Pese a que la Marié vieja era muy alocada y le gustaba la diversión, nunca había salido sin la extrema autorización de su padre, es más, siempre el entorno de amigos con los que salía eran hijos de sus compañeros de trabajo y él hecho de ahora ir a una casa que me era completamente extraña con personas totalmente desconocida era más que romper las normas por lo que mi estómago pareciera explotar sí me descubrían.
Luego de un par de horas, en la cual Mica me obligo a ponerme una camisa más ajustada estábamos camino a la casa de Naomi nos montamos en la vieja camioneta de Mica.Ya una cuadra antes de llegar estaba apilada de autos, así que decidimos aparcar más atrás.
- Sí que tiene una casa grande– Le murmure a Mica a medida que avanzábamos a la mansión.
- Pues claro hasta el bosque es de su familia– Contesto relajada.
- El bosque?– Pregunte incrédula– Esas cosas no son parte de los estados?.
- Su familia es casi la fundadora del Estado, te creía más lista– Le golpee el brazo y ella río.
Nos acercamos a dos chicas que llevaban ropa holgada como la que usaba Mica, lo que me hacía cuestionar por qué me había obligado andar con una camisa ajustada cuando ella vestía casi como la perfección gitana andante.
- Marié, ella es Irma y Katy – Me presento a una chica castaña muy baja y delgada junto a una rubia muy exuberante.– Chicas ella es Marié.
Estábamos en el gran patio trasero de Naomi, que aunque aún no podía creerlo daba camino al bosque.
No podía creer que un bosque tan fangoso existiese en este desértico lugar por lo que me llamo la atención ir aventurar un poco más.
Había un grupo alrededor de una fogata instalado en el suelo, así que nos aproximamos a ellos para luego sentarnos, reconocí muchos rostros de la escuela pero de seguro ellos ni si quiera sabían quién era yo.
- Avellana– Se refirió a mí un chico con unos hermosos ojos celeste.
Dirigí mi mano hacia a mí en forma de duda y él asintió con una gran sonrisa.
- Sí, no te había contado... Él es James, y está muerto por ti– Contó Mica sincera y mis mejillas comenzaron a enrojecer.
- Mica!– Le murmure en forma de regaño.
- Tiene razón Avellana, estoy coladisimo por ti– Afirmo seguro.
Sus ojos azules tenía unas pequeñas venas rojizas, definitivamente este chico está bajo los efectos de algún tipo de droga pero no quitaba que tuviese bonitas facciones.
- Ehm...Gracias– Murmure.
- Quieres un poco?– Me ofreció una colilla de una especie de cigarrillo.
Definitivamente eso no era tabaco, sino que marihuana.
- Bueno sí ella no quiere, yo quiero– Lo tomo la rubia exuberante que sí mal no recordaba debía ser Katy. Inhalo de esto y se lo paso a Mica– Y por qué eres tan jodidamente callada, eh?– Me increpo.
- No es que lo sea– Conteste neutra– Solo que no hablo con gente que no me interesa.
- Uh!!– Aclamo James– Aparte de tus fuertes ojos posee un fuerte carácter y me fascinas más– Me murmuro lo último en el oído, lo cual era incómodo.
- Dios, porque mi novio no viene!–Se quejó.– Llamare nuevamente a ese Schwartz.
La chica Katy se notaba considerablemente molesta, frunció el ceño de una manera única mientras que Mica la tranquilizaba con el brazo y le tendía la colilla de nuevo.
- Déjala es que odia que le quiten protagonismo– Me susurro Mica en el oído.
- Debo confesar que tus piernas son las mejores en toda Nevada– Me miro James mientras me daba pequeños golpecitos en la pierna y yo retiraba su mano disimuladamente.
En cuanto iba a responder el sonido de una moto hizo que nos volteáramos todos de inmediato, mientras el chico quitaba contacto a la moto quito el casco de su cabeza para luego menear su alborotado cabello.
- Él es mío– Sentencio la rubia y yo deje de mirarle.
- Tranquila no quiero nada con un idiota como él– Hice un gesto de asco.
- Idiota haz dicho?– Murmuro tras de mí.
No podía entender como había escuchado y como se había acercado de una manera tan rápida como para sentir su respiración en mi cuello.
- Y yo que pensaba que ya nos llevábamos bien– Murmuro ronco y sentí mi corazón explotar.
- Como estas Dani?– Se levantó Katy bajando notoriamente su vestido para luego abrazarle.
- Katy es la ex de Daniel– Me susurro Mica en el oído.
- No que era la novia?– Le susurre de vuelta.
- Eso es lo que inventa ella–Respondió.
- Pero por qué no me extraña– Murmure obvia.
- Haz dicho algo?– Sentencio de nuevo enojada la rubia, yo alce las manos en signo de resignación.
No podía entender como me escuchaban todos mis desafortunados comentarios o quizás estaba hablando demasiado fuerte, aquello no era bueno ya que sí ellos estaban en la cúspide de la cadena de seguro podían tener el poder para categorizarme como anormal y hacerme la vida imposible.
- Tranquila que Leblanc debió ser la chica genial que se metía con todos en su escuela– Agrego la voz del chico de ojos verdes.
Me levante abruptamente quedando en frente a él, muy cerca de él para mi sanidad mental. Él sólo tenía una sonrisa divertida en sus labios que solo quería besar... digo golpear.
- Tú de que vas Daniel?– Gruñí– No sabes nada de mí vida y menos tienes el derecho de llamarme puta.
- Oh sí que lo sé– Dijo mirándome desafiante pero aun con una pizca de diversión.
- Y qué es lo que sabes, eh?– Le increpe.– Por lo que recuerdo no he cruzado más de dos palabras contigo.
- Sé por ejemplo que te la das de chica fuerte y luego andas llorando por los pasillos– Dijo mostrando sus dientes perlas.
- No sabes ni mierda de mí vida!– Espete en vuelta de cólera.
Comenzaba a inundarme la cólera, y aquello tenía solo un camino ponerme a llorar como estúpida por lo que estaba evitando a toda costa.
- Sé que lo que digo es verdad como también sé que no tienes madre y por eso te crees más fuerte que los demás– Y mis ojos se abrieron como plato y por un momento sentía que mis piernas no se movían.
La mandíbula de él pareció tensarse y su rostro lucía arrepentido o eso quise creer. En un esfuerzo sobrehumano intente no llorar pero sentía que estaba siendo inútil y la mirada de él se desvió para así dejar de verme a los ojos.
- Te has pasado Schwartz – alcance oír a Mica pero mis piernas fueron más rápidas y corrí bosque adentro.
***
Imagino algo así a Marié, subire dos partes más por la tardanza!!
besos!!
ESTÁS LEYENDO
Subnormal.
RomanceMarié Leblanc hija de un estricto militar, John Leblanc, deberá cambiar su vida luego de la extraña y repentina muerte de su madre pero este no es la única cosa que deberá enfrentar ya que deberá aprender que no puede ser siempre la chica dependient...