma expresión de sorpresa en su rostro.

Jukyung se levanta y dando torpes saltos, se acerca a ellos. Hoseok lo ayuda y lo desata.

- Sol, déjala ir - le dice Yoongi tratando de sonar calmado.

Lágrimas llenan mis ojos y hacen que mi vista sea borrosa. 

- Yoongi, ¿tan difícil era quererme? - su voz se quiebra y el frío filo del cuchillo se funde de a poco con mi piel. Frunzo mi rostro haciendo una mueca de dolor.

- ¿Crees que haciendo esto te querré? Sol, tu fuiste mi primer amor, siempre te voy a estimar. Por favor, no quieres hacer esto - da unos pequeños pasos hacia nosotras pero ella retrocede los mismos pasos, obligándome a mi, a hacer lo mismo.  

- Si no estás conmigo, no estarás con nadie más...

Con sus palabras, cierro mis ojos y los vuelvo a abrir, para ver a Yoongi una última vez.